Mamá Tenmgo Que Hacer Una Entrevista

Yo: Mamita, tengo que hacer un deber de la U. Necesito saber cómo viviste tú mi adolescencia, cuéntame.

Mamá: Siempre fuiste bien tranquila, bien obediente, casi nunca tenía problemas. Aunque empezaste a dispersarte un poco en tu atención. Te volviste muy introvertida al contrario de tu niñez. Eso sí me preocupaba... pero bueno. Éramos muy unidas tenías mucha confianza en mí. A veces yo quería que seas un poco más independiente. No eras ni amiguera ni con vicios, no tenía yo de que preocuparme de nada.

La verdad es que tu adolescencia fue muy, muy llevadera, y es que tenías una manera de ser que no me daba miedo darte permiso... todo lo contrario a lo que hicieron conmigo.

Yo si quería irte soltando, aunque si me daba miedo irte a ver y a dejar sola, más bien me daba miedo con tu ñaño, ya contigo no mucho; confiaba más porque ya tu ñaño era el que te iba a dejar. De esa manera yo les fui soltando... yo siempre tuve la confianza de que estabas bien. Y la confianza de que eras tan buena.

En los extracurriculares siempre trataba de estar presente, yo sabía que era importantísimo. Me gustaba más bien que hagas otra actividad. Fue bonito que hagas algo más sí. Aunque eso sí, me fui volviendo bien exigente en lo académico. No permitía al menos en ese aspecto que fallen. Me daba miedo que hagas lo que yo hice, que se vaya dañar todo lo que es notas y eso, si yo no te daba permiso o me portaba tirana contigo (risas) o, en fin, si teníamos una mala relación. Entonces pedía las notas como recompensa de irles soltando. Fui fuerte al principio, pero luego de unos años ya cogieron el hábito de estudiar. Tú eras más dedicada que el ñaño. Y bueno, ya no sé qué más (risas) (Pontón Yerovi, 2014).

Yo: Qué más mamita (risas) De ley te acuerdas de algo más.

Mamá: Bueno, no buscabas novios. Te vi en el colegio siempre rodeada de amiguitas, pero a tí no con las mismas intenciones que tenían ellas. No te vi con las ganas de que tengas novio. Igual si hubieras tenido uno no me hubiera muerto (Pontón Yerovi, 2014).

Yo: Dijiste que yo siempre fui bien tranquila. ¿Qué razón crees tú que me hizo ser tan tranquila?

Mamá: Primero el ambiente en el que te desenvolvías, un colegio de mujeres, les tenían bien controladas. En la casa no se oyeron gritos ya, sino que fue algo ehhhm.. Ya fue una relación de amistad que fue creciendo. Creo que traté de sobreprotegerte, creo que te sobreprotegí mucho, creo que es una razón. Como mi carácter es tranquilo y con el divorcio ya se fueron los problemas, aunque tuvimos problemas económicos pero ya no emocionales, traté de encontrar las cosas valiosas de las cosas sencillas. Inculqué los pasos de la fe y del acercamiento a Dios, creo que eso si servía. Trate de mi vida tranquila, pasarte a vos y a tu ñaño… esa tranquilidad. Yo veía que capaz por eso te volviste

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