La Dislexia

DISLEXIA

La Dislexia es un trastorno del desarrollo que afecta al procesamiento de la información procedente del lenguaje escrito, como consecuencia de ciertos déficit neuropsicológicos de las funciones cognitivas que participan en el proceso de la escritura y de la lectura. Las capacidades intelectuales del niño pueden ser normales y el potencial de aprendizaje o desenvolvimiento académico pueden ser adecuados para su edad cronológica.

Los niños disléxicos tienen problemas en el ritmo y la velocidad del aprendizaje de la lectoescritura. Por esta razón es muy importante que los maestros conozcan las características diferenciales de la Dislexia para poder detectarla y diferenciarla de cualquier otro déficit o desorden que altere el proceso de lectoescritura.

¿Por qué la Dislexia es un trastorno del desarrollo?

La Dislexia es un trastorno del desarrollo porque se trata de una disfuncionalidad del mismo, en este caso, de los procesos de lectoescritura. No es un trastorno madurativo ni mucho menos un trastorno intelectual.

Los niños con trastornos neurológicos, trastornos del lenguaje o retraso mental, pueden tener una Dislexia como síntoma secundario a su trastorno mayor.

¿Por qué hay un déficit cognitivo?

La Dislexia se produce a partir de déficit en las funciones cognitivas necesarias para la lectoescritura.

Estas funciones tienen una ubicación estructural en el cerebro, por lo que la relación que hay entre lo conductual (funcional) y lo estructural la definen como déficits neuropsicológicos.

¿El disléxico tiene un cociente intelectual normal?

Los niños disléxicos no presentan compromiso en su capacidad intelectual, sino que tienen ciertas dificultades en las habilidades cognitivas necesarias para la lectoescritura, pero nunca un retraso en sus capacidades intelectuales.

Son niños que responden satisfactoriamente a las pruebas psicométricas, obteniendo un CI que oscila entre 80 y 110 aproximadamente. En las pruebas psicométricas verbales y ejecutivas como el WISC III es muy común observar cierta discrepancia entre el CI verbal y el CI ejecutivo, obteniendo mayor dificultad en las pruebas ejecutivas y mejor puntaje en las pruebas verbales ya que el lenguaje hablado no está alterado.

Si un niño con Dislexia diagnosticada presenta un CI por debajo de 80 será necesario ampliar el diagnóstico para detectar la preexistencia de algún síndrome o trastorno neurológico.

Dislexia ¿Sí o no?

Cuando existe daño cerebral el deterioro es mayor e irreversible y determina a la Dislexia como un síntoma no como un síndrome: Dislexia secundaria sintomática

Los trastornos emocionales de la infancia determinan una alteración global de la conducta y no sólo selectiva del aprendizaje, la Dislexia no es un trastorno emocional, sí puede ser una complicación temporal: Dislexia secundaria sintomática temporal.

Todos los alumnos tienen al inicio de la lectoescritura síntomas disléxicos, que forman parte del proceso madurativo del aprendizaje de la lectoescritura, que posteriormente desaparece: Dislexia natural temporal.

En el caso de que los trastornos en el inicio de las actividades de pre-escritura y en el aprendizaje de la lectoescritura no se corrigen espontáneamente e impiden el acceso a la lectoescritura, allí si estamos hablando de una Dislexia.

Las causas predisponentes pueden ser varias:

- Síndrome genético.

- Retraso mental.

- Trastornos emocionales.

- Trastornos del lenguaje.

- Trastorno neurológico

Las causas determinadas pueden ser trastornos de las funciones cognitivas para la adquisición de la lectoescritura y las causas precipitantes pueden ser otras, como por ejemplo el bilingüismo.

Otras causa, llamada denunciante, puede ser el aprendizaje mismo de la lectoescritura.

¿Cuándo aparece la Dislexia?

La Dislexia aparece en la escuela, surge en el aula y la descubre el maestro.

La mayoría de los trastornos disléxicos no se detectan hasta que aparecen los primeros problemas de aprendizaje en preescolar y en el 1er. año de la escolaridad, en este estadio es donde se empieza a manifestar con mayor incidencia.

En preescolar se detectan dificultades en las actividades del plano gráfico: lateralidad, esquema corporal, fallas de motricidad fina y fallas en la comprensión lectora. La detección en preescolar, cuando aún el niño no se ha iniciado en la lectoescritura, es escasa.

