Analogía de la historia "JUAN SALVADOR GAVIOTA" con la filosofía de Platón

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ANTROPOLOGÍA FILOSOFICA

Profesor: Msc. William Méndez Campos

Estudiante: Hellen Mora Jiménez

Analogía de la historia "JUAN SALVADOR GAVIOTA" con la filosofía de Platón, sus dos mundos y sus tres almas.

Juan es una gaviota como otra cualquiera de la Bandada, pero tiene una forma de pensar diferente. A él más que ir a por comida y dormir, prefiere aprender a volar y disfrutar de ello. Él se pasa todo el día haciendo lo que le gusta, volar; la Bandada decepcionada por su comportamiento le echa fuera, es decir, le convierten en un exiliado.

Juan vuela sin rumbo, aprendiendo cosas nuevas cada día, picados increíbles, piruetas, vuelos rasos; un día dos gaviotas con alas relucientes vienen a donde Juan. Juan las pone a prueba con los trucos que él sabía y ellas le responden con lo mismo en un perfecto orden. Ellas le guían el camino hacia una nueva casa, el cielo. Donde había otras gaviotas como él, y todos eran tratados igual.

En el cielo vio que había muchas cosas que aprender, él tenía un instructor llamado Rafael, que a la vez era su amigo. Un día, Juan fue a donde la Gaviota Mayor que pronto se iba a trasladar a otro mundo, para aprender de la experiencia de él. Chiang accedió encantado. Juan aprendió mucho de ellos, y llega a comprender la esencia de la gaviota, lo que una gaviota lleva dentro y no solo lo que se ve en el exterior. Chiang le explicó que la verdadera perfección de la velocidad no era volar más rápido que nadie, porque cualquier número era un límite, si no la perfecta velocidad era estar allí.

Juan que todavía tiene en mente la Bandada, decidió irse con sus alumnos del cielo para mentalizar a las gaviotas de la Bandada, al lugar de donde procedía. Quería que ellos experimentasen lo que él había experimentado: La libertad total. Mientras iba hacia la Bandada se encontró con una joven gaviota llamada Pedro Pablo Gaviota. Era un exiliado como Juan y tenía las mismas ganas de aprender a volar. Juan empezó a enseñarle todo lo que sabía del vuelo.

Todos los alumnos de Juan aprendían cada día un poco más. Como Pedro era el alumno más avanzado, Juan le enseñó a ver la verdadera esencia de una gaviota. Cuando Pedro supo que ya lo había aprendido le dejó a cargo de los alumnos como instructor.

                Cuando logramos observar las dos acepciones desde la perspectiva de Juan Salvador Gaviota vemos que primero él adopto dos actitudes, la primera que el ser puede dejarse llevar por los deseos naturales, sin aspirar a la realización de valores más altos y luego es sacarle provecho a lo que se sabe hacer y de lo que Dios nos ha dotado.

                Juan  no es una gaviota común, él decide ir más allá de sus anhelos y deseos, poniendo a prueba su propia voluntad y rebasando sus límites, aprendiendo que superándose a sí mismo logrará más adelante obtener lo que su bandada obtiene de una manera más práctica y fácil.        

                Platón resalta el alma como parte importante y vital del hombre, sin ella no se logra nada, y resalta también que por medio del alma es que alcanzamos nuestro máximo ser, siempre teniendo en cuenta que se debe renunciar a ciertas situaciones para alcanzar otro nivel que se anhele en la vida, en otras palabras si debe luchar por lo que se quiere sin tener nunca temor al cambio.

                Cuando Juan se convierte en exiliado y busca su nuevo hogar, encuentra con que los elementos distintos a su estilo de vida y exiliados como él lo adoptan y le dan u lugar en su mundo, Juan se da cuenta de que puede ser alguien útil para los demás y lograr todo lo que se proponga alcanzando el mayor de sus anhelos y expectativas, aquí es donde se ve reflejada el alma racional, el alma racional refleja el cerebro, donde se encuentra la razón y el conocimiento; lo que nos faculta para hacer o no hacer según bases y reglas establecidas de lo bueno y lo malo. El Alma Racional reflejada aquí nos enseña un principio divino y dotado de inmortalidad y es situada en la cabeza. En la vida humana buscamos porque ya estamos instalados en aquello hacia lo que tendemos, y lo hacemos en virtud de la fuerza que la realidad buscada nos confiere. Vamos al encuentro de algo en lo cual ya estamos participando en alguna medida.        

Juan está consciente de que debe cambiar ciertas actitudes y orientarse a un nuevo y mejor rumbo. Aquí podemos hacer la relación con el alma irascible, porque el alma irascible hace énfasis en la excelencia del alma, su objetivo principal es poder volver para lograr transmitir a su bandada todo lo aprendido en ese viaje maravilloso guiado a conseguir la excelencia y pureza del alma, por eso empieza a enseñar a otras gaviotas que encuentra durante su viaje, para poder dejar plasmado en ellos toda su sabiduría, quiere dejar plasmado en detalle su conocimiento en otras aves y con esto lograr la perfección de su alma y otra ajenas a él. Juan invita a todos a ganar la suprema libertad del vuelo, frente a la sumisión a la ley del conformismo alicorto. Pero más de uno renuncia al esfuerzo que exige tal superación, pretextando que Juan es un ser inimitable. Al que es de verdad libre y dispone de grandes posibilidades lo consideran como un ser excepcional los que todavía se hallan sometidos a la esclavitud de los límites. Juan, sin embargo, no acepta que se le considere como un ser "divino" en comparación con ellos. Ni él ni los que le siguen en su carrera hacia la perfección son seres excepcionalmente dotados.        Juan invita a todos a ganar la suprema libertad del vuelo, pero más de uno renuncia al esfuerzo que exige tal superación, pretextando que Juan es un ser inimitable. Al que es de verdad libre y dispone de grandes posibilidades lo consideran como un ser excepcional los que todavía se hallan sometidos a la esclavitud de los límites, de una concepción alicorta de la propia existencia. Juan, sin embargo, no acepta que se le considere como un ser "divino" en comparación con ellos. Ni él ni los que le siguen en su carrera hacia la perfección son seres excepcionalmente dotados. Juan únicamente se pregunta: «Por qué será que no hay nada más difícil en el mundo que convencer a un pájaro de que es libre, y de que lo puede probar por sí mismo si sólo se pasara un rato practicando? ¿Por qué será tan difícil?».

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