Depresion Infantil

El tema de la depresión infantil tiene una definición muy amplia, y muy variada. En el libro las múltiples caras de la Depresión en niños y adolescentes de David Shaffer y Bruce D. waslick pág 1, dice que al igual que en muchos trastornos psiquiátricos, el progreso de la investigación en el campo de los trastornos del estado de ánimo en niños requirió la definición de unos criterios operativos consensuados.

Para el Dr. Eduardo R. Hernández Gonzáles, la depresión infantil puede definirse como una situación afectiva de tristeza mayor en intensidad y duración que ocurre en un niño. Se habla de depresión mayor, cuando los síntomas son mayores de 2 semanas, y de trastorno distímico, cuando estos síntomas pasan de un mes.

Aunque tienen definiciones diferentes coinciden en algo, que a este padecimiento no se le daba la importancia necesaria, ya sea porque oscilaban entre la incredulidad de que estos trastornos existieran antes de la adolescencia tardía, también debido a la poca importancia que se le daba a la salud mental de los niños.

En los años 40 empezaron a aparecer estudios relacionados con la depresión infantil, bajo los nombres de Akerson (1942) Spitz (1945) Bowlby (1951), entre otros. Pero hasta la época de los años 60 que Harlow hace experimentos con monos.

Este experimento consistía en separar a los monos de sus madres, el resultado fue que los primates presentaban las mismas conductas que los niños en esa situación. El carácter experimental de la psicología comparada, produjo impacto para este tipo de hallazgos.

A raíz de esto le empezaron a dar más importancia a la posibilidad de que existiera la depresión en niños, puesto que los monos parecían ser capaces de desarrollarlas, y fue hasta en los años setentas que la depresión infantil fue aceptada por el National Institute of Mental Health, como concepto y entidad psicopatológica.

.El tema que se va a tratar en esta investigación es la depresión infantil en niños de 6 a 8 años en el cantón de Acosta durante los meses de octubre a diciembre del año 2012, es importante señalar que este cantón tiene una población de 23.000 habitantes de ahí 1250 son niños de entre 6 a 8 años esta sería la población en la que se basa la investigación.

En el transcurso del año el psicólogo de la Caja Costarricense del Seguro Social del Área de salud de Acosta atiende dos casos al mes lo que sumaría 24 casos al año, de lo que ha concluido que el 5% de los niños atendidos padecen de lo que sería depresión severa.

Específicamente en los meses entre octubre a noviembre atendió a 30 niños, entre las edades de 6 a 8 años de ahí un 3% presentaron problemas de depresión, aunque este problema se da más en estudiantes de secundaria.

Aunque se puede pensar que tres casos no es una cifra alarmante, no se le puede dejar de dar la importancia que merece. Ya que es necesario prestarles mucha atención, debido a que los niños a estas edades no tienen el vocabulario necesario y no nos pueden decir “estoy deprimido/a” con todas sus letras.

Existen varios síntomas característicos de la depresión infantil tales como: tristeza, irritabilidad, anhedonia ( perdida del placer) , llanto fácil, falta del sentido del humor, sentimiento de no ser querido, baja autoestima, aislamiento social, cambios en el sueño, cambios de apetito y peso, hiperactividad, disforia e ideación suicida.

Si los padres tienen una relación cercana con sus hijos pueden detectar fácilmente los cambios que presentan los niños ya sea en su estado anímico o en su conducta.

Los cambios q presentan y pueden ser detectados fácilmente por sus padres son: incremento de infidelidad, llanto, reacciones de enfado o verdaderos ataques de rabia ante provocaciones mínimas. Los cambios en el tono emocional y la capacidad de relación emocional.

Por esta serie de motivos es indispensable que los padres estén al pendiente de sus hijos y que los apoyen en todo lo que necesiten. También es importante que tengan conocimiento de estos síntomas, para que puedan ayudar a sus hijos a tiempo, y así evitar que caigan en una depresión hasta el grado de tener que llevarlos con un especialista.

En el ámbito escolar también es de suma importancia darle la atención necesaria, debido a que la mayor parte del tiempo están en la escuela, los maestros tienen que estar capacitados para poder identificar cuando un niño está pasando por

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