Tema 1 Derecho de la Unión Europea Origen y evolución histórica de la Unión Europea.

Tema 1

 Origen y evolución histórica de la Unión Europea.

1. Antecedentes históricos de la UE:

La actual UE no es un fenómeno aislado, es una denominación de un proceso de integración cuyos antecedentes se localizan en el período comprendido entre las dos guerras mundiales.

La Unión Europea es la denominación actual de una fase en el proceso de integración económica, política y jurídica; iniciada en los años 50 en el continente europeo.

No se trata de un Estado, es una Organización Internacional, formada, actualmente, por 28 estados miembros.

La idea de unidad de la UE se encuentra ya en los más profundos orígenes medievales, donde existía una sociedad caracterizada por una lengua y religión comunes. Por aquel entonces se entendía que Europa era una unidad mundial, puesto que era el centro del mundo. De todos modos, muchos autores sitúan sus orígenes en la época moderna, pues es aquí cuando los pueblos se ven liberados de la tutela del imperio y del papado.

Fue precisamente en esta época cuando se intentó organizar el mapa europeo, mediante el “Sistema de Estados europeos” llevado a cabo a través de la Paz de Westfalia (1648).

La idea de Europa la encontramos en la mente de filósofos europeos como Erasmus, Dante, Montaigne, William Pen, Kant, Jovellanos, Saint Simon, etc. que contemplaban la idea de una Europa como modelo de paz perpetua, Sociedad de las Naciones, cooperación… Todos ellos abogaban por una alianza pacífica de estados.

Víctor Hugo se dedicó a promocionar los estados unidos de Europa: “Llegará un día en el que todas las naciones del continente (...) se fundirán estrechamente en una unidad superior y constituirán la fraternidad europea... El día vendrá cuando lo veamos... los Estados Unidos de América y los Estados Unidos de Europa cara a cara, alcanzando hacia fuera para uno a través de los mares”.

Destaca el ensayo de Kant “Sobre la paz perpetua”, ya que para él esta requiere una organización europea de Estados y que a éstos se aplique el principio de separación de poderes.

En contraposición a esto ha existido otra idea, modelos de imposición, que querían modelar una Europa a su medida, a través de la violencia, tal es el caso de Stalin, Napoleón, Hitler, Romanones, e incluso las legiones de Roma. Clara muestra de ello es el estallido de la I Guerra Mundial.

Respecto de la situación de Europa hay que señalar que, a pesar de haber sido la primera potencia mundial hasta 1914, como consecuencia del estallido de la I Guerra Mundial,  deja de ser el centro del mundo a medida que otras potencias le quitan hegemonía, como es el caso de la URSS o de Japón.

A raíz de esto, Europa intenta reconstruirse, principalmente basándose en dos principios (propios del Congreso de la Haya: modelos):

• Cooperación intergubernamental entre los Estados europeos respetando la soberanía de cada uno de ellos. Cada decisión debe ser tomada por unanimidad. Ejemplo: OTAN

• Principio Federalista europea o modelo federalista. La cooperación no es suficiente, hay que ir hacia la unión de los estados en el que estos ceden el ejercicio de la soberanía a las organizaciones internacionales. Favorecer la superación de las soberanías nacionales merced de un proceso de integración que desemboque en estructuras supranacionales. En este contexto tiene mayor importancia la teoría de corte federalista, en la que los Estados ceden el ejercicio de sus competencias. Ejemplo: Salvador de Madariaga.

Entre los pensadores favorables a estas corrientes federalistas y de integración podemos destacar también Salvador de Madariaga, que fue ministro de justicia en España, ingeniero, novelista, fundador del Movimiento Europeo, presidente de la mesa de la cultura y educación de la Haya, fundador y presidente del colegio de Brujas. Este fue quien enunció la frase “Europa no existe, Europa existe en el pensamiento”. La principal defensa de este jurista era el respeto a los valores del tratado de la Unión Europea.

Sin embargo, este clima de nacionalismo europeo se vio truncado debido al ascenso de los movimientos de carácter autoritario (los cuales eran vistos por muchos ciudadanos de la época como la solución a la crisis de entreguerras), lo cual traería consigo el estallido de la Segunda Guerra Mundial. Tras la cual los países europeos empiezan a perder las colonias. Con esta guerra también se destruye la Sociedad de las naciones.

Se celebra en este contexto la Conferencia de Yalta, en 1945, considerada como el inicio de la Guerra Fría. Nos encontramos, por tanto, en este contexto (Telón de Acero) una reducción del comercio, así como con la destrucción de los grandes pulmones industriales y todos los Estados quedan debilitados. Además, los países europeos se ven afectados por sus propias guerras civiles, como puede ser el caso de Grecia. Alemania, por su parte, está ocupada, y algunos países occidentales se encuentran sometidos a una ideología comunista.

A pesar de esta situación vivida, se sigue llevando a cabo un pensamiento político federalista, basado en la autonomía, cooperación y subsidiariedad. El problema que plantea este pensamiento es que se centra únicamente en la unificación europea, sin tener en cuenta la gran variedad cultural existente en el territorio europeo, que dificultaba la creación de un Estado federal semejante a los EEUU.

El proceso de acercamiento posterior viene dado por parte de Estados Unidos, ya que intenta que los países europeos de reconstruyan, se reúnan de nuevo, de manera que busquen una estructura adecuada de cooperación.

Este proceso fue iniciado por parte del secretario de Estados de EEUU, Marshall, quien, en la universidad de Harvard, pronunció un discurso alegando a esta reestructuración de Europa, lo que se conoce como Plan Marshall (Julio de 1947).

Este plan consistía en poner a disposición de Europa una serie de materiales que ayudasen a la reconstrucción de la misma. Para ello era necesario que los Estados europeos se pusiesen de acuerdo sobre sus necesidades de desarrollo, buscándose así la creación de un programa que pusiese en marcha la economía europea.

Tras la postguerra, surgen movimientos paneuropeos como son: movimientos para una Europa unida, movimientos socialistas para los estados unidos de Europa promovidos por estados sociales europeos, nuevos equipos internacionales promovidos por partidos demócrata cristianos.

Estos movimientos confluyen en una conferencia internacional en La Haya (Holanda) en 1948. En este congreso se manifestaron dos enfoques divergentes de integración europea, de un lado aquellos que propugnaban una cooperación intergubernamental desarrollada a través de instituciones permanentes pero que no afectase a la soberanía de los Estado, y por otro lado el de los partidarios de una integración de carácter federal, que incluso llegaron a proponer la convocatorio de una Asamblea constituyente europea.

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