Homosexualidad

La Homosexualidad en Chile, desde sus orígenes hasta la actualidad.

En chile con fecha 24 de Julio del año 2012, fue decretada la ley Zamudio. Dicha ley condena con penas agravadas los actos de violencia arbitrarios contra sexo, raza y religión entre otros aspectos.

Si bien nuestro país es el segundo de Latinoamérica en aceptar la homosexualidad, con datos estadísticos de un 68 % de aceptación sin discriminación, aún no somos un país tan subdesarrollado como Argentina, donde el matrimonio Gay ya es legal.

Es así como no es extraño encontrar artículos en periódicos y ver en canales de televisión a nivel nacional las innumerables golpizas que han recibido diferentes jóvenes y adultos a raíz de su condición sexual, basada en la homosexualidad. Razón por la cual en el año 2012 toma fuerza la anteriormente mencionada Ley Zamudio.

Se define Homosexualidad como: “interacción o atracción sexual, afectiva, emocional y sentimental hacia individuos del mismo sexo”.

En décadas pasadas el homosexualismo era tomado y señalado por gran parte de la sociedad como una enfermedad, pero desde el año 1973, se comprueba de manera científica que esto no es real y el homosexualismo, no tiene raíz en ningún diagnostico medico.

No hay una evidencia científica, ni medica de donde proviene la homosexualidad, debido a que esta condición se repite de manera transversal, sin tener características de razas, estratos sociales o económicos, tampoco dependerá de la familia de origen, ya sea parental, mono - parental, extendida o nuclear y finalmente no es una condición contagiosa, lo que sí puedo mencionar como relevante es que todas aquellas personas que tienen esta condición lo detectan a muy temprana edad

Muchas personas se refieren a la homosexualidad como “una opción sexual”, lo que se desmitifica al ver como es tratada una persona homosexual por la sociedad, las opciones nacen de la toma de decisiones, lo cual no se produce en la homosexualidad, ya que nadie podría optar por tener una condición donde será estigmatizado por los demás, es un camino difícil, de constantes burlas y que en algunas sociedades es castigado hasta la actualidad con mucha severidad.

Lo que si se constituye como una “opción” para quien resulta ser homosexual, es aceptar su condición y sentirse orgulloso de ella, el hecho de que a un persona le guste otro persona de su mismo género, no quiere decir que es una persona anormal o que tenga una enfermedad, no por sentir o pensar diferente dejamos de ser “Personas”.

Cabe señalar también que la homosexualidad nada tiene que ver con diferentes parafilias sexuales como por ejemplo pederastas, fetichismo, voyerismo, exhibicionismo, etc.

Si bien hemos señalado que Chile tiene un nivel de un 68% de aceptación a la homosexualidad, debo señalar que somos un país con un gran porcentaje de la sociedad que vive la religión católica, apostólica, romana, perteneciente a la iglesia católica, la cual condena fervientemente la homosexualidad.

La iglesia católica dice que la homosexualidad es un pecado, dejando en claro que existe una real diferencia entre quien es homosexual y quien la ejerce, es decir se puede ser homosexual sin tener pareja del mismo sexo y no consintiendo tener relaciones sexuales, diciendo que ser homosexual no es un pecado si no más bien consentir la relación.

Esta visión poco

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