Los De Abajo

En este ensayo se hablará de la novela que se desarrolla en el contexto de la Revolución Mexicana llamada “Los de Abajo” por el autor Mariano Azuela. Mariano Azuela fue un médico cirujano que destacó por su crítica literaria y por la novela de la cual voy a hablar a continuación.

Durante ese tiempo, en México hubo una serie de luchas y rebeliones cuyo objetivo fue transformar el sistema político creado por Porfirio Díaz.

En el tiempo que Porfirio Díaz fue presidente, que fue durante más de treinta años, sucedieron estos pequeños conflictos internos y revoluciones, que fueron protagonizados por distintos jefes de militares que se fueron sucediendo en el gobierno de la nación.

Esta revolución fue iniciada por Francisco Madero ya que pretendía la expulsión de Porfirio Díaz, ya que se había mantenido en el poder durante más de treinta años.

Tras el triunfo de los maderistas, la necesaria reconstrucción del país se vio dificultada por las disputas entre los propios grupos revolucionarios.

Estás luchas contribuyeron a formar el México contemporáneo.

El ambiente donde se ubica la obra es un ambiente de serranía y chozas de paja ubicados dentro de la sierra que son propias de la región mexicana en ese tiempo.

El lenguaje utilizado por el autor de esta obra es de tipo cotidiano pero muy de acuerdo al tiempo donde se desarrolla la obra como lo demuestran los personajes revolucionarios en el texto. La novela está constituida por 3 partes con 21, 14 y 7 capítulos.

El género literario en que se encuentra ubicada esta obra es el género narrativo ya que su escritura demuestra una historia y algunas cosas las describe metafóricamente.

Espero que en mi ensayo te puedas dar alguna idea sobre esta novela y el punto de vista que quiso dar el autor. En mi opinión este trabajo me ayudo en muchos aspectos para comprender el Porfiriato y porque la gente ya no quería a Porfirio Díaz en la presidencia.

Primera Parte

Esta novela comienza en que está Demetrio Macías, un campesino, con su esposa y comienzan a escuchar un ruido como ladridos de perro. De repente, un ruido chillón y alto se oye y el perro, palomo, solo da un largo gemido y deja de ladrar.

Eran unos federales que llegaban a su casa en plan de arrogancia y entonces cuando la pareja se da cuenta de que alguien se dirige, Demetrio, el cual era un rebelde campesino, decide ocultarse por si las dudas y cuando los federales entran, piden agua y algo de comer, pero se dan cuenta de que solo hay una mujer y empiezan a hacer de las suyas y uno de ellos el coronel pregunta a la mujer que cual lugar es ese y esta le dice que se llama Rancho El Limón y cuando escuchan uno de los soldados le dice al coronel que es la tierra de el bandido Demetrio Macías y el coronel lo único que dice es que le traigan una botella de tequila por que ha decidido pasar la noche en compañía de la mujer de Demetrio.

Entonces sale Demetrio con rifle en mano y los federales se quedaron asombrados y cobardes diciendo que ellos respetaban a los valientes y Demetrio Macías los deja ir. Demetrio le dice a la mujer que se vaya a casa de su padre para que algo como eso no vuelva ocurrir y ella esté en un lugar seguro.

Cuando Demetrio se da cuenta su casa estaba ardiendo en llamas y piensa que los federales van a volver pero con mas federales, lo que decide hacer es mejor ir a buscar a su gente de revolucionarios y cuando junta a todos les dice de lo ocurrido y estos se le unen sin ningún aviso, para ir por los federales.

Demetrio se va con 25 hombres y en la mañana se topan con los federales los cuales inician una lluvia de balas contra los hombres de Demetrio y estos les ponen una balada y les ganan esa batalla.

Al día siguiente se dan cuenta de que les faltaban dos hombres que eran Serapio y Antonio.

Siguen su camino y cuando llegan a un jacalito, que eran como las casas de entonces, y piden algo de beber y de comer por que Demetrio iba herido, la gente rápido les dan gran hospitalidad en lo que pueden y cuando se retiraban les bendecían y les pedían que siguieran luchando por la causa que era algo bueno y justo.

Llegaron a otro lugar donde les dieron asilo por la noche.

Esa noche mientras el debilitado Demetrio dormía, sus 3 seguidores dormían a sus pies por si algo se le ofreciera al jefe. Cuando, entre sueños, uno de ellos escucha un balazo y despierta a Anastasio para que le de apoyo por si fueran federales y cuando se van a asomar eran Pancracio y un hombre llamado Luis Cervantes, que se les quería unir a la causa.

Luis Cervantes quería hablar con Demetrio para ver si lo aceptaba pero como estaba descansado, los demás se pusieron a discutir con el. Al fin logró que lo llevaran con Demetrio, al cual le expuso su argumento del porque quería ayudar.

Al día siguiente, lo encierran para analizar bien si querían que se uniera con ellos. A pesar de sus sospechas, lo dejan en libre.

Habiendo sido herido por los hombres de Macías cuando lo encerraron, el propio Cervantes se cura y más tarde también atiende a Demetrio. Así, poco a poco, va cambiando la situación del estudiante y los hombres lo aceptan como a uno más de los suyos.

Anastasio Montañés estaba platicando con Demetrio de cómo era muy inteligente Luis Cervantes y de lo bueno que era saber leer. Entonces Anastasio le dice a Demetrio que como se van a presentar con el General Panfilo Natera y con tan poquitos hombres. Demetrio le dijo que su idea era llegar a los pueblos llevándose caballos y armas liberar a los presos y así armarse de mas hombres y en poco tiempo ser muchos mas.

Luego Demetrio y su gente encontraron a un viejito al cual le preguntaron cuantos federales había por el rumbo y este les contesto que menos de la docena. Estos se van con Demetrio a buscar a los federales con la idea de que cada uno que mataran iba a ser un arma más para ellos.

Secuestraron a un trabajador para que los llevara al cuartel. Al ir llegando al pueblo, los recibieron con balazos y durante eso hieren a Demetrio, pero un señor fue tan amable de darles asilo en su casa.

Después un soplón le dice al encargado del cuartel donde están los revolucionarios. El manda al Teniente Campos a que los mate y los cuelgue a todos en la plaza después de la misa mayor.

Pero la gente de Demetrio les hace una emboscada. Cuando encuentran a los federales los bombardean con muchas granadas y matan a la mayoría, todos los que quedaron vivos juntos también son asesinados junto con el General que dirigía en ese momento a los federales.

Al día siguiente, Demetrio y los revolucionarios, que ya eran más de 100 hombres parten hacia Zacatecas,

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