Apocalypto

APOCALYPTO

La película trata acerca de una civilización indígena vive en relativa tranquilidad, dedicados a la caza y a las ocupaciones del hogar. Entre bromas a veces crueles, el cariño de la familia, y los relatos del clan alrededor del fuego, a cargo de un venerable anciano, transcurre una existencia primitiva agradable y feliz.

Pero toda esa felicidad y tranquilidad se ve afectada, cuando otra civilización guerrera, al parecer maya, hacen una incursión en los bosques para la captura de varones vivos, destinados al sacrificio, y de mujeres para su venta como esclavas.

Todos en la aldea duermen y no se dan cuenta de la invasión generada por la otra civilización, solo Garra-Jaguar (el protagonista) se entera después de un sueño en donde le dicen que huya, por lo cual le da tiempo de rescatar y esconder a su esposa embarazada y su pequeño hijo, de tan espantosa invasión, en un pozo.

Tras desesperada resistencia, Garra-Jaguar es capturado junto a otros miembros de su tribu. Todos ellos son conducidos, maniatados e inmovilizados como fieras salvajes, hacia las tierras de los guerreros invasores.

Durante el penoso viaje hacia la ciudad maya, el grupo con el que intercambiaron comida también es apresado e incorporado a la columna de marcha. Guerreros y prisioneros atraviesan una aldea quemada, donde una niña enferma, sobreviviente de la destrucción de su poblado, profetiza a los captores que la muerte de su mundo la llevan consigo y que se cuiden de aquél que traerá la negrura de la noche y al jaguar detrás de sí, pues éste les conducirá a su ruina. Los guerreros mayas, temerosos de los presagios y muy supersticiosos, no comprenden el significado de las palabras de la niña y prosiguen la marcha.

Al llegar a la ciudad maya, separan a los varones de y las mujeres, quienes son llevadas al mercado para venderlas como esclavas. Mientras que los hombres son untados de tinta azul por sacerdotisas. Siendo conducidos hacia lo alto de una pirámide para ser sacrificados al dios maya Kukulkan. El sacrificio se basa en irle sacando el corazón, uno por uno a cada uno de los elegidos para el sacrificio, para ofrecerlo al dios. Así es como llega el turno de Garra-Jaguar, quien presiente que su mujer, aun escondida en el pozo, iba a dar a luz a su segundo hijo, por lo cual le dice a su compañero que no puede morir en ese momento, teniendo un pequeño presentimiento de que será sacrificado.

Los mayas los acomodan, inmovilizado, en la piedra sagrada para realizar el sacrificio, cuando para sorpresa de todos, el cielo se empieza a oscurecer, al ser ocultado el sol, dando lugar a un eclipse. Lo que da como resultado que Garra-Jaguar no sea sacrificado, porque el sacerdote le dijo al pueblo que al fin el dios Kukulkan había sido saciado. Cambiando el destino de los prisioneros. El sacerdote decide

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