En cambio en el 1er. año escolar, cuando el niño se inicia en la lectoescritura, a medida que se va consolidando, se observa que el niño presenta dificultades que no le permiten acceder al proceso lector y escritor. La realidad estadística nos dice que el mayor número de trastornos disléxicos es diagnosticado en el 2do. año de escolaridad. El niño transcurre el 1er. año escolar con muchas dificultades y gran número de maestros esperan que en algún momento supere estas dificultades, pero como el trastorno disléxico no desaparece, la repitencia o el fracaso se acercan.

Sólo unos pocos docentes concientes de la existencia de los trastornos escolares, aconsejan tempranamente realizar una interconsulta con un Psicopedagogo. Esta intervención oportuna beneficia el trabajo de recuperación siendo el 1er. año de escolaridad el momento ideal de detección y diagnóstico.

La realidad nos indica que niños disléxicos llegan por primera vez al consultorio en cualquier momento de la escolaridad entre 7 y 12 años y aún más grave en la adolescencia, pues cuanto más tarde se diagnostique, menor porcentaje de recuperación tiene.

Las primeras manifestaciones en el nivel inicial son:

- Producciones tardías del lenguaje expresivo.

- Problemas en la articulación del habla.

- Dificultad para recordar y reproducir las letras de forma oral y escrita en preescolar.

- Dificultad para recordar el nombre de los números y su grafía.

- Dificultad para reconocer y recordar nombres de colores.

- Alteraciones de lateralidad.

Una vez que el niño inicia el 1er. año los errores se hacen más específicos llegando a alterar por completo la expresión y comprensión escrita.

Estos errores específicos no debemos perderlos de vista ya que son los que nos darán motivo a la consulta psicopedagógica.

El niño que inicia el 1er. año escolar tiene muchos motivos para presentar dificultades y no es el maestro el que deberá diagnosticarlas, sino que deberá detectarlas, el especialista dará los resultados del diagnóstico final: origen orgánico neurológico, origen mental (discapacidad) u origen neurocognitivo.

Los Trastornos de aprendizaje

Pueden tener distintos orígenes: origen pedagógico (metodología), origen sociocultural u origen emocional.

Todos estos trastornos serán diferenciados mediante un Diagnóstico Psicopedagógico y Neuropsicológico, por lo tanto el especialista (Psicopedagogo) será el encargado en esta distinción, el maestro sólo detectará algún trastorno de aprendizaje y ciertas características peculiares en ese niño ante el desenvolvimiento académico.

Los padres también tienen una tarea preventiva con respecto a los trastornos escolares, ellos deben ser concientes de que todos aquellos factores natales y postnatales que hayan perturbado el desarrollo del niño probablemente incidan en el proceso madurativo y en el aprendizaje. Estos factores deberán ser monitoreados ante el ingreso al nivel inicial y al 1er. año de escolaridad.

No podemos diagnosticar Dislexia a un niño que no concurre regularmente a clase y que ha repetido más de dos veces el 1er. año escolar.

Una Dislexia no tratada no permite el acceso al aprendizaje por un canal de expresión y comprensión escrita.

Entonces, la Dislexia puede ser detectada por el maestro como errores de escritura no ortográficos en niños del 1er. año escolar sin importar su CI ni su edad cronológica.

Se puede diagnosticar como Dislexia a un niño con CI normal y buen desempeño en matemáticas.

La Dislexia se asocia con otros cuadros neurológicos, genéticos y con otros test neuropsicológicos.

Errores disléxicos

El episodio disléxico y los errores de dicha alteración aparecen siempre con mayor o menor frecuencia desde los 6 ó 7 años, en el 1er. año de escolaridad.

La intensidad de los errores en el momento de aparición de la Dislexia, y posteriormente también, es variable pudiendo ser leves pero constantes. A veces se confunden con errores de ortografía, por estas y otras razones no siempre se la diagnostica como Dislexia rápidamente.

La consulta al especialista para hacer un diagnóstico diferencial se da tanto entre los 6 y 8 años como a los 10, 11 y 12 años y en algunos casos incluso a los 14 años.

En cada etapa evolutiva los errores se van manifestando de manera diferente, principalmente en los casos de detección tardía, los errores se van sobreadaptando, se conjugan con otros o se van perfeccionando como errores a través de la evolución de la caligrafía, la semántica y la gramática.

