“La repetición en Freud y Lacan”

     Universidad Abierta Interamericana

Facultad de Psicología y Relaciones Humanas

Licenciatura en Psicología

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“La repetición en Freud y Lacan”

Materia: Escuela Francesa

Docentes:  

• Titular:

• Lic. Zanelli, Silvia

• Adjuntos:

• Lic. Mazzitelli, María Alejandra
• Lic. Mendía, Mariana

Alumno: Clerici, Gonzalo Alejandro

Turno: mañana

Sede: Berazategui

Fecha de entrega: 16/11/2018

Mail: gonzaloclericia@gmail.com

En el siguiente trabajo se abordará cómo es tomada la repetición de lo reprimido según Freud y Lacan. Por último, se abordará un fragmento de la obra de “La Jerusalén liberada” por medio de la teoría Lacaniana.

Freud en más allá del principio de placer (1920) expresa que la compulsión de repetición es una exteriorización de lo reprimido. Los sujetos repiten lo reprimido como una vivencia presente antes que recordarlo, provocando así un displacer en su yo. Este displacer es causado debido a la expresión de las mociones pulsionales reprimidas. Empero, dice Freud que lo que es displacentero para un sistema (Cc o Pcc), genera placer en otro (Icc).

La compulsión de repetición devuelve vivencias pasadas, influjos de la temprana infancia que generan estragos en los sujetos tanto neuróticos como los no neuróticos. Deseos inconciliables con la realidad, en donde la pérdida del amor por el objeto primario y la frustración dejan dañado el sentimiento de sí, despertando más adelante el “sentimiento de inferioridad”: “no puedo lograr nada, nada me sale bien”.

Esto es lo que lleva a los neuróticos repetir en transferencia: situaciones afectivas dolorosas fruto de la represión de los deseos inconciliables con la realidad.

El médico trata de esforzar al paciente al máximo recuerdo y a la mínima repetición. Creencia de que se produciría un displacer menor si se recordaran o soñaran aquellas vivencias inconcientes antes que repetirlas.

Para aproximarse al término “repetición” según Lacan, es indispensable plantear el orden de lo real.

En el seminario 11 (1964) en Tyche y Automaton, Lacan hace la pregunta de dónde se encuentra lo real. A lo que responde: en el encuentro.

Tyche es fortuna, contingencias y lo aleatorio en la causalidad del sujeto. Encuentro con lo real. El reencuentro con lo inesperado. Lo real sin ley, lo real como inasimilable, aquello que no tiene representación.

Entramado que se encuentra con el que se teje el discurso de un sujeto, en sus sueños, lapsus, síntomas, fantasmas y en fin, los semblantes con los que hace frente a ese real sin ley que insiste “en no dejarse olvidar”. Real que gobierna nuestras actividades, por lo que en este seminario es articulado a la repetición. Todo lo que en ésta varía, se modula, esconde lo que se repite bajo la apariencia de lo nuevo.

¿Dónde lo encontramos? No es previsible, se trata de “una cita siempre reiterada con un real que se escabulle.

Ese encuentro con lo real, ese encuentro traumático produce en el sujeto una división subjetiva: desbordado, desamparado, descentrado de su posición de control. Esto puede producir mucha angustia.

Lacan  expone que “la repetición es algo cuya verdadera naturaleza está siempre velada en el análisis, debido a la identificación, en la conceptualización de los analistas, de la repetición y la transferencia. Cuando, precisamente, hay que hacer la distinción en ese punto.” (1964)

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