Resumen El Miedo A La Libertad

Los dos aspectos de la libertad para el hombre moderno

La comprensión del problema de la libertad depende de la capacidad de observar de manera igualitaria ambas partes del proceso, aunque esto resulte difícil por acostumbrarnos a pensar de una manera no dialéctica. Para el ser humano siempre ha resultado complicado darse cuenta del lado negativo de la libertad y siempre encuentra nuevos enemigos de la libertad, constituidos por factores de la personalidad. No hay una completa victoria de la libertad porque siempre encontramos un lado negativo en ella.

La obre iniciada por el protestantismo al liberar espiritualmente al hombre, ha sido continuada por el capitalismo, buscando la libertad desde el punto de vista mental, social y político, constituyendo como base de este desarrollo, la libertad económica. El sistema feudal siempre limito la expansión del ser humano, pero esto cambia con el sistema capitalista, dándole a un miembro de la clase media la posibilidad de triunfar de acuerdo a sus méritos y sus limitaciones, gracias a esto, el mundo fue zafándose de sus limitaciones y el hombre fue logrando la igualdad, aumentando la libertad política.

La libertad de la esfera política se da principalmente al elegir a los representantes, suponiendo así que cada uno seria capaz de obrar según sus propios intereses. El capitalismo trajo consigo efectos positivos y negativos sobre la libertad, generando que el individuo tuviera un crecimiento de su yo activo, critico y responsable, aunque también lo hiso mas solo y asilado.

El individuo se hallaba completamente solo, teniendo que buscar a Dios a través del protestantismo, o a sus competidores con el capitalismo. Para explicar la tesis del capitulo debemos mencionar un hecho muy importante. Dentro del sistema medieval, el capital era siervo del hombre; dentro del sistema moderno se ha vuelto su dueño. Lutero y Calvino prepararon psicológicamente al hombre para reducirse frente a la maquina económica o ante cualquier otro gobernante de su voluntad.

El egoísmo no es idéntico al amor a si mismo, sino a su opuesto siendo así una forma de codicia y es insaciable, por consiguiente nunca puede alcanzar una satisfacción real. La carencia básica de amor hacia si mismo revela a las personas narcisistas y egoístas. El ser humano moderno ha entrado en un sentimiento de alejamiento e impotencia porque las relaciones interpersonales han perdido su carácter directo y humano.

La confianza del hombre moderno depende del éxito que tenga en el mercado, de su personalidad y las características que tenga para “venderse”. La falta de confianza es mejorada el obtener prestigio y poder, siendo este un factor de vital importancia en el mundo capitalista. La familia era un factor de prestigio individual donde la persona podía sentirse alguien.

En el pensamiento filosófico de la edad moderna descubrimos

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