Aro De Cebollas

La práctica de éstos valores, y otros que pueden surgir, sin duda alguna en el ejercicio de la Praxeología pedagógica, son un aporte al ejercicio del modelo praxeológico que fortalece la calidad y calidez de la investigación formativa que permiten comprender que la tarea docente no se ejerce solamente para cumplir una profesión o satisfacer necesidades peculiares; va mucho más allá. Nada se puede dejar al azar, sino que está en contacto, no solamente con los saberes particulares obligatorios de su formación... distinguiendo estrategias de exploración sistemática, haciendo suyos los valores de la investigación; conocimiento del campo del trabajo, persistencia, actitud crítica, rigurosidad, compromiso con el problema para formar personas y comunidades generosa y solidariamente.

La persona, teniendo en cuenta estos criterios debe exigirse para armonizar las vertientes de lo objetivo y subjetivo de los valores, ya que éstos no significan un puro subjetivismo individualista que niega la alteridad(la libertad que se fundamenta en el otro y que se encuentra en relación con la de otros), sino que la intención debe estar ligada en un movimiento personal hacia un fin, designando el objetivo buscado en la acción, lo que supone que la Praxeología pedagógica sea una pedagogía abierta y activa .

Naturalmente la actitud como se dialogue desde la experiencia de la Practica y la Praxeología Pedagógica de la persona, será el resultado de los valores que pueda aportar a éste modelo y a la persona que lo aplica. La tarea de elegir de la persona, ha de tener en cuenta, la dimensión de comunidad de las personas y, también su capacidad de universalización, que es dialogada y responsable de la realidad, social, educativa

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