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Análisis Del Sistema Político Venezolano


Enviado por   •  4 de Junio de 2013  •  5.094 Palabras (21 Páginas)  •  423 Visitas

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Análisis Del Sistema Político Venezolano

Contexto histórico de la democracia en Venezuela

La democracia en Venezuela, como sistema político, nace en 1945 con la llegada al poder, por la vía electoral, de Rómulo Gallegos. Este primer ensayo democrático conocido como el “trienio adeco” (ya que duró tres años: 1945-1948), fue interrumpido por el golpe de Estado encabezado por el General Marcos Pérez Jiménez, y retomado en 1958 cuando, en una nueva contienda electoral, asume la Presidencia de la República el socialdemócrata Rómulo Betancourt.

Con las políticas públicas de los períodos democráticos previo y posteriores a la dictadura de Pérez Jiménez, se buscó incorporar a toda la población en los procesos de modernización que vivió el país de forma acelerada desde 1940, y cuyos logros se ubican fundamentalmente en áreas como educación, salud, vivienda, etc., las cuales presentaban importantes rezagos en relación a los avances experimentados en materia de industrialización e infraestructura, áreas privilegiadas por las dictaduras. Así, la situación social del país comienza a evidenciar mejoras significativas, representadas en un veloz proceso de urbanización, en un contexto de importantes migraciones desde las áreas rurales hacia los centros urbanos; incrementos significativos en el acceso a la educación y la consiguiente disminución de los índices de analfabetismo; mejoras considerables en los índices de salubridad; y la disminución de la tasa de mortalidad infantil y de la población en general, entre otras.

Desde entonces se configuran los principios de lo que serían las responsabilidades del Estado democrático que, en lo sucesivo, se encargaría de velar por el bienestar de la población, constituyéndose como un “Estado de bienestar social”, con énfasis en los derechos sociales y económicos de la ciudadanía, y pasaría a ser un actor principal de las transformaciones sociales (Lacruz:2004).

Las constituciones elaboradas durante ese siglo reconocieron, por lo general, la estructura caudillista del poder: establecieron por lo general un ejecutivo fuerte y una representación de tipo indirecto, basada sobre elecciones de segundo grado, para los cuerpos legislativos. A la muerte de Gómez se produjo un rápido proceso de modernización social y económico que fue alentado primordialmente desde el Estado -ya fortalecido por los ingresos petroleros- y por las fuerzas políticas que emergieron en oposición a la dictadura y sus continuadores.

El período que media entre 1936 y 1958 muestra la inestabilidad política propia de un país que va incorporando, a través de sucesivos ensayos, una franja cada vez mayor de ciudadanos al quehacer político. La democracia que por fin emerge en la última de esas dos fechas es el producto de una lucha en la que, paulatinamente, todas las fuerzas políticas se van uniendo contra la dictadura militar que existía para el momento, la de Marcos Pérez Jiménez. Este proceso de aglutinación, junto con la tradición política vigente a la fecha y los rasgos ideológicos comunes a las fuerzas políticas predominantes, imprimen su sello sobre la etapa democrática que emerge y se consolida a partir de 1958.

Los partidos políticos, especialmente Acción Democrática, que había ya ejercido el poder durante el período 1945-48, tenían una estructura interna caracterizada por el caudillismo y proclamaban la necesidad de realizar profundos cambios sociales para distribuir mejor la riqueza y llevar el país al desarrollo económico. Todas las fuerzas políticas, además, coincidían en el imperativo de lograr que la riqueza petrolera llegase por fin a la mayoría de la población y consideraban que el Estado debía constituirse en la palanca fundamental de los cambios necesarios para lograr el desarrollo.

La diferente respuesta inicial dada a la dictadura de Pérez Jiménez por las principales fuerzas políticas -la ya mencionada AD, el partido socialcristiano COPEI, la Unión Republicana Democrática (URD) y el Partido Comunista de Venezuela- generaron un debilitamiento de la oposición que permitió que éste se consolidase en el poder. Este hecho, andando el tiempo, hizo comprender a muchos dirigentes la necesidad de lograr al menos algunos consensos básicos que permitieran la consolidación del sistema democrático. Surgió primero un acuerdo general para enfrentar la dictadura y luego, ya derrocada ésta, un mecanismo formal que logró aglutinar a tres de los cuatro partidos mencionados, pues el Partido Comunista quedó excluido del acuerdo firmado, y que pasó a conocerse como el Pacto de Punto Fijo.

El régimen democrático surgido de este acuerdo contaba con un amplio respaldo popular y con el apoyo explícito de los principales partidos y organizaciones económicas y sociales, pero se veía acosado por dos peligros que provenían de sectores políticamente opuestos, aunque a veces convergentes: por un lado, los restos del perezjimenismo, que todavía tenían cierta influencia en las Fuerzas Armadas y contaban con el apoyo de diversos núcleos de civiles; por otra parte la izquierda que, viendo la imposibilidad de radicalizar el nuevo régimen y de llevarlo al socialismo, fue distanciándose paulatinamente de él y abrazando cada vez más el camino de la lucha armada, especialmente luego del ascenso de Fidel Castro al poder.

El Pacto de Punto Fijo intentaba, dentro de este cuadro, consolidar las fuerzas que estaban dispuestas a constituir una auténtica democracia. El respeto a los resultados electorales cualquiera que estos fuesen, ciertas normas de convivencia democrática y un relativo balance de poder que evitase su excesiva concentración en manos de un solo partido, eran los elementos clave del acuerdo.

El sistema surgido a la caída de la dictadura mostró enseguida que resultaba operativo y capaz de sostenerse. Durante más de dos décadas Venezuela encontró una forma de resolver sus conflictos dentro de un marco de relaciones democráticas, mientras los partidos se alternaban en el poder y se daba un crecimiento económico acompañado de amplia movilidad social que consolidaba el sistema de gobierno establecido.

En efecto, el primer gobierno de la democracia, el de Rómulo Betancourt (AD), pudo enfrentar con éxito los alzamientos de la izquierda y de la derecha militarista, superó una crisis económica de cierta magnitud y logró llegar incólume a las elecciones de 1963. También

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