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Grito Manzo


Enviado por   •  28 de Septiembre de 2012  •  3.223 Palabras (13 Páginas)  •  444 Visitas

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Instituto Séneca

Ed. Física 2ª año

Prof.: Pablo Hughes

Iturrieta, Alejandro

27/06/12

El grito manso

Introducción

El presente trabajo intenta poner de manifiesto alguno de los muchos aspectos que conlleva la tarea docente. Damos cuenta de algunas de las herramientas que como docentes podemos utilizar en el desempeño de nuestra función, lamentablemente desarrollamos una profesión que no esta controlada de forma muy rigurosa y es por eso que esta librada al compromiso de quienes la realizan, cosa que este ultimo tiempo ha llevado a la educación y con ella todos los aspectos que la circundan y sin dejar de lado lo mas importante, el hecho de que es una cuestión de políticas al estado actual de desprestigio y desvalorización.

Se analizan algunos puntos a mi entender mas importantes, como puede ser el espacio pedagógico, el lugar que ocupan los educando dentro de nuestra función docente etc. La profesión que esperamos desarrollar implica una amplia variedad de factores con los que quizás nunca vamos a poder cumplir del todo, lo importante según lo leído es creer que desde nuestro hacer podemos contribuir a generar ese cambio tan necesitado, tan anhelado por los sujetos aquellos a quienes enseñaremos, de un docente que se vea comprometido con su tarea y realizándola con gusto y que no este allí en esa sala frente a un grupo de personas a las que no desea conocer, ni interactuar con ellas sino que esta allí por que no le quedo otra opción.

¿Quien es el limite o limitante?

“Yo busco mi fuerza más en el reconocimiento que me da la Universidad que en mí mismo” que bueno seria que todos fuéramos capases de reconocer a aquella institución, colegio, casa o universidad que nos enseño las pautas para sabernos comportar, no dejarlos perder si no más bien saberlos utilizar para hacer de este mundo algo mejor (aunque para algunos este es un sueño lejano o una frase hecha y dicha hasta el cansancio), que es uno de los sueños principales del autor.

Por otra parte hoy es común escuchar “ustedes no saben lo que significa tener ganas de hacer y no tener los recursos para hacerlo” me hizo reflexionar sobre los limitantes que nos ponemos como persona, ¿cuáles son los limitantes que no ponemos como persona? Muchos de los educadores ponen como limitante que “a falta de recursos no me quedaba de otra más que ser maestro/a”, como alumnos “el profesor/a no sabe darle interés a la clase, como no me da interés no me esfuerzo” y eso solo por citar algunas de las tantas frases que existen. Pienso que en esos años de colegio, es donde se debería dar un máximo potencial (ya que todavía tenemos la suerte de tenerlo) y dejar a un lado el que el conocimiento solo se da a través de exámenes, pruebas o un números que al final de cuenta resulta algo relativo, dejar de centrarnos en las notas y de una vez por todas romper esos limitantes y tener el deseo de aprender.

“La curiosidad: motor del conocimiento”, asi concluye el primer capítulo luego de haber explicado que los seres humanos somos seres inacabados y éste mismo creó a lo que ahora llamamos “educabilidad del ser”. El hecho de reconocer que somos seres inacabados según Freire es lo que nos permitió llegar a donde estamos, con una supuesta libertad, creación del lenguaje y por lo tanto una educación. En lo personal en cuanto a educación hace falta llenar muchos vacíos, ya que carecemos de buenos educadores, ya que muchos de nuestros docentes están en el ámbito porque no tuvieron otra opción, y si no tenemos buenos educadores ¿Cómo esperamos tener buenos educandos? Una cosa va de la mano con la otra, para respaldar esta idea se me ocurre un ejemplo: “Si en los grados básicos de enseñanza estuvo un docente que lo que menos quería era estar allí, lo va transmitir a los alumnos y esa misma transmisión va crear repercusiones en el alumno”, pero si por lo contrario, el maestro si siente ese deseo de enseñar, de compartir, de verse realizado al ver el cambio de conducta o de un avance académico en el alumno, este va a tener repercusiones positivas, en lugar de negativas.

Quizás suena un poco ilógico, esto de desempeñar algo que no queremos o en lo que no nos sentimos cómodos, lamentablemente es esto lo que tiene a la escuela y a la educación en el estado que esta, obviamente hay mucho del estado que no vamos a mencionar, pero seguramente en esto de que la curiosidad es el motor de conocimiento buscaremos generar un entorno positivo en este proceso tan complejo y nunca olvidando que nosotros también ocupamos ese lugar de alumno con las mismas inquietudes y sueños.

Retomando una palabra que me parece clave en la frase anterior que es “la curiosidad”, que según Freud es lo que nos empuja, motiva y nos lleva a retirar el velo que tenemos a través de la acción. No podría estar más de acuerdo con este pensamiento, ya que muchas de las cosas logradas en el presente fueron gracias a la curiosidad de otras personas. “Los objetos cognoscibles son percibidos mediante del ejercicio de la curiosidad” como futuros educadores debemos tener cuidado en cuanto a preservar la curiosidad de los niños, y no solo los educadores si no también los padres, hemos sido testigos de las muchas veces que detenemos la curiosidad de un niño ya sea porque un maestro lo humillo o avergonzó por tener una duda poco común, según Freud “sin límites no hay libertad, como tampoco hay autoridad” y enseñarle como deben comportarse y como deben de expresar sus sentimientos de duda. Esto me hizo pensar que como futuro docente “es necesario aprender a escuchar” el aprender a escuchar no es otra cosa más que aprender a no minimizar a la personas, no ridiculizarlos, ¿Quiénes somos nosotros para decidir que curiosidad es buena y cual no? como esa frase que dice “no hay preguntas tontas, si no tontos que no saben preguntar” esta es una frase en la que nunca he estado de acuerdo, en lo personal creó que contradice

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