En algunos niños los errores se acumulan y se observan en gran variedad; en estos casos sí se la detecta más rápido, pero en muchos otros, más aún si el maestro desconoce las características de la Dislexia y no se hace un buen seguimiento del alumno, entonces se dilata la detección y por lo tanto también el tratamiento.

Errores más frecuentes

- Rotaciones: Confusión de letras similares: b x d - p x q - u x v.

- Inversiones: Alteración de la secuencia correcta de las sílabas: la x al - león x lenon - el x le - los x sol - las x asl.

- Confusión: Cambiar una letra por otra gráfica o fónicamente por su pronunciación similar: b y p, t y d, g y c.

- Omisiones: Omisión de una o varias letras: árbol x abol, mantel x matel.

- Agregados: Agregado de letras a una palabra, o agregado de sílabas: camisón x camisoso, pulsera x pulserera.

- Contaminaciones: Agregado de sílabas o letras de otras palabras: rey león x leyle león - el plato está en la mesa x el platoesta estaen la mesada, se mezclan sílabas de otras palabras.

- Distorsiones: Escritura ilegible, deformada o x e - p x i.

- Disociaciones: Fragmentación incorrecta de una palabra: casa x cas a, armario x ar mario.

Más adelante veremos los errores característicos en cada etapa evolutiva, pero esta primer aproximación permite al maestro diferenciar mejor este trastorno para no dejarlo pasar, y evitar hechos lamentables como la solicitud de un diagnóstico en un niño de 14 años. Podemos decir que ya a los 10 años su detección es tardía, por lo tanto su recuperación será menos productiva.

Veamos algunos ejemplos:

FIRMA ELMAR

PAGALO PESCADO

constuidos construidos

Candida tos deuna eleción

Cuando es denoche

Mi mamña cuando selebanta.

Errores de omisión: Niño de 8 años

Cundo puda copare muchos gobo.

Cuando pueda compraré muchos globos.

U bun perro es u compaso fie.

Un buen perro es un compañero fiel.

Errores de confusión: Niño de 7 años

La famina de Carna se va de vagacione

La familia de Carla se va de vacaciones.

El domade es rogo.

El tomate es rojo.

Errores de confusión: Niño de 8 años

abía locos animales en el paque.

Había pocos animales en el parque.

El ladero es bel bede.

El babero es del bebé.

Errores de transposición: Niño de 8 años

taren muchas palntas.

Traen muchas plantas

le tern sale de la setasión

El tren sale de la estación

Errores de inversión: Niño de 7 años

Nna ueua es lueua.

Una nena es buena.

Lo fuego eu el fardím

Yo juego en el jardín.

Errores de contaminación: Niño de 9 años

Eel petaio insatae artone los percercates.

El patio está adornado con carteles celestes.

La tonvena taerceraba da.

La ventana está cerrada.

Errores de agregados

Los alumanos van a salire tempeana.

Los alumnos van a salir temprano.

Los niños conienro apuruados.

Los niños comieron apurados.

Errores de separación: Niño de 16 años

Mi herma no qui ere jugar

Mi hermano no quiere jugar.

La casa es gran de

La casa es grande.

Errores de contaminación: Niño 9 años

yo juegos con las solas del marr.

Yo juego con las olas del mar.

Salatamos muscho en el patio.

Saltamos mucho en el patio.

Estos errores se producen con mayor incidencia ante la escritura espontánea o el dictado, en menor grado con la copia del pizarrón y mucho menos frecuente en la copia directa de un libro o tarjeta.

Los errores más frecuentes son las omisiones, las confusiones, los agregados, las separaciones y las contaminaciones.

Clasificación de los errores disléxicos y edades en que se producen

Tipos de errores Disléxicos en el niño:

Etapa I

Etapa II

Etapa III

Etapa IV

Etapa V

1- Escritura invertida de letras en imprenta y números.

2- Dirección de la escritura de derecha a izquierda.

3- Agrupación de letras sin sentido.

4- Omisión de consonantes y/o vocales en casi todas las palabras.

5- Aglutinamiento de palabras.

6- Inversión de secuencia de letras.

7- Escritura invertida de letras minúsculas, confusión b-d, d-p, b-p.

8- Repetición de mayúsculas, sobretodo en el comienzo de la oración.

9- Confusión de diptongos.

10- Frecuente omisión de letras.

11- Confusión de consonantes débiles y fuertes.

12- Los sustantivos compuestos son escritos en forma separada.

