Reporte lectura Ajax

Ajax es la primera de las obras supervivientes de Sófocles. Se cree que la primera representación de la obra tuvo lugar alrededor del 444 a. C., pero la fecha exacta no es segura y podría haber sido unos años antes o después.

El héroe de la obra, Ajax, ilustra la naturaleza intransigente del noble guerrero; sin embargo, al mismo tiempo, también representa las fallas del exceso de orgullo o arrogancia. Áyax cree que merece la armadura de Aquiles, y no puede aceptar que se haya elegido a otro guerrero más digno. Su orgullo no le permitirá ver la fuerza de Odiseo, ni permitirá que Ajax reconozca sus propias limitaciones.

Ajax es un gran héroe, pero se lo define rígidamente como el héroe anticuado: intransigente e incapaz de reconocer sus propias debilidades. Es su rechazo a la ayuda de la diosa Atenea lo que prepara el escenario para esta tragedia. El regodeo del castigo de Ajax de Atenea también presenta a los dioses de una manera menos favorable que obras anteriores, como la Oresteia de Esquilo, que retrata a los dioses como protectores sabios en lugar de deidades vengativas.

La fuente de Sófocles probablemente fue Homero, quien describió a Ajax como obstinado hasta el punto de la estupidez en La Ilíada. Tanto Ajax como Odysseus lucharon valientemente con Aquiles, y ambos guerreros tuvieron que recuperar el cuerpo de Aquiles después de su muerte. Ambos hombres eran honorables, pero los comandantes griegos votaron que la armadura de Aquiles debería ser otorgada a Odiseo. Este acto proporciona el ímpetu para las acciones de Ajax, que tienen lugar justo antes de la apertura de la obra de Sófocles.

Áyax, un valiente guerrero griego, siente que le han faltado el respeto cuando lo pasan por alto para el escudo de Aquiles. En su dolor y decepción, intenta colarse en las tiendas de los otros guerreros griegos y matarlos. Lanzando un hechizo, Atenea le hace pensar que ha capturado a Odiseo y que lo torturará, pero en realidad ha matado ovejas y vacas. Cuando el hechizo desaparece y recupera el juicio, Ajax se siente profundamente avergonzado y se suicida para salvar las apariencias y el honor familiar.

Queda claro que los dioses están castigando a Ajax porque ha rechazado su ayuda. Cuando Athena intentó ayudar a Ajax durante la batalla, él la rechazó, afirmando que los dioses deberían ayudar a los hombres menores.  

La acción de la obra está impulsada por la ira vengativa de Ajax cuando se vuelve contra Odiseo, Menelao y Agamenón después de que se vota a Odiseo como la armadura de Aquiles. El odio que una vez tuvo por sus enemigos ahora se dirige a estos tres guerreros, y Ajax se dispone a asesinarlos mientras duermen. La interferencia de Athena les perdona la vida, pero sus posibles víctimas se enteran de lo cerca que estuvieron de la muerte y vuelven su furia contra Ajax.

Después del suicidio de Ajax, Menelao y Agamenón están tan llenos de odio que voluntariamente ofenderían a los dioses y dejarían que el cuerpo de Ajax se pudriera a la intemperie. Solo la calma sensata de Odiseo evita que la ira arruine más vidas  

El Áyax de Sófocles es retratado como un gran héroe, pero se lo define rígidamente como el héroe anticuado, orgulloso e intransigente e incapaz de reconocer sus propias debilidades y limitaciones. Homero, quien probablemente fue la fuente de Sófocles para la obra, también describió a Ajax como obstinado hasta el punto de la estupidez en "La Ilíada". Es la arrogancia de Ajax al rechazar la ayuda de la diosa Atenea en primer lugar lo que prepara el escenario para esta tragedia. A pesar de su violencia intransigente y su trato bastante detestable a las mujeres (especialmente en comparación con el Odiseo más generoso y razonable), Áyax tiene una gran estatura y nobleza y domina la obra incluso si solo está en el escenario por un tiempo limitado.

El Áyax de Sófocles es retratado como un gran héroe, pero se lo define rígidamente como el héroe anticuado, orgulloso e intransigente e incapaz de reconocer sus propias debilidades y limitaciones. Homero, quien probablemente fue la fuente de Sófocles para la obra, también describió a Ajax como obstinado hasta el punto de la estupidez en "La Ilíada". Es la arrogancia de Ajax al rechazar la ayuda de la diosa Atenea en primer lugar lo que prepara el escenario para esta tragedia. A pesar de su violencia intransigente y su trato bastante detestable a las mujeres (especialmente en comparación con el Odiseo más generoso y razonable), Áyax tiene una gran estatura y nobleza y domina la obra incluso si solo está en el escenario por un tiempo limitado.    

La obra explora temas de ira y odio, honor (en la tradición homérica, el honor depende completamente de lo que los demás miembros de la comunidad guerrera piensen de ti) y también hasta qué punto los individuos tienen opciones genuinas o son simplemente peones del destino.

Reflexión de Antígona

La segunda parte Antígona, explica las causas que llevaron a la joven a afrontar una muerte tan denigrante y la manera en que se justifica ante la tiranía, al propio tiempo reflexionando sobre la visión política que el trágico presenta para un público integrado por demócratas y aristócratas, notándolo sobre todo en el enfrentamiento de la heroína con el tirano y los motivos de ambos que llevan a la pieza de lo ciudadano a lo familiar.

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