Revolución Francesa

La Revolución Francesa

La revolución empezó el 14 de julio de 1789, cuando el pueblo de París asalto la Bastilla. Esta revolución trasformo el antiguo régimen, principalmente gracias al llamado tercer estado, que estaba formado por los burgueses, artesanos, campesinos y asalariados. En los últimos años del siglo XVIII, se desarrollaron las ideas de la ilustración.

El estallido de 1789 estuvo promovido por la Declaración de Derechos del Hombre, la instauración del régimen parlamentario y la aparición del concepto nación.

A finales del siglo XVIII Francia era el país mas avanzado de Europa. El crecimiento demográfico fue aumentando y la actividad económica y la producción artesanal experimento un gran desarrollo. Pero los gremios obstaculizaron el desarrollo del comercio, los artesanos ocupaban diferentes calles según sus oficios. A pesar de estas dificultades, la gran expansión comercial del siglo XVIII favoreció el desarrollo económico en el sector de la burguesía que estaba al frente de las finanzas, el comercio y la industria.

La agricultura había superado el viejo régimen de servidumbre, la mayor parte de la tierra pertenecía a los estamentos privilegiados: la nobleza, la Iglesia, la burguesía y la Corona.

El campesino estaba obligado a entregar parte la cosecha al propietario de la tierra, además debían pagar impuestos como el diezmo, destinado a la Iglesia, el impuesto de bienes, el de ingresos y el impuesto por cabeza.

La Francia del antiguo régimen, a pesar de la prosperidad económica y del desarrollo experimentado por la burguesía, seguía siendo una sociedad estructurada en ordenes, donde predominaban las relaciones feudales y los estamentos privilegiados, que además no pagaban impuestos y ocupaban altos cargos de la jerarquía eclesiástica y del ejercito.

Al tercer estado pertenecía la mayoría de la población de Francia, carecían de derecho político y estaban sujetos al pago de impuestos.

La perdida de de casi todas sus colonias americanas después de la guerra de los siete años había afectado seriamente al comercio y la situación se agravo mas con la intervención francesa en la guerra de Independencia de las colonias británicas en América del Norte, que produjo considerables gastos y obligo a recurrir a elevados préstamos. Francia vivía obsesionada por la escasez, por el recuerdo de las <revueltas de hambre> que se habían producido a lo largo del siglo XVIII y el temor a su repetición. El año anterior a la Revolución, la cosecha fue mala y el invierno resulto bastante duro.

En definitiva, el problema residía en que las clases que se beneficiaban de casi toda la riqueza del país, no pagaban unos impuestos acordes con sus ingresos y, se resistían a ello por considerarlo propio de clases inferiores, es decir, del tercer estado exclusivamente. Esta resistencia obligo al gobierno real a buscar una salida para la situación, propusieron el suprimir el privilegio de no pagar impuestos del que gozaban los nobles y el clero. La nobleza exigió la reunión de los estados generales ya que todo impuesto debía ser autorizado por esta institución.

El 5 de mayo de 1789 se reunían en Versalles los estados generales, cada estamento deliberaba por separado y después emitía un voto, los privilegiados contaban con dos y mientras el tercer estado, solo contaba con un voto. La revuelta institucional comenzó cuando los diputados del tercer estado solicitaron a la nobleza y el clero deliberar en común y no por separado y que la votación fuera por cabeza. Pero los estamentos privilegiados no aceptaron y el tercer estado se autoproclamo Asamblea Nacional. Esta decisión no gusto al rey y anulo todas las decisiones tomadas por el tercer estado.

Los diputados del tercer estado se reunieron el la sala del juego de la pelota, donde juraron no disolverse hasta haber dado a Francia una constitución. La asamblea paso a llamarse Asamblea Constituyente.

La asamblea constituyente comenzó sus sesiones en un momento de grave situación económica y empujo a las clases populares a movilizarse.

El rey intentaba disolver la asamblea por medio de la fuerza. Las tropas reales comenzaron a avanzar hacia Versalles y París. El 12 de julio en París el rey había destituido a Necker, ministro de gobierno partidario de las reformas.

La respuesta popular fue la gran revolución urbana del 14 de julio de 1789, con el asalto a la prisión de la Bastilla de Paris. La Bastilla era el lugar en el que se encerraban a los disidentes políticos. La firmeza de los revolucionarios evito la vuelta al antiguo régimen y obligo al rey a reconocer a la Asamblea Nacional. Se formo una Guardia Nacional, a la que se le encargo restablecer el orden, mientras el rey repuso a Necker en su cargo y acepto las decisiones de la Asamblea constituyente.

La Asamblea respondió en la noche del 4 de agosto de 1789 con el decreto de abolición del sistema feudal. Se suprimieron los privilegios y se declaro la igualdad a la hora de pagar los impuestos. Después de quedar suprimido el feudalismo la Asamblea hizo pública la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano el 26 de agosto de 1789.

La declaración, reconocía que cada hombre tenía unos derechos fundamentales la libertad, la propiedad y la resistencia a la opresión. Por todas partes comenzaron a surgir grupos pro-franceses y se produjeron movimientos contra la monarquía y los privilegios feudales. Pero esto provoco una reacción inmediata de las monarquías europeas, y el movimiento contrarrevolucionario se extendió también por todas partes.

Durante las sesiones de la Asamblea Constituyente se fueron perfilando diversas tendencias políticas. Aristócratas y monárquicos estaban a favor de que el rey tuviera derecho de veto y apoyaban un cuerpo legislativo dividido en dos cámaras y un sistema electoral censitario, siguiendo el modelo de Inglaterra. Los llamados patriotas, partidarios de la soberanía nacional, se oponían a ello ya que pensaban que restituirían en el poder a la antigua aristocracia y que el rey con los nobles ejercería su derecho de veto contra los decretos de abolición del feudalismo y la Declaración de Derechos del Hombre

Una vez mas el papel contra la aristocracia tuvo un papel decisivo en el curso de los acontecimientos. El hermano de Luís XVI, el conde de Artois ya había salido de Francia y junto a otros muchos emigrados estaba intentando movilizar a los gobiernos monárquicos de Europa contra la Francia revolucionaria

Los sectores populares afectados

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