13- Confusiones en la finalización de palabras, incluso en dictado.

14- Inconsecuencia ortográfica. En el mismo texto la palabra se escribe a veces correctamente y otras veces con error.

15- Gran inseguridad.

16- Inseguridad en la escritura mayúscula y minúscula.

17- Inseguridad en escritura de verbos y adjetivos sustantivados.

De las características de los errores disléxicos de los ítems anteriores cabe aclarar los puntos 4, 5 y 10:

- 4) Las omisiones de consonantes o vocales, que son muy comunes en los niños, se deben a una deficitaria capacidad de aislamiento fonomático. Por lo tanto, habrá que observar también el lenguaje si no presenta los mismos o similares errores y el tratamiento será compartido entre Psicopedagogía y Fonoaudiología.

- 5) El aglutinamiento de palabras se debe a una deficitaria capacidad de aislamiento de palabras, aquí se deben observar la expresión verbal del niño, si el lenguaje hablado está acelerado, sin pausa esto se refleja también en la expresión escrita y si el error se acentúa en la copia no está de más el examen de vista.

- 10) En esta etapa las omisiones de letras ya no se deben al mismo motivo que en el punto 4; si bien son de esa primer alteración, ahora habrá un déficit en la memoria de la imagen de la palabra al escribir y copiar.

Ahora veamos más claramente a qué edad aproximada se dan estos errores disléxicos y no se deben dejar pasar solicitando el diagnóstico Psicopedagógico y a qué etapa escolar corresponden.

Estos datos así expuestos aclaran rápidamente algunos conceptos sobre la Dislexia que surgen en el ámbito escolar para no dejarla pasar y alertarnos aún más si los errores denotan mayor desfasaje cuando un niño responde a los errores de una etapa y ha repetido el año escolar.

Etapas del desarrollo de los errores Disléxicos respecto de la edad y la etapa escolar

Etapa I: Error 1 a 6 – Edad 6 a 8 años aprox.

Etapa II: Error 5 a 12 – Edad 7 a 9 años aprox.

Etapa III: Error 10 a 16 – Edad 8 a 12 años aprox.

Etapa IV: Error 10 a 16 – Edad 11 a 14 años aprox.

Etapa V: Error 14 a 17 – Edad 16 años aprox.

Las acomodaciones en el contexto escolar

Las acomodaciones (o adaptaciones) escolares marcan la diferencia entre éxitos académicos y fracasos, entre alta y baja autoestima. Representan el puente que une al niño con sus posibilidades. Se accede a niveles más altos de pensamiento.

Existen dos factores sobre los que hay que tener control:

1- El programa de recuperación lectora, y

2- Cómo es tratado por los adultos.

El niño o adolescente disléxico necesita alguien en quien apoyarse y que, a su vez, se ocupe de brindarle el soporte necesario conociendo la naturaleza de su problema.

- La acomodación más importante es el tiempo extra (la Dislexia quita tiempo, la acomodación se lo restituye).

- Este tiempo extra no es opcional, es obligatorio. Pueden aprender muy bien si se les da la posibilidad de hacerlo.

- El tiempo de lectura óptimo para estos niños es de una hora aproximadamente, cuatro veces por semana que deberán repartirse entre escuela, hogar y profesional interviniente.

- Tanto en la escuela como en el hogar deberá tener una práctica de 8 a 10 minutos diarios de lectura.

- Primero se busca la fluidez lectora con sólo un error cada veinte palabras.

- La lectura diaria guiada debe ser de párrafos cortos (200 palabras aprox.), lo suficiente como para no memorizarlos.

- La práctica y repetición se harán en voz alta.

- Se deben practicar cuatro veces por menos, no necesariamente el mismo día.

- El uso de la notebook puede ser una prótesis importante para la escritura.

- Los textos con audio que deba leer el niño representan un sólido apoyo para seguir con su lectura.

- También el poder ver las películas respectivas previo a la lectura de los libros obligatorios.

- O poder conversar con el profesor el material que tendrá que leer.

- Son más representativos de su capacidad intelectual y su aprendizaje los exámenes realizados en forma oral que los escritos, siempre que no se le exijan respuestas rápidas.

- Nunca deben evaluarse con tests de múltiple choice.

- Los cursos de velocidad en lectura no dan ningún resultado.

- La incentivación sobre las mejoras debe ser importante.

