LA PIEL PARTICIPA NOTABLEMENTE EN LA HOMEOSTASIS TERMICA DEL ORGANISMO
Enviado por dhrodriguezc • 3 de Octubre de 2013 • 1.657 Palabras (7 Páginas) • 1.402 Visitas
LA PIEL PARTICIPA NOTABLEMENTE EN LA HOMEOSTASIS TERMICA DEL ORGANISMO
DIEGO HERNANDO RODRIGUEZ CABALLERO
UNIVERSIDAD DEL TOLIMA
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD
MEDICINA
IBAGUE
2013
LA PIEL PARTICIPA NOTABLEMENTE EN LA HOMEOSTASIS TERMICA DEL ORGANISMO
DIEGO HERNANDO RODRIGUEZ CABALLERO
Taller: Fisiología de la piel y regulación de la temperatura
Profesor
Juan Carlos Ortiz Carrillo
Médico especialista en Ciencias Básicas Médicas
UNIVERSIDAD DEL TOLIMA
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD
MEDICINA
IBAGUE
2013
LA PIEL PARTICIPA NOTABLEMENTE EN LA HOMEOSTASIS TERMICA DEL ORGANISMO
Dentro de las variadas funciones que desempeña la piel en nuestro organismo, se encuentra la termorregulación, que de forma general e introductoria a este sorprendente proceso, Tortora y Derrickson (2006), lo definen como regulación homeostática de la temperatura corporal, según estos autores esta importante función se lleva a cabo por dos mecanismos; el primero de ellos corresponde a la liberación de sudor en la superficie de la piel y el segundo tiene que ver con la regulación del flujo sanguíneo en la dermis.
Antes de profundizar en los mecanismos de regulación de la temperatura corporal, es conveniente identificar las principales estructuras cutáneas que participan en dichos procesos termorreguladores desde un punto de vista estructural y funcional. Se trata de las glándulas sudoríparas ecrinas distribuidas en casi toda la superficie corporal y del plexo vascular superficial y profundo de la piel. Sobre las glándulas sudoríparas ecrinas, Ross y Pawlina (2008), explica que estas glándulas se disponen en forma tubular sencilla, enrollada, que presenta dos partes, una porción secretora conocida como adenómero glomerular que se ubica en la dermis profunda una porción canalicular llamada conducto excretor que es continuación de la primera porción y que se dirige directamente a la superficie de la epidermis.
Las glándulas sudoríparas ecrinas desempeñan un papel muy importante en la regulación de la temperatura gracias a la disminución de la misma, ocasionada por la evaporación del agua del sudor sobre la superficie corporal (Ross & Pawlina, 2008, p. 498).
Es pertinente conocer las principales características del sudor. En esta medida, el adenómero o porción secretora de la glándula secreta una sustancia que de composición parecida a un superfiltrado sanguíneo. Debido a que a que en el conducto excretor, se reabsorbe un poco de agua y sodio, hacia la superficie epidérmica se emite un sudor hipotónico. Así, el sudor es una solución acuosa hipotónica contiene un porcentaje menor de proteínas, cloruro de sodio, ácido úrico, amonio y urea en cantidades fluctuantes (Ross & Pawlina, 2008, p. 498).
Respecto a la sudoración termorreguladora que atañe a la presente revisión, Ross y Pawlina (2008) refieren que comienza en la región frontal encefálica así como en el cuero cabelludo, posteriormente, se continúa en la cara y de allí al resto del cuerpo, finalmente, esta sudoración se presenta en las palmas de las manos y en las plantas de los pies.
Ross y Pawlina (2008), aportan que el control de la sudoración termorreguladora es colinérgico a diferencia de la sudoración debida a emociones que es regulada por terminaciones adrenérgicas del sistema nervioso simpático.
Por otra parte, Alegre (s.f.) refiere que la piel está irrigada por los vasos perforantes del tejido celular subcutáneo y del músculo subyacente. Estos vasos forman dos plexos vasculares que tienen comunicación entre sí. Este autor anota que el plexo vascular profundo está ubicado en la unión dermo-hipodérmica (entre la dermis y el tejido celular subcutáneo), por su parte el plexo vascular superficial se ubica en la parte superior de la dermis reticular, desde donde emergen redes capilares que se reparten en la dermis pailar. La disposición de estas estructuras vasculares, tiene gran connotación en el proceso termorregulador que realiza piel, para efectos de conservar o perder calor por los eventos de vasoconstricción y vasodilatación respectivamente.
Para la adecuada compresión de los procesos termorreguladores, se hace necesario tener presente los conceptos de temperatura central y temperatura periférica (de la piel). Al respecto, Hall (2011) define como temperatura central a la temperatura de los tejidos profundos del organismo, se caracteriza por permanecer constante y tiene un margen de +- 0,6 °C, excepto cuando se presenta un cuadro febril. Como temperatura periférica se conoce la temperatura cutánea, que difiere de la central por esta puede variar de acuerdo a la temperatura del medio ambiente. Tanto la regulación de la temperatura central como la periférica representan un sistema asombrosamente diseñado que garantiza la supervivencia del individuo.
“La temperatura corporal es un balance entre producción, ganancia y pérdida de calor” (Silverthorn, 2008, p. 740). Esta definición, antecede a la referencia que hace este autor en relación a que los seres humanos somos animales homeotérmicos, lo que quiere decir que nuestro organismo es capaz de regular la temperatura interna o central en un intervalo pequeño, considerado como normal y que oscila entre 35,5 y 37,7°C.
Para tener en cuenta una consideración general respecto a la producción de calor, Hall (2011), establece que “la producción de calor es uno de los productos intermedios más importantes del metabolismo” y que está determinada por diversos factores, dicha producción de calor se denomina tasa metabólica del organismo.
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