Importancia de la filosofía en la docencia

Importancia de la filosofía en la docencia

Existen profesores que se preguntan ¿Para qué sirve la filosofía en la docencia? ¿En qué contribuye? Ante estas interrogantes, cabe señalar que, si bien el principal objetivo del maestro es educar al niño de manera integral, este se va a valer de los aportes de la filosofía en su práctica docente para poder explicar algunos conceptos, indagar acerca de un tema en específico, etc; además de influenciar en su concepción o visión acerca de la su labor. Es por ello que podemos decir que todo pedagogo tiene una filosofía de la educación.

Según Santiago (2020) señala que los aportes de la filosofía de la educación son los siguientes:

El desarrollo de un pensamiento crítico sobre la realidad y las teorías educativas: Una cualidad propia de la filosofía es el carácter crítico que posee, es gracias a ello que esta disciplina logra problematizar el saber, la realidad y las cosas, sin dejar llevarse por las apariencias o por lo que se adquiere por la opinión. En este sentido, los docentes como agentes de transmisión y transformación de saberes, deben tener esa actitud crítica hacia el saber y la realidad, ya que todo está en constante cambio, y se descubren y crean nuevos conocimientos (Santiago, 2020). El docente en su práctica debería tratar los contenidos dando una perspectiva crítica, especulando, o quizá generando hipótesis acerca del tema en cuestión. Además, debería promover en su clase el pensamiento crítico reflexivo en sus estudiantes, ya sea mediante preguntas o recolección de opiniones.

Cuestionar la naturaleza humana

Uno de los problemas centrales de la filosofía de la educación es saber cuál es la naturaleza humana. Es necesario que un docente al tratar