La Burbuja Apple, todo esta en linea.

La burbuja de Apple: todo está en línea

Cuando Apple anunció que sus equipos serían operados por nuevos sistemas, lo que más llamó la atención fue cómo todos quedarían totalmente conectados y prácticamente en tiempo real. ¿Eso nos hace depender de la manzana? ¿Cuántos nos afecta y cuánto nos beneficia?

iOS 8 y OS X Yosemite. Esos son los nombres que hay detrás de la interconexión de Apple. Porque desde un tiempo a esta parte, la forma en cómo se relacionan los equipos móviles de la marca de Steve Jobs ha estado cambiando radicalmente.

Solo basta con recordar cuando se dio a conocer el iOS 7, que fue la primera vez en la historia desde que salió el sistema operativo para móviles que la interfaz tuvo un cambio absoluto y no fue un simple maquillaje. Al mismo tiempo, desde Cupertino, California, donde están las oficinas centrales de Apple, estaba naciendo Mavericks, el sistema operativo que usarían los computadores portátiles y de escritorio. En ese entonces ya se veía venir una revolución basada en la interconexión que habría a través de la nube llamada iCloud.

Pero esto no solo se basa en hacernos la vida más fácil, sino que también en hacernos mucho más dependientes de utilizar los equipos y el software de Apple. Aunque tengas iPad,  MacBook Air y iPhone, hasta un tiempo atrás seguías usando Office de Microsoft, porque claramente es mucho más popular que Pages, que es el programa de texto de Apple. Pero ahora, con la burbuja, ya no será tan atractivo seguir dándole tributos a Bill Gates.

Con iOS 8 en tus móviles y Yosemite en tus computadoras, la vida puede ser mucho más fácil. Por lo menos en cuanto a las tareas que desarrollas en tus equipos electrónicos. Supongamos que estás en tu casa, escribiendo un informe en tu Mac a través de Pages. De repente, tienes que salir de manera urgente, así que no puedes terminar. Simplemente guardas el archivo en la nube y luego, mientras vas en el metro, tomas tu iPad y puedes seguir terminándolo en la versión móvil de Pages, sin tener que enviártelo por correo o subiéndolo a alguna nube de forma manual, como se hace en Google Drive. ¿Simple? Genial. Y así se replica en básicamente todas las funciones de tus equipos.

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