Sistema respiratorio

REFLEXIÓN

Sistema Respiratorio

A lo largo de la exposición se entró en detalle con respecto al sistema respiratorio, yendo desde su anatomía hasta los tipos de respiración y finalmente las enfermedades o trastornos que se relacionan con este sistema.

Aunque todos estos aspectos son de gran relevancia, debemos reconocer los diferentes funcionamientos del sistema respiratorio que no solo hacen referencia a la oxigenación.

Uno de ellos ocurre cuando aspiramos aire a través de la nariz, pues no solo introducimos oxígeno a nuestro cuerpo, sino que, gracias a las células olfativas, podemos percibir aromas que se encuentren suspendidos en el aire. A su vez, esta habilidad influye el gusto y lo que saboreamos, ya que cuando las papilas gustativas identifican un sabor y las células olfativas identifican un olor, ambas envían señales al cerebro, que une la información para que podamos reconocer sabores de diferentes comidas.

Por otro lado, y como se sabe, cuando dejamos el aire salir por nuestra nariz está caliente, y esto se debe a que cuando entra en contacto con la mucosidad en las fosas nasales, el aire se calienta a temperatura corporal por los vasos sanguíneos. En conclusión, la nariz funciona como calefacción para el oxígeno que aspiramos.

A su vez, el sistema respiratorio juega un papel importante en nuestra voz, siendo que el aire que se encuentra en los pulmones es expulsado a través de la glotis, haciendo vibrar las cuerdas vocales y así emitiendo sonido. De igual modo, el volumen de nuestra voz se ve determinado por la fuerza que ejercemos al inhalar y exhalar.

Otra función importante (esta mucho más conocida) es el intercambio de gases. Cuando respiramos, el sistema lleva el oxígeno del exterior hasta las células del cuerpo y elimina los residuos, que en este caso sería el dióxido de carbono.

Un hecho bastante curioso, es que nuestro pH (el equilibrio entre ácidos y bases que existe en la sangre) se ve regulado por el sistema respiratorio, de modo que cuando el pH disminuye en presencia de altas concentraciones de dióxido de carbono, los pulmones aumentan la frecuencia respiratoria para exhalar el dióxido de carbono con mayor rapidez y así devolver el pH a su estado de normalidad.

Como se puede ver, este sistema tiene gran importancia en diferentes áreas que no son simplemente respirar y oxigenar el cuerpo (que también es bastante importante). Por ello, es más que necesario cuidar nuestro cuerpo y prevenir los daños que podría sufrir el sistema respiratorio. Cualquier inconveniente que lo afecte también afectará nuestra calidad de vida. Una mala oxigenación provoca cansancio, y al no estar en nuestras condiciones óptimas tampoco podemos rendir de la forma que lo hacemos habitualmente.

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