Reforma Laboral

Reforma Laboral.

1900 fue el siglo de los movimientos sociales, en todo el mundo se descubrió una nueva forma de hacer política, el racionalismo del siglo diecisiete había despertado en el ser humano la importancia del razonamiento como la base del progreso social; incluyendo la libertad, la justicia, la noción de que todos somos iguales y que nadie podía quebrantar los derechos de terceros. Sin embargo, aún así países como Francia, Inglaterra, España, Estados Unidos de América, entre otros; quienes promovían estos ideales, eran los que aún mantenían colonias en casi todos los continentes. Con la revolución mexicana en 1910 se reivindicaron aquellos derechos laborales que no figuraron en las obras de los pensadores Ilustrados como; Voltaire, Montesquiu y Diderot; que hasta ese momento no se tomaban en cuenta aún cuando eran los que sostenían y promovían el avance de las potencias: los obreros.

Tuvieron que pasar muchos años de lucha, de asesinatos y derramarse sangre para que estos derechos fuesen reconocidos en parte. En Rusia un intelectual desempolvó una obra que había sido olvidada entre miles de máquinas, y que muchos hombres que vivían para ellas no conocían y sin embargo era una alternativa a la evolución de su miserable forma de vida, el título no era muy visible pero se alcanzaba a leer “ el materialismo histórico” y como autor figuraba un completo desconocido y que en su época había sido vetado, marginado y desterrado de su tierra natal; su nombre Carlos Marx. Que para poder sobrevivir tuvo que acompañarse de su amigo Federico Engels. Otro de los personajes históricos que también sustentó la lucha de clases es Lenin. Personaje que puso en práctica la teoría del materialismo histórico con el pueblo Ruso; o sea el socialismo.

Con las aportaciones de la lucha obrera y de otros intelectuales el pensamiento de Marx se convierte en la bandera política de la lucha de clases en todo el mundo. Lenin al llegar al poder en Rusia hace de éste escrito su constitución para la restauración de una Rusia enfrascada en conflictos bélicos por los intereses de la nobleza que eran quienes ostentaban el poder. Este movimiento político – social poco a poco cobra fuerza y da lugar a uno de los cambios más importantes de la historia, el comunismo. Este sistema económico convirtió al obrero en dueño de su fuerza de trabajo y de la producción, promoviendo el derecho a cada quien según su trabajo y su capacidad. Este régimen desterró totalmente la explotación del obrero, dignificó sus derechos y creó cooperativas en el cual se impulsaba la justa repartición de las ganancias generadas por su trabajo, evitando así que las riquezas producidas quedaran en las manos de unos cuantos.

El socialismo no fue bien visto por los países que basaban su desarrollo económico en la explotación del obrero (el capitalismo); vieron en este nuevo régimen la amenaza a sus intereses, el peligro que genera la equidad. Por eso iniciaron con intensas campaña de desprestigio hacia este tipo de sociedad, reactivaron sus cómplices internos y externos para sabotear el desarrollo del nuevo sistema económico. Este trabajo de zapa rindió sus frutos en 1989 con la caída del muro de Berlín. Con esto termina una etapa de esperanzas para los trabajadores. Esta experiencia demuestra que para los explotadores no hay fronteras ni descanso para perpetuarse en todos los rincones del planeta.

México nos es ajeno a estas experiencias, pues ha construido su historia a través de la explotación de sus obreros y campesinos. Se inició en la colonia con los indígenas en los campos y en las minas; hoy continúa la explotación en las ciudades y en los campos, no hay descanso para el trabajador. Aunque se hayan modificado las formas de explotación el acaparamiento aún existe.

México es un país que desde siempre ha sufrido la explotación del extranjero y de los empresarios nacionales. La lucha de los trabajadores ha sido permanente, en algunas han sido no para exigir sus derechos sino para sobrevivir. Estos sacrificios se vieron cristalizados en la constitución de 1917; donde en el artículo 123 se establecen: la jornada de ocho horas, descansos cada seis días de trabajo, derecho a vacaciones, servicios sociales; entre otros beneficios.

Hoy que se han modificado las formas de explotación, también se modifican las leyes para beneficiar aún más a los patrones. Actualmente con los gobiernos neoliberales, peleles de los empresarios nacionales y extranjeros, continúan entregando las riquezas nacionales y la fuerza de trabajo de los asalariados. Con la llamada reforma laboral, se modifica al artículo 123 para eliminar

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