Av. Larco, la adaptación

Av. Larco, La adaptación

La película Av. Larco, producida por la productora peruana Tondero, es una adaptación de un musical teatral del mismo nombre presentado por la misma productora.

La historia gira entorno a un grupo de cuatro amigos de la clase media que forman una banda de rock y que pretenden triunfar en el círculo de festivales de rock de Lima a fines de los años ochenta. A su vez este mismo grupo nos ayuda a sumergirnos en las capas sociales de la capital y la violencia social de esos tiempos. Esta película resalta por ser un musical ochentero y así mismo por ser una de las primeras adaptaciones de este estilo, pero la verdad es que deja mucho que desear por parte de esta productora.

La película se podría dividir fácilmente en dos partes sin mucha dificultad, la primera, que desgraciadamente es la más larga, es la inclusión de canciones de grupos muy sonados por esa época y que hoy en día se cuentan como clásicos: Los Mojarras, Grupo Rio, Frágil (de donde más se basa la idea del filme); y de cantantes como Pedro Suarez Vertiz. Lo malo de esta parte de la película es su forzosa y rápida ejecución, ya que casi todo este segmento se dedica a la reproducción consecutiva de todas estas películas dejándonos casi un poco más de la historia que nos contaron al principio, solo que dejando con un par de romances cortos y ejecutándolos torpemente.

Hasta este punto la película ya ha ejecutado su objetivo, de poner las canciones y las coreografías que todo mundo deseaba ver interpretadas. Aun así la película logra recuperarse con la inclusión del personaje que da vida al argumento y el conflicto en sí, André Silva interpretando a un rockero de El Agustino que ayuda a los protagonistas a ver la verdad de la Lima de esos tiempos, llevándolos a la realidad de los festivales. Aquí los personajes, que hasta el momento eran planos y lineales, representan una mayor evolución y complejidad; siendo algo muy rico en niveles literarios. Pero si bien se salva por esta parte, a su vez esta misma les juega una mala pasada, al incluir demasiados conflictos tales como: problemas legales, problemas personales, el conflicto de la banda original, las parejas homosexuales, el abuso policial y etc. Las cuales, por no ser gracias a las canciones de por medio, seria abrumador para el vidente.

Otra de las falencias, es la narración confusa y ciertamente innecesaria en algunos puntos, la antes mencionada falta de personajes con verdadera profundidad y desarrollo, predominando la estereotipación de los personajes tanto masculinos como femeninos; y la resolución de conflictos en un segundo son las que la hacen perecer al fin y al cabo.

Al final, “Av. Larco” si bien es un mal chiste para el cine en general, termina teniendo su gracia. A pesar de pésima estructura, guion y su incapacidad de narrar buenas historias, transmite unas ganas de cambiar la sociedad y de luchar en contra de los problemas del país, que queriéndolo o no, cubre esos huecos y falencias que la harían una más del montón.

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