Ensayo-11 Minutos Paulo Coehlo

"Como en cada momento de nuestras vidas tenemos un pie en el cuento de hadas y otro en el abismo"

Paulo Coelho, gran escritor brasileño actualmente miembro de la Academia de letras en dicho país, excelente escritor preferido entre las masas, no dejando atrás el papel de Mensajero de la paz de Naciones Unidas y poseedor de diversos premios obtenidos gracias a su gran éxito por ser un fascinante narrador, con un gran entendimiento y comprensión de las preferencias de sus seguidores y dominio de un talento innato. Siempre con un toque místico para enroscar e introducir en sus historias a cualquier persona que tomase un libro suyo, retoca regularmente sus obras con un alto carácter filosófico, bastante lirico y almibarado, repleto de mensajes filosóficos y optimistas sobre la vida y la necesidad de la religión.

Once minutos nos es relatada como una historia de amor y de sexo, provoca una reflexión sobre el cuerpo y el alma y de cómo alcanzar la unión perfecta entre ambos. El libro no se centra en el estudio de la prostitución, en su análisis sociológico, como quiere dejar claro el autor, sino en la búsqueda o el encuentro del cuerpo y el alma. Romper esquemas del propio pensamiento humano hacia temas como la relación entre el sexo-amor y relacionarlo de una manera no solo reflexiva sino cierta y cotidiana que ha sido expuesta desde años anteriores a estar en una habitación de oscuridad de donde pocos se han atrevido profundizar y palpar.

De todas formas el libro ilustra, a veces con detalle, la luz y la sombra de la sexualidad femenina, llama por su nombre a casi todas las obsesiones y las reticencias de una mujer dispuesta o no a la entrega y, a través de voces no siempre válidas, comunica mensajes que debemos conservar en nuestro repertorio. Coelho nos hace pensar, como no solemos hacerlo, en la necesidad de “evitar las cosas que acaban convirtiendo el amor en esclavitud”, como tampoco en que el dolor seduce “cuando se viste de sacrificio” y mucho menos nos preguntamos “por qué estará el mundo tan preocupado por las apariencias”.

Aplastante sencillez argumental y narrativa, que facilita la lectura para todo tipo de lectores exigentes o no con los productos literarios siempre en la incesante búsqueda de la “mitad perdida, de aquella persona con quien somos compatibles en cada sentido de nuestra vida, tanto sentimental, mental, espiritual y por supuesto físicamente.”

La trama del libro se ve basada en una historia de Brasil, donde el autor (Paulo Coelho) da pie en el inicio con una elegante ironía, seguida de su explicación en su momento con un encuentro con unos seguidores suyos. Una niña quien es la protagonista llamada María, proveniente de una familia que se encuentra como cualquier otra, social y económicamente en las afueras de la gran ciudad, crece y se desarrolla como cualquier otra niña curiosa por la vida, tanto en su escuela conociendo a temprana edad lo es estar enamorada e ilusionada (en lo cual se basa toda la idea del libro, dando el matiz básico, el amor en sí), luego en la secundaria, con el conocimiento de cambios a nivel social de su edad como psicológicos y fisiológicos (besos, jugueteos), lugar en el que también se encuentra de nuevo con la palabra “amor” a lo cual también se sumo otra, la desilusión, llegando a la conclusión de que los hombres solo aportan dolor, frustración y sufrimiento sin poder llegar a enamorarse nunca más, supo también un punto dentro de su anatomía en la cual pudo relacionar el gozo y el placer (orgasmo), descubrimiento en lo cual, fue la primera en incursionar dentro de su círculo de iguales, aprendiendo diferentes técnicas para hacerlo (otro punto en lo cual se basa el libro, el orgasmo), desistiendo de esta forma una vida religiosa que pensó en un inicio, sin embargo, no concluyo el mismo pensamiento al perder su virginidad, pero buscase el intento de comprender, donde se encuentra el eje del placer en una pareja, teniendo ya un conocimiento amplio sobre los hombres y su manipulación, quizá cayendo de esta forma en el lugar de una mujer vacía que se desconocía incluso a sí misma.

Después de varios años, decide pasar un tiempo en las playas de Rio de Janeiro, en donde conoce a un empresario que le ofrece trabajar en el exterior y por la inocencia, falta de conocimiento o como se lo quiera llamar, ella decide ir, sin tomar en cuenta muchas cosas, solo tomo en cuenta el sueño anhelado que ella tenía: fama y fortuna como cualquier mujer que proviene de un pueblo pobre donde las cosas vistas en la “ciudad” son extremadamente brillantes. Una vez allá (Ginebra), da encuentro a una realidad nada parecida a lo que ella tenía imaginado, se encontró con el mal haber dentro de las relaciones humanas, dado que lo prometido nunca llego o palparse o mucho menos volverse realidad, la frustración que se presentaba constantemente, el maltrato, la resignación y adosado a este, un pensamiento efímero.

Luego de haber tenido varios conocidos, dado que había conseguido entrar en un curso en el cual se enseñaba el lenguaje natal, le informaron que en el lugar donde trabaja era un maltrato laboral y que las leyes de ese país eran muy estrictas en cuanto a ese tema, logró conseguir un abogado que la defendiese de este motivo, librándose así de aquel tormentoso trabajo para ella y obtener la remuneración que tanto anhelaba. María, ya con este suceso, puso en pie el sueño que la llevó al lugar donde se encontraba, ser modelo y exitosa, y gastó una buena cantidad en comprarse vestidos y tomarse fotos para enviarlas a agencias de modelos: Luego de un buen tiempo, llaman a su celular a preguntar si todavía se encontraba en ese número, logrando así una “cita de negocios”, una vez ahí, empezó lo que se podría llamar, un tormento para María, ya que se le hizo una proposición ambigua y que ella lo supo descifrar porque no era precisamente que la buscaban para modelar en el frente de una pasarela, muchos pensamientos se le cruzaron por la cabeza ese momento, y lo único que pudo pensar es en el que dirán si regresaba a su país sin el sueño anhelado, aceptando así, la entrada a un trabajo fácil para los ojos de unos, pero para sus ojos incluso denigrante a nivel personal y espiritual por así decirlo, la prostitución (que por cuestiones de la vida fue un trabajo y un estilo de vida que le tocó adoptar). Pensó que no le iría tan mal (después de todo gano mucho dinero por media hora de trabajo), buscó el lugar que ya le habían mencionado anteriormente, la Rue de Berne, e ingresó en lugar con un sugestivo nombre brasileño que se parecía a una discoteca, la cual atrajo su mirada por el nombre familiar que se conjugaba con su país de origen, el Copacabana,

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