La Tecnología Un Arma De Doble Filo

“LA TECNOLOGIA, UN ARMA DE DOBLE FILO.”

¿QUÉ BUSCA EL SER HUMANO?

¿Cuál es su objetivo en la vida?

Definitivamente existen evidencias de que el ser humano desde el inicio de su existencia persigue dos objetivos muy claros: ser feliz y ser libre, es allí donde nace la tecnología , de esa búsqueda de querer ser más libre y más feliz haciendo a través de ella una vida cada vez más sencilla, sin tantos trabajos forzosos o cosas por las cuales preocuparse, que las máquinas pudieran hacer por ellos, brindando más tranquilidad y facilidades para darle mayor atención a lo verdaderamente importante, tiempo con la familia, estudios, conocer el mundo, entre otros, pero aunque en teoría todo parece muy bien las ambiciones económicas y de poder han llevado al ser humano a utilizar la tecnología de manera errónea e ineficiente y no de esa manera tan fantástica como se pensó inicialmente.

Es una realidad que el ser humano ha avanzado gracias a la tecnología. Es indiscutible que ésta es necesaria y debe existir, pues ¿Cómo se podría estar en contra del progreso? Sería una estupidez a estas alturas pensar en volver atrás y solo ver la tecnología desde sus aspectos negativos cuando también existen muchos aspectos positivos. Pero la verdad es que debemos mirar hacia atrás para darnos cuenta si en esencia el ser humano ha logrado el objetivo de su existencia.

Hay que pensar si es cierto que la tecnología lo ha hecho más libre y feliz, o si realmente lo ha condenado a la autodestrucción de su planeta y de su raza. Es por ello que tendremos que estudiar ejemplos de la realidad para entender esto. Por ejemplo la reciente amenaza de guerra del Corea del Norte hacia Corea del Sur y los Estados Unidos, donde se requiere utilizar el desarrollo tecnológico armamentista y la energía nuclear para destruir y asesinar, sólo por poder.

Es allí donde nosotros, como parte de esta sociedad, debemos reflexionar acerca de si el hombre utiliza la tecnología para avanzar y mejorar, ¿O para retroceder? Nos cuestionamos constantemente cómo es posible que después de haber vivido experiencias desagradables y masacres, y lógicamente haber pasado por un proceso de concientización acerca de las consecuencias de la I y II Guerra Mundial, ahora estemos repitiendo estas situaciones, sin ningún sentido ni justificación. Esto nos demuestra que en vez de utilizar el desarrollo en el área industrial para generar felicidad y libertad, nos estamos condenando a la muerte, la tristeza y la desesperanza.

A su vez, podríamos estudiar el caso de la educación, donde los jóvenes desde muy temprana edad comienzan a manejar herramientas sofisticadas que se desarrollan rápidamente día tras día: celulares, computadoras, software y ni hablar de la Internet. Los estudiantes, lamentablemente, se han convertido en fanáticos seguidores de este progreso y este vertiginoso cambio, siendo principalmente atraídos por las facilidades que le trae la Internet eso ha ocasionado que se vuelvan personas vagas y vacías, donde el exceso de las facilidades –a pesar de sus bondades, como comunicarse con cualquier persona en cualquier parte del mundo, encontrar todo tipo de información y conocer las noticias del mundo entero en tiempo real- ha colocado a las personas en una posición muy cómoda limitando la comunicación directa y personal, disminuyendo su capacidad creativa y de razonamiento pues todo está servido en bandeja de plata.

Tiempo atrás, las personas estaban obligadas a investigar y leer mucho más, utilizando la lógica y desarrollando relaciones interpersonales sólidas y basadas en valores, sentimientos y principios, que se compartían físicamente cara a cara. Ahora los estudiantes no leen ni sus propias investigaciones, una prueba más donde se demuestra que el exceso del “avance” ha convertido a los jóvenes en superficiales y dependientes totalmente de la tecnología en general. Pero sería errado basarnos solamente en los aspectos negativos y no considerar los positivos, la tecnología es necesaria pero muchas veces se ha utilizado de la manera incorrecta.

Por mucho tiempo, científicos, profesores, periodistas, políticos, ambientalistas y doctores han propuesto soluciones a este problema, el gran inconveniente no es que exista una solución correcta o incorrecta, sino que ¿Cómo haremos para que esta solución se lleve a cabo de una forma verdaderamente global y universal? La verdadera solución va más allá, es crear una conciencia generalizada en cada país, cada pueblo, nación, isla, o en cualquier pequeño rincón del mundo, que se concrete de forma masiva. Es muy fácil decir: ¡Vamos todos! pero la realidad es que no es así, puesto que muchas personas no se ven interesadas, no se sienten afectadas o simplemente que su mínimo aporte es inútil. Adam Smith decía que:

“Un individuo al perseguir su propio interés, frecuentemente

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