Fundamentos Generales De La Orientación

FUNDAMENTOS GENERALES DE LA ORIENTACIÓN

Concepto Orientación

La orientación (que significa buscar el oriente según su etimología) se define como la práctica de actividades organizadas dirigidas al logro de un objetivo especifico, así pues, relacionándolo con el significado etimológico, podemos decir, que se define al objetivo como el oriente y a la práctica de las actividades destinadas a buscar el objetivo como orientación. Esta definición, a pesar de que su significado en épocas pasadas estaba estrictamente ligado a la ubicación de un lugar con respecto a los puntos cardinales, a principios del siglo XX empezó a fundirse dentro del ámbito profesional, y posteriormente se extiende al campo educacional donde se convierte en una disciplina educativa, de esta manera vemos que la orientación, no importa el ámbito al que esté relacionado, siempre busca el logro de un objetivo especifico. También se puede definir la orientación como un proceso de ayuda continua a todas las personas, en todos sus aspectos, con la finalidad u objetivo, de prevenir problemas y promover desarrollo integral del ser humano. Ya habiendo definido el concepto de orientación, podemos analizar sus distintas variantes, entre las cuales podemos destacar:

Principios Filosóficos de la orientación

• Principio de Prevención: se trata de tomar acciones proactivas, es decir, tomar la iniciativa de actuar antes de que surja algún problema y de esta manera decidir en cada momento lo que queremos hacer y cómo hacerlo.

• Principio de Desarrollo: como su nombre lo indica, busca atender todos los aspectos del desarrollo humano. En este punto se considera a la persona en un constante crecimiento y la orientación como una actividad meramente dirigida al desarrollo integral de la misma.

• Principio de Intervención Social: se trata de ayudar al individuo a adaptarse al contexto donde ocurra la orientación, para que de esta forma pueda sortear los obstáculos que le dificulte el logro de sus objetivos personales.

CONCEPTO DE VOCACIÓN

A vocación es la inclinación a cualquier estado, carrera o profesión. El término proviene del latín vocatio y, para los religiosos, es la inspiración con que Dios llama a algún estado. Por eso el concepto también se utiliza como sinónimo de llamamiento o convocación.

A nivel general, la vocación aparece relacionada con los anhelos y con aquello que resulta inspirador para cada sujeto. Se supone que la vocación concuerda con los gustos, los intereses y las aptitudes de la persona.

La vocación también es considerada como un proceso que se desarrolla durante toda la vida, ya que se construye de forma permanente. Implica descubrir quién soy, cómo soy y hacia dónde quiero ir. Las respuestas a esos interrogantes marcarán la vocación y el camino a seguir por el individuo.

Al finalizar la escuela secundaria, cada ser humano comienza actuar en consecuencia con su vocación. La elección de una carrera profesional o de un trabajo, por ejemplo, suele responder a la vocación. En muchos centros educativos, se valen de la ayuda de los orientadores vocacionales, quienes a través de una serie de tests y charlas intentan que los adolescentes sigan un camino que los satisfaga al terminar sus estudios obligatorios.

Sin embargo, el proceso de descubrimiento de la propia vocación es muy complejo y no es igual para todas las personas. Hay quienes creen haber sabido desde siempre que sienten un fuerte lazo con una determinada disciplina, y éstos contrastan con las personas que llegan a la mitad de sus vidas y se preguntan qué han hecho y por qué. La orientación vocacional suele fallar más veces de las que acierta, ya que se basa en una receta cerrada, que ignora los aspectos fundamentales de cada persona, y que pretende dar con una respuesta en el menor tiempo posible.

En el mundo real, fuera de los tests y la euforia de quienes se sienten afortunados por poder cursar una carrera universitaria al finalizar el colegio secundario, la mayoría de la gente expresa que su trabajo no representa su vocación, sino que escogió ese camino en particular porque sus padres ejercían la misma profesión, o bien porque no sabían qué estudiar e hicieron caso a un orientador vocacional.

Por lo general, quienes suelen tener clara su misión en este planeta son los artistas, y eso explica que el concepto de vocación esté tan ligado al arte. La pregunta es, entonces, ¿por qué? ¿Por qué un cantante que se sienta en una calle peatonal con su guitarra y vive de las monedas que amablemente le donan los transeúntes se muestra más satisfecho que un contador que gana lo suficiente para mantener a su pareja y a tres hijos?

Es probable que la respuesta resida en cuánto haya profundizado cada individuo en su pasado, en sus raíces, en las razones de cada aspecto de su personalidad, para así poder estudiar sus necesidades, aquello que lo hace feliz, así como para defenderse de lo que amenace con derrumbar todo lo que haya construido. La vocación debería ser aquello que nos llena, que da a cada célula de nuestro cuerpo una sensación insuperable, una actividad que mientras la realizamos nos haga sentir que no necesitamos de nada más. Contrastando esto con el ritmo de vida que se lleva en la actualidad y con la creciente tendencia de la gente de tapar los problemas con ruido y con dinero, se entiende que muy pocos hayan oído ese llamado y que aún menos personas le hayan

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