Vigilar Y Castigar

Vigilar y castigar

A partir del siglo XVIII hay un descubrimiento de técnicas que permiten un control minucioso del cuerpo y le imponen docilidad y que se recogen en reglamentos militares, escolares y hospitalarios. Foucault denomina a estas técnicas “disciplinas”.

La disciplina fabrica individuos, aumenta la fuerza del cuerpo (en términos económicos de utilidad) y disminuye esas mismas fuerzas (en términos políticos de obediencia).

En el siglo XVII los soldados eran vistos como personalidades vigorosas, valientes, habilidosas, héroes guerreros. En contradicción los soldados del siglo XVIII eran militares fabricados, a los cuales se les enseño hábitos, movimientos, posturas y rutinas que fueron puestas a prueba al momento de dar órdenes de superiores. Es dócil un cuerpo que puede ser sometido, que puede ser utilizado, que puede ser transformado y perfeccionado.

En esta técnica hay varias cosas nuevas: La escala de control: no es un cuerpo en masa sino gestos, actitudes, poder sobre el cuerpo activo. El objeto de control: no los elementos significantes de la conducta sino la economía, la eficacia de los movimientos Lo que importa es el ejercicio. A estos métodos que permiten el control minucioso de las operaciones del cuerpo, que garantizan la docilidad-utilidad se denomina disciplinas. Las disciplinas han llegado a ser en el transcurso del S. XVII y XVIII unas formulas generales de dominación.

EL ARTE DE LAS DISTRIBUCIONES: Aquí se exponen las técnicas de división de los individuos en el espacio: 1-Clausura: Lugar protegido de la monotonía disciplinaria. El encierro obligatorio, para controlar y mantener el orden de las personas en su interior, con espacios delimitados para la enseñanza y la obediencia. 2-Principio de localización o división en zonas: El espacio disciplinario tiende a dividirse en tantas parcelas como cuerpos o elementos que repartir hay. Esto es para evitar las distribuciones por grupos, descomponiendo las colectividades e individualizar a los sujetos. 3- Regla de emplazamientos funcionales: La regla va poco a poco en las instituciones disciplinarias a codificar un espacio para variar sus usos. Se fijan unos lugares determinados para responder no solo a la necesidad de vigilar, de romper comunicaciones peligrosas, sino también de crear un espacio útil y productivo. 4-Rango: El rango individualiza los cuerpos por una localización distribuyendo y circulando en un sistema de relaciones. Se distribuye a los individuos según sus valores o sus méritos, especialidades, jerarquizando el saber o la capacidad.

Control de la actividad: Dicha vigilancia se hace a través de diferentes métodos: 1-Empleo del tiempo: establece ritmos para obligar a realizar ocupaciones determinadas y regula los ciclos de repetición, establece una rutina ordenada del tiempo. 2-Elaboracion temporal del acto: acostumbrar y descomponer el aprendizaje de los gestos o movimientos al tiempo se refiere al ritmo colectivo y obligatorio impuesto desde el exterior un programa elabora el acto, controla el interior se desarrolló y sus fases. 3-Estableciemiento de correlación del cuerpo y del gesto: existe una mejor relación entre un gesto y la actitud global del cuerpo, que es su condición de eficacia y de rapidez. El buen empleo del cuerpo permite buen empleo del tiempo, nada debe permanecer ocioso o inútil. 4- La articulación cuerpo-objeto: implica cada una de las relaciones que el cuerpo debe mantener con el objeto que manipula. 5-Utilizacion exhaustiva: utilización provechosa del tiempo, intensificar el uso del instante para no derrochar el tiempo, aumentar la velocidad de acción para mayor eficacia para disminuir la pérdida de tiempo producida de una operación a otra.

La organización de la génesis: Las disciplinas, que analizan el espacio, que descomponen y recomponen las actividades, deben ser también comprendidas como aparatos para sumar y capitalizar el tiempo utilizando cuatro procedimientos (claramente ejemplificados en la organización militar)

1-Dividir la duración en segmentos, sucesivos o paralelos. 2-Organizar estos trámites de acuerdo con un esquema analítico: sucesiones de elementos tan simples como sea posible, combinándose según una complejidad creciente. Lo cual supone que la instrucción abandone el principio de repetición analógica. 3-Finalizar estos segmentos temporales, fijarles un término marcado por una prueba que tiene por triple función indicar si el sujeto ha alcanzado el nivel estatutario, garantizar la conformidad de su aprendizaje con el de los demás y diferenciar las dotes de cada individuo. 4-Disponer series de series; prescribir cada una, según su nivel, su antigüedad y su grado, los ejercicios que le convienen; los ejercicios comunes tienen un papel diferenciador y cada diferencia lleva consigo ejercicios específicos.

Es este tiempo disciplinario el que se impone poco a poco a la práctica pedagógica, especializando el tiempo de formación y separándolo del tiempo

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