Clasificación de las Dislexias

Clasificaremos a las Dislexias desde dos ópticas diferentes: Una por su naturaleza de aparición y permanencia y la otra según sus características constitutivas. Así tenemos:

- Dislexia natural (temporaria): Dislexia

- Dislexia secundaria (sintomática): Dislexia fonológica, Dislexia diseidéctica, Dislexia profunda.

Dislexia natural

Todos los niños que se inician en el aprendizaje de la lectoescritura comenten errores disléxicos que son esperables y forman parte del proceso de asimilación y adquisición de la escritura.

El niño escribe mal porque está aprendiendo a escribir, ensaya y comete omisiones, confusiones, errores de separación, agregados y transposiciones; principalmente en las palabras ya que cuando es capaz de escribir oraciones o frases ha perfeccionado bastante la escritura.

Asimismo comete en las oraciones errores gramaticales.

A medida que pasan los meses en el primer año escolar estos errores se van corrigiendo y desaparecen.

Este tipo de Dislexia o errores disléxicos no configuran un trastorno pero sí obligan al maestro a efectuar un seguimiento para observar su total desaparición.

Ejemplos:

Peao pescado

maiosa mariposa

moo mono

uaraya cucaracha

aol árbol

paoam paloma

mpaemp mesa

Estos errores siempre se cometen ante el dictado o la escritura espontánea.

El niño del 1er. año escolar que conoce el abecedario, aunque no esté en un nivel alfabético para la copia, escribe sin errores.

Cuando pasados seis meses de clase el niño no presenta evolución en la lectoescritura, ya sea porque los errores no tienden a desaparecer o bien porque no se mueve del nivel de alfabetización silábico, es probable que estemos frente a una Dislexia o algún trastorno de aprendizaje.

Es el momento entonces de solicitar un diagnóstico diferencial.

Es posible que en esta instancia el niño no presenta dificultades en otras asignaturas, sólo alteraciones en lectoescritura.

Pues entonces estamos frente a una Dislexia: Trastorno del desarrollo que afecta el procesamiento de la información procedente del lenguaje escrito, como consecuencia de ciertos déficits neuropsicológicos de las funciones cognitivas que participan en el proceso de la escritura y de la lectura.

Dentro de esta Dislexia encontramos tres tipos de Dislexia separadas según su caracterología en:

Dislexia Fonológica

Dislexia Diseidéctica

Dislexia Profunda

Las dos primeras son las que comúnmente aparecen en el ámbito escolar, la última es más frecuente asociada generalmente a la discapacidad (Dislexia secundaria).

Los tres tipos de Dislexia requieren tratamiento neuropsicológico a temprana edad, es decir antes de los 9 / 10 años, obteniendo una recuperación de hasta un 70 / 80%.

Dislexia Fonológica

Este tipo de Dislexia se caracteriza porque el niño tiene dificultad para reconocer, percibir y detectar la correspondencia grafema - fonema y la independencia de las sílabas desde lo fonético.

En la Dislexia fonológica el niño no puede establecer la relación entre la gráfica de una letra o sílaba y el sonido de esa letra o sílaba. Sólo adquiere algunas pocas las más comunes o las de su nombre ya que su capacidad para procesar esta relación está alterada y es limitada y adquiere otras ante la reiterada repetición (que es una de las estrategias del tratamiento).

De esta manera el niño es capaz de leer palabras comunes, cortas, conocidas, que casi las memoriza esquemáticamente, pero no puede leer palabras nuevas o pseudopalabras.

Es capaz de leer:

CASA - SOL - DIA - MOTO - PATO

No puede leer correctamente

ACAS - OLS - DAI - ATOP

Ejemplos de lectura :

SOL lee SOL

SAL lee SOL

SALE lee SOL

CASA lee CASA

CASO lee CASA

COSA lee CASA

El niño no accede a la lectura o escritura espontánea de palabras nuevas porque no puede fraccionar la palabra y corresponder las letras con un sonido, entonces ante palabras de similar morfología gráfica lee con error.

Así el niño no puede secuenciar la palabra y hacer la correspondencia grafema - fonema.

Ejemplo de lectura o escritura correcta deletreando:

cc.. oo.. mm.. ii.. dd.. aa..

C O M I D A

ccoo... mmii... ddaa...

Los niños con Dislexia fonológica no han adquirido la conciencia fonológica (relación grafema fonema), razón por la cual no se desarrolla la lectoescritura y el niño lee en forma global viendo la palabra como una imagen e intuyendo su lectura.

Así todas estas palabras pueden ser leídas de la misma forma:

ROPA

ROCA

ROTA

ROMA = ROPA

o bien usan una lectura de imágenes cuando la palabra se acompaña por dibujos, otros niños con Dislexia fonológica, leen la primer sílaba e intentan el resto.

Este tipo de lectura global, imaginaria o de imágenes es común en los niños pequeños, pero ya en el niño que ha transitado 6 / 8 meses del 1er. año escolar la lectura de imágenes solamente puede ser síntoma de Dislexia.

El niño con Dislexia fonológica, no puede registrar un almacén de palabras en su memoria, por ello cada palabra recibida siempre es como nueva.

En las niños pequeños de entre 3 y 5 años la incorporación de palabras a su vocabulario es escasa, pudiendo tener también problemas de comprensión por el poco manejo del vocabulario.

Dislexia diseidéctica

A diferencia de la Dislexia fonológica el niño es capaz de leer una palabra segmentándola con mucha dificultad pero cuando la tiene que leer de forma global, o en su totalidad, no puede hacerlo.

Ejemplo:

M O N E D A

Lee: mmoo... nnee... ddaa... (no puede integrar)

El niño lee la 1er. sílaba, lee la 2da. y si hubiere una tercera también la lee, pero cuando le preguntamos qué leyó no puede evocar la palabra completa.

Este tipo de lectura es muy lenta, segmentada y con dificultad.

Estos niños no poseen lectura comprensiva, pero cuando se les lee no presentan problemas de comprensión.

Dislexia profunda

Algunos autores consideran este tipo de Dislexia como una Alexia: Trastorno total para el acceso al proceso de la lectura.

El niño no puede leer ni en forma global ni en forma secuencial, todas las rutas a la lectura están inhabilitadas.

Este tipo de Dislexia generalmente está asociado a otro trastorno mayor por lo tanto es considerada como una Dislexia secundaria.

Dislexia secundaria

Esta clase de Dislexia se denomina al trastorno de lectoescritura cuando se presenta como un síntoma dentro de un cuadro mayor, junto o dentro de los trastornos de aprendizaje que padece el niño.

Un ejemplo claro es el retraso mental, en este niño presenta trastorno de aprendizaje y trastorno en la adquisición de la lectoescritura; tiene problemas en todas las materias escolares.

Gran número de niños con dificultades de aprendizaje en la adquisición de la lectoescritura no son disléxicos, es por ello que las causas que provocaron el trastorno son fundamentales para realizar un diagnóstico diferencial que permita acceder a la recuperación del trastorno. La adquisición de la lectoescritura puede estar afectado por:

- Retraso mental.

- Trastornos psicomotores.

- Déficit sensoriales.

- Privación cultural.

- Trastornos emocionales.

- Inmadurez

Diagnóstico del niño disléxico

El diagnóstico que permitirá diferenciar la Dislexia de otros trastornos se debe realizar desde tres ámbitos que convergen entre sí: Ámbito escolar, ámbito médico neurológico, ámbito terapéutico psicopedagógico.

Por lo tanto el diagnóstico diferencial de una Dislexia será detectado o tratado en la escuela, diagnosticado y tratado en el consultorio Psicopedagógico y avalado por la evaluación del Médico neurólogo.

Ante una posible Dislexia los pasos a seguir son:

1er. Detección y evaluación escolar.

2do. Derivación: Pediatra - Psicopedagogo

3ero. Diagnóstico Psicopedagógico y Neuropsicológico.

4To. Interconsulta con Neurología.

Detección y evaluación escolar

El maestro detecta los errores disléxicos y deberá realizar un seguimiento.

Si esto sucede en el 1er. año escolar podrá tomarse unos 3/ 4 meses luego de la primer mitad de año para certificar la permanencia de los errores.

Si estos errores son detectados a partir del 2do. año escolar o en cualquier otra etapa escolar, la derivación deberá ser rápida.

Para la evaluación el maestro podrá utilizar alguna de las fichas de seguimiento o bien confeccionar un informe detallado de las conductas del niño, de su modalidad de aprendizaje, de su desempeño escolar y de las dificultades observadas.

A este informe se pueden agregar producciones gráficas del niño o el cuaderno de clase.

O bien, completar un cuestionario sobre trastornos de conducta y aprendizaje.

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