Modelo Para Extinguir Conducta De Fumar

Introducción

Según el informe de la OMS (Organización mundial de la Salud), el tabaquismo es la segunda causa de muerte en el mundo, la cual es considerada un problema de salud ya que causa daños físicos. Fumar cigarrillos es la primera causa de muerte en los países desarrollados. Esta pandemia ha tenido un auge en los países más desarrollados hace dos décadas aproximadamente.

El fumar como problema d salud publica

La OMS reconoció en 1984 el tabaco como una adicción capaz de causar daños físicos y como un problema de salud pública. (Pardell, 1996). El tabaco se extrae de la planta nicotiana tabacum y hoy se cultiva en los cinco continentes, aunque procede de América, se introdujo en Europa a la vuelta de uno de los viajes de Cristobal Colon. El tabaco puede consumirse de varias formas, mascándose o fumándose, pero en nuestra cultura ha predominado el fumarlo, de varios modos; en forma de cigarrillo, pipa o puros, el más utilizado es en forma de cigarrillos. Estos se han consumido desde épocas remotas, pero su auge se inicia con la fabricación industrial de forma mecanizada, a finales del siglo pasado, y con las guerras mundiales, especialmente en la segunda, a partir de la cual se produce un incremento. (Becoña, E., Palomares, A. y García, M. P., 1994).

En nuestro país hay 13 millones de fumadores, cifra en sí alarmante, pero si añadimos a los fumadores involuntarios o pasivos, resulta que 48 millones de personas, es decir, la mitad de la población mexicana, están expuestas a los daños producidos por el tabaco. Becoña, E. (2004b).

El fumador cigarrillos produce en la actualidad la muerte prematura de 40,000 fumadores en España (Peto et al., 1994), más de 500.000 en Europa y 526.000 para todos los países de América (Departamento de Salud y Servicios Sociales de E.U.A., 1992). Se calcula que en el mundo mueren anualmente tres millones de personas por fumar cigarrillos. En el momento actual se le considera como el problema número uno de la salud pública.

En el humo del cigarrillo hay miles de componentes (destacando la nicotina, el alquitrán, el monóxido de carbono y el benzo-a-pireno) que producen efectos negativos en la salud, especialmente en forma de dependencia y enfermedades. Para muchos fumadores fumar se va a convertir en una condición o proceso patológico crónico. Si en su ambiente cercano hay fumadores pasivos (hijos, pareja u otros), van a padecer también indirectamente las consecuencias del humo del tabaco ambiental, que más adelante se abordaran. Becoña, E., Córdoba, R., Díaz-Maroto, J., Aranda L., Ruiz, V., (2001).

La planta del tabaco

El tabaco pertenece al género nicotiana, familia botánica de las solanáceas (especie de planta). La planta del tabaco se caracteriza a la vista por tener grandes hojas y unas hermosas flores junto con una gran altura, igual o mayor que la de una persona adulta. Esta planta es la única en la naturaleza que sintetiza y luego conserva en sus hojas secas un potente alcaloide que recibe el nombre de nicotina y que da el nombre a su género vegetal.

Componentes del tabaco

Algunos de sus componentes son: polonio (sustancia radioactiva), compuestos de níquel arsénico (situado entre los metales y no metales y extremadamente toxico), compuestos de cadmio, nicotina fenol (es un alcohol), cresoles, cianida de hidrogeno (producto altamente inflamable), uretano (daña los órganos que fabrican la sangre, el hígado y el sistema nervioso central). Una exposición crónica puede provocar cáncer), amoníaco (se utiliza como producto de limpieza), monóxido de carbono y alquitrán.

Probablemente la mayoría de los fumadores no son conocedores de todo lo que aporta un cigarrillo a nivel componencial, aunque también es cierto que muchos consumidores habituales de tabaco seguirán haciéndolo a pesar de estar al tanto de los componentes.

Definición de tabaquismo, nicotina y adicción

La OMS define al tabaquismo como una enfermedad adictiva crónica que evoluciona con recaídas. La nicotina es la sustancia responsable de la adicción, actuando a nivel del sistema nervioso central. Es una de las drogas más adictivas, aún más que la cocaína y la heroína. Por ello es importante saber que aunque el 70% de los fumadores desean dejar de fumar, de ellos sólo el 3% por año lo logran sin ayuda. (Pardell, 1996)

El tabaquismo se considera como una adicción ya que cumple con las siguientes características: es una conducta que se repite constantemente, la cual no se puede parar aun sabiendo el daño que causa, cada vez se necesita más sustancia para conseguir el mismo efecto y aparecen síntomas que causan displacer cuando disminuye o cesa el consumo. Como en todas las adicciones se encuentran presentes factores biológicos, psico¬lógicos y sociales (predisposición genética, modelos a seguir, presión de los amigos, etc). (Pardell, 1996)

La nicotina es el primer ingrediente que buscan los consumidores del tabaco ya que es una sustancia que causa adicción, actuando en la cognición y conducta de los fumadores. Está comprobado que la nicotina es un estímulo para que la persona consuma tabaco y pueden estar asociadas distintas situaciones que fomenten la conducta de fumar, como factores ambientales, el lugar, el momento, etc. (Jimenez y Cols, 2004)

La conducta de fumar

El tabaquismo es un problema que se explica fundamentalmente por factores sociales, por factores psicológicos de reforzamiento y procesos cognitivos; así como por la dependencia fisiológica de la nicotina. (Becoña, 2004).

La conducta de fumar es una combinación entre ciertos factores biológicos, comportamentales (historia de modelos de consumo, reglas acerca de los efectos de la sustancia, de contacto directo con ella, etc.), motivacional, el contexto (ambiente escolar, familiar, laboral, pares, la c o no de la sustancia en el entorno cotidiano, etc) y lo social. (Nieto, 2003)

Síndrome de abstinencia

El cigarro ya no solamente se consume para obtener placer, sino también para evitar las consecuencias desagradables de la ausencia de tal sustancia en nuestro organismo. Es decir se produce un reforzamiento tanto positivo como negativo volviendo a la persona adicta. Los síntomas que se presentan son: deseo intenso de fumar, irritabilidad, dificultad de concentración, dolor de cabeza, aumento de apetito, insomnio, estreñimiento y cansancio. (Mariscal, 2008).

El periodo de edad en el que se suele comenzar adquirir la conducta de consumo de tabaco es entre los 14 y los 17 años, sobre

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