La Pena De Muerte

La Pena de Muerte.

“El principal argumento racional contra la pena de muerte es que ésta no tiene ningún argumento racional a su favor”

-Paul Bokelmann-

La pena de muerte, pena capital o ejecución consiste en provocar la muerte a una persona condenada por parte del Estado, es un castigo que está establecido en la legislación; estos delitos son llamados << delitos capitales>>, a su vez la pena de muerte sigue siendo un tema delicado, ya que por supuesto existen opiniones a favor y en contra, ahora bien, en la antigüedad el pueblo hebreo dejo testimonios de la existencia de esta sanción , quiere decir que desde mucho antes esto ya era permitido, mi punto de vista es a favor, a continuación mis argumentos.

Desde que en el 2013 El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) estuvo a punto de liberar a algunos de los delincuentes más monstruosos de la historia de España, violadores, asesinos en serie entre otros criminales, quede sorprendida, como podía ser posible que este tipo de personas salieran libre, ¿sólo cumpliendo su condena, podrían regresar a su vida normal? Y que hay de todas las personas que lastimaron, mataron o cambiaron su vida para mal, ¿un arrepentimiento?¿ Tan sólo eso? No es justo, una disculpa no es válida, entonces sería tan fácil, matar a alguien pasar algunos años encerrado y después salir libre, es algo parecido al dicho mexicano, cito, “más vale pedir perdón, que pedir permiso”, que tipo de seres humanos son estos, que no buscan el bien común, ayudar al prójimo, incluso no saben pertenecer a un grupo social, que cualidad potencial podrían tener, para que siguieran vivos, ¿qué aportan al mundo? nada, la respuesta es nada, si fuésemos prácticos, si dejáramos a un lado el sentimentalismo, podríamos darnos cuenta que para tener una sociedad llena de estabilidad, tenemos que erradicar la maleza, si quisiéramos hacer ese sueño imposible de poder acercar un poco nuestra vida a una utopía, de poder sentirnos seguros, de no tener miedo, de poder confiar en los demás, tendríamos que dejar de pensar con el corazón y empezar a usar el cerebro, y la capacidad que tenemos para poder solucionar problemas de tajo.

También está el hecho de que la “justicia” no siempre es justa, en el mayor de los casos el culpable no está tras las rejas, muchas personas pudientes cometen faltas similares, pero por ser de “sociedad” no los juzgan, o simplemente por tener contactos, y el inocente paga, bueno pero es un tema en el que no profundizare, qué pasa con los que están en contra, ¿han sufrido por alguno de estos delitos? Si es que han sufrido, ¿aun así estarían en contra? O simplemente, ¿sus creencias religiosas son tan fuertes que jamás apoyarían está moción? Estás preguntas tienen miles de respuestas pero una en especial llamó mi atención,

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