“PEDAGOGÍA DEL OPRIMIDO” DE PAULO FREIRE CAPITULO I

Miércoles,  15 de marzo de 2017                 Pedagogía del Arte   Grupo 01 

Tema: Pedagogía del oprimido 

“PEDAGOGÍA DEL OPRIMIDO” DE PAULO FREIRE  CAPITULO I

Freire  siente la necesidad de enfocar su planteamiento hacia una forma de realizar la pedagogía, profundizando la relevancia que tiene apoyar a los individuos que están en una condición de opresión para que logren una emancipación, a través del mecanismo de la alfabetización. Los oprimidos han sufrido privaciones que los han marcado  y deben liberarse de esta condición, sin que esto signifique transformarse en opresores. El concepto de libertad adquiere relevancia en la contradicción opresor-oprimido, unos por perderla y otros por tener que enfrentarla como un bien propio.

La alfabetización crea un puente a la liberación real, para generar capacidades y pensamientos propios. Es necesario comprender el sufrimiento de los pobres y la necesidad de terminar con esa opresión. Desde ahí se comienza a reforzar el concepto de pedagogía de la liberación, ya que se enfatiza el concepto de revertir la deshumanización vivida durante largo tiempo.

En la  contradicción opresores- oprimidos  se manifiesta de varias formas. Entre las que se
destacan se encuentra el dilema y la amenaza latente , que los oprimidos en su afán de liberarse  sean luego   opresores y por ende reproducir situaciones de injusticia en la estructura social.  Este dilema del oprimido es una situación muy compleja de enfrentar, porque tiene relación con planteamientos reales. Por esta razón Freire plantea que estos problemas están asociados a un parto doloroso, puesto que detrás de esta superación anhelada, necesariamente debe nacer un hombre nuevo, que tenga la capacidad concreta de superar realmente esta contradicción. 

La  liberación del hombre en forma individual no se puede dar, sino más bien está enfocada
a un construcción colectiva que se conforma como un cuerpo, la posibilidad concreta de
obtener una liberación humanizadora que se pueda mantener, para eso , se debe contar con  instituciones y mecanismos para concientizar y alfabetizar. De ahí lo importante que es tener
poder, autoridad e influencia para impulsar este proceso.

Con estas posturas, Freire da un enfoque crítico de cómo analizar y observar a la educación y a la estructura social. Esta primera parte del libro pretende colocar en evidencia la situación en la
que nos hemos educado. Freire plantea una pedagogía en la que el individuo aprenda a
cultivarse a través de situaciones colectivas, a reflexionar, a luchar por la humanización y  dejar de acomodarse en brazos de los opresores.

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