SISTEMAS PSICOLÓGICOS

UNA – Puno – FCEDUC - LLPyF

Nombre: Mariluz Calderón Mamani

Semestre: VIII – SISTEMAS PSICOLÓGICOS

Padres Brillantes, Maestros Fascinantes

El formar niños y eltener que educarlos, no es una tarea fácil, se necesita de tiempo y una buena porción paciencia; des de que nacen hasta que son adultos, están en constante aprendizaje, no basta con tener en cuenta sus necesidades de alimentación, vestimenta, salud corporal; tenemos que atender las necesidades de afecto, cariño y sobre todo de amor. Nadie dijo que ser padres sería una tarea sencilla, sin embargo debemos estar preparados para que nuestros futuros hijos, sean niños felices, sanos y sabios.

Muchos han escrito sobre la educación que debía tener un niño, uno de los primeros es Juan Jacobo Rousseau, que en su libro titulado “EMILIO”, en el que distingue tres tipos de educación la de la naturaleza, la de los hombres y la de las cosas. La primera, está relacionada con el desarrollo biológico y de las facultades físicas. La segunda, refiere las estrategias que utiliza el hombre para potenciar el desarrollo del niño. Y la tercera, trata de la educación que obtiene de sus experiencias con los objetos. Nos dice que los padres no preparan a sus hijos a sobrellevar lo bueno y lo malo de la vida, “Buscan siempre al hombre en el niño, sin considerar lo que este es antes de ser hombre” (Rousseau), y sin proponérselo los conducen a un sufrimiento innecesario; Rousseau también desdeña la educación memorística y constituye como base de la formación del estudiante la experiencia. Al leer en libro: PADRES BRILLANTES, MAESTROS FASCINANTES, encuentro que el autor Augusto Cury, y sus propuestas no difieren mucho de lo que nos dice Rousseau, ya que propone siete hábitos que diferencian a los buenos padres de los padres brillantesy cada uno de estos hábitos, tiene como meta que los padres estén preparados para trabajar y cultivar la inteligencia y la emoción de sus hijos.

Con cada uno de los siete hábitos de los padres brillantes que el autor nos muestra:

• Dejar que sus hijos los conozcan.

• Nutren la personalidad de sus hijos.

• Enseñan a pensar a sus hijos.

• Preparan a sus hijos no sólo para ganar sino para los fracasos y dificultades de la vida.

• Dialogan con sus hijos como verdaderos amigos.

• Los padres brillantes son agradables contadores de historias.

• Los padres brillantes nunca desisten, jamás pierden la esperanza en sus hijos.

Cada uno de estos siete hábitos, hace de los padres brillantes, personas que día a día, aprenden con sus hijos y de ellos, educan y procuran conocer a plenitud la palabra paciencia, que debe ser quizá al valor más importante que todo padre debiera aprender a cultivar. Estoy de acuerdo con todo lo que propone, ya que los padres son los primeros en olvidar que en algún tiempo ellos también fueron niños y no recuerdan

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