El Acto Juridico

ACTO JURIDICO

Se considera que un acto jurídico es la manifestación que una persona realiza de su voluntad, que se hace con la intención de producir consecuencias jurídicas, es decir, la creación, transmisión, modificación y extinción de derechos y obligaciones.

HECHO JURIDICO

Se habla de hechos jurídicos comprendiendo a todos aquellos acontecimientos naturales o del hombre que originan consecuencias de derecho; hay hecho jurídico cuando por un acontecimiento natural o por un hecho del hombre, en el que no interviene la intención de originar consecuencias de derecho, se originan no obstante.

Los hechos del hombre pueden ser voluntarios, involuntarios o realizados en contra de la voluntad. Por lo tanto hay hechos jurídicos voluntarios; es decir, ejecutados por el hombre, pero en ellos la voluntad no está animada de la intensión de producir consecuencias de derecho; estos pueden ser lícitos o ilícitos.

Los hechos ilícitos son los delitos, en estos existe la intención de dañar, pero no de originar las consecuencias jurídicas.

Los hechos lícitos fueron denominados antiguamente “cuasicontratos” y son la gestión de negocios, el pago de lo indebido y ciertos casos de copropiedad.

ELEMENTOS ESENCIALES O DE EXISENCIA

Tres son los elementos esenciales del acto jurídico:

a) Una manifestación de voluntad, que puede ser expresa o táctica.

Es expresa cuando se exterioriza por el lenguaje: oral, escrito o mímico.

Es tacita, cuando se desprende de hechos u omisiones que de manera necesaria e indubitable revelan un determinado propósito, aunque el autor del acto jurídico no exteriorice su voluntad a través del lenguaje.

b) Un objeto física y judicialmente posible, junto a los actos jurídicos debemos distinguir un objeto directo y en ocasiones un objeto indirecto.

El objeto directo consiste en crear, transmitir, modificar o extinguir derechos u obligaciones. La definición del acto jurídico revela su objeto, por esto decimos que es una manifestación de voluntad con el objeto de crear, transmitir, modificar o extinguir derechos u obligaciones.

​Hay también un objeto indirecto; pero este no se presenta en la totalidad de los actos jurídicos; es sobre todo en los contratos y en los convenios en donde lo encontramos. El objeto directo en los convenios es crear, transmitir, modificar o extinguir derechos u obligaciones y el indirecto consiste en la cosa o en el hecho materia del convenio. De tal manera que un contrato crea obligaciones que pueden ser de dar, hacer o no hacer, y así cada obligación tiene su objeto. Este objeto directo de las obligaciones es el objeto indirecto del contrato. Las consecuencias del contrato de compraventa, por ejemplo, recaen sobre una cosa que constituye el objeto indirecto del contrato y de la obligación creada por el mismo. Sobre este particular debe decirse que propiamente las cosas o los hechos, son objetos indirectos de las obligaciones y, por consiguiente, de los contratos, en tanto que se refieren a formas de conducta.

c) El reconocimiento que haga la norma jurídica, a los efectos deseados por el autor del acto. Si la norma jurídica no reconoce una cierta manifestación de voluntad, no hay acto jurídico por falta de objeto para producir consecuencias de derecho que estén amparadas por el ordenamiento. Si todas las manifestaciones fueren amparadas por el ordenamiento jurídico, el derecho estaría al servicio de los caprichos de los particulares.

ELEMENTOS DE VALIDEZ DEL ACTO JURIDICO

Los actos jurídicos existentes pueden tener una existencia perfecta y entonces se denominan actos validos; para ello es necesario que además de reunir los elementos de existencia no tengan ningún vicio interno ni externo.

Son elementos de validez del acto jurídico los siguientes:

• Licitud

• Forma o formalidad.

• Ausencia de vicios de la voluntad

• Capacidad

1.-LICITUD

Este primer elemento supone la licitud en el objeto, motivo, fin o condición del acto jurídico, es decir, los actos necesitan ser lícitos en todas sus manifestaciones para que el derecho los ampare y le dé consecuencias jurídicas.

En este caso consideramos como ilícito todo hecho que es contrario a las leyes de orden público o a las buenas costumbres.

Ejemplos de la ilicitud en el objeto podrían ser: la venta de una cosa ajena, contraer un segundo matrimonio si haber disuelto el primero, etcétera.

2.- FORMA O FORMALIDAD.

Este segundo elemento o requisito de validez, se hace consistir en que la declaración o la manifestación de la voluntad, se produzca en la forma que la ley establece. Se distinguen tres formas.

a) Consensuales: son actos consensuales aquellos en que la ley no exige una forma especial para su celebración, esto es, toda manifestación de la voluntad es válida, ya sea de forma verbal, escrita, mímica o de manera tacita.

Los actos jurídicos consensuales más comunes que encontramos son: las compras que realizamos en las tiendas, supermercados, el transporte, etcétera.

b) Formales: son aquellos en donde es necesario que la voluntad se exprese por escrito para que tengan validez. Ya sea mediante el documento público, que es aquel que se otorga ante un funcionario que tiene la fe pública, o privado.

c) Solemnes: Son aquellos actos en los que se debe observar una formalidad especial y por escrito, otorgándose ante un funcionario determinado, bajo la sanción de inexistencia si no se cumple.

Por ejemplo, el matrimonio, si no se realiza ante el oficial del registro civil y no se registra en el libro de matrimonios, no hay matrimonio.

3.- AUSENCIA DE VICIOS DE LA VOLUNTAD.

Es necesario que la voluntad se exteriorice sin vicios, que sea libre y cierta.

Los vicios de la voluntad son:

a) Error: el error consiste en una falsa creencia de la realidad; creer verdadero lo que es falso o falso lo que es verdadero. Hay distintos tipos de error:

• Error de derecho: se hace consistir en

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