Desarrollo Intelectual

Desarrollo intelectual

La inteligencia es la capacidad para resolver problemas nuevos, para Piaget es la capacidad de adaptarse al medio. Esta adaptación supone un intercambio entre la realidad externa y el individuo, influyéndose de manera mutua. El individuo modifica la realidad externa con su forma de actuar a la vez que la realidad influye también en la persona.

El desarrollo de la inteligencia comprende una seria de estadios y cada uno supone un avance respecto al anterior.

Estadio Sensorio-Motriz

Este es un periodo caracterizado por la acción práctica. Todas las construcciones que se logran en este nivel se realizan apoyándose exclusivamente en movimientos y percepciones, a través de una coordinación senso-motora de las acciones.

El niño de este periodo no puede representar todavía objetos ni situaciones, no utiliza símbolos ni palabras. Los logros de este periodo, son de vital importancia para las construcciones posteriores que se van organizando en una sucesión de complejización creciente. Piaget la divide en seis subestadios:

• Estadio I (0 a 1 mes)

Se caracteriza por el ejercicio y la consolidación de los reflejos. Los reflejos necesitan la ejercitación para que el niño pueda adaptarse.

• Estadio II (1 a 4 meses)

Se constituyen los primeros hábitos. Surgen las primeras coordinaciones sencillas entre esquemas: succión- visión, visión-audición, entre otras. Aparecen las llamadas reacciones circulares primarias en las cuales una acción producida en forma fortuita resultó agradable y vuelve a repetirse. Estas acciones están centradas en el propio cuerpo.

• Estadio III (4 a 8 meses)

Este período esta caracterizado por la coordinación visión-presión y por la aparición de las reacciones circulares secundarias en las cuales se refieren a que se tiende a repetir un efecto placentero pero ya no sobre el propio cuerpo, sino sobre los objetos externos. También aparecen las primeras imitaciones, siempre con el modelo presente y mientras se trate de una conducta presente en el repertorio del bebe.

• Estadio IV (8 a 12 meses)

El niño aplica esquemas conocidos a situaciones nuevas, mostrando así clara intencionalidad de sus actos, diferenciando fines de medios. Se observan progresos en la imitación. Aparición de conductas inteligentes propiamente dichas.

• Estadio V (12 a 18 meses)

Los actos de inteligencia se complejizan, el bebé ya no sólo puede utilizar medios conocidos para lograr el fin sino que puede emplear medios nuevos para lograrlo. Aparecen las reacciones circulares terciarias. Aquí la repetición de conductas azarosas placenteras incorpora nuevas conductas para lograr el efecto deseado.

• Estadio VI (18 a 24 meses)

Este subestadios supone la transición entre la inteligencia senso-motora y la inteligencia simbólica. El niño ya es capaz de encontrar nuevos medios por combinaciones mentales que facilitan una verdadera comprensión. El niño dispone ya de esquemas de representación. La imitación se ha complejizado a tal punto que se convierte en representativa, permitiendo al niño imitaciones diferidas es decir, sin presencia del modelo. Ya se ha logrado el objeto permanente gracias a los esquemas representativos el objeto puede interiorizarse y sus desplazamientos pueden representarse.

Hacia la finalización del estadio sensorio-motor, el niño ha logrado la estructuración del universo. La inteligencia senso-motora organiza lo real, construyendo las categorías de: objeto permanente, espacio, tiempo y causalidad. Paulatinamente, el niño logra ubicarse como un objeto mas entre los otros.

Estadio Preoperatorio

Es en este periodo donde aparece, entre el año y medio y los dos años, la función semiótica, o en otras palabras, la representación de un objeto ausente, habilidad que el niño no poseía en el estadio sensorio-motor. Así, esta función semiótica se refiere a la capacidad del niño de representar significados a partir de símbolos arbitrarios. Simultáneamente a la aparición de esta función, el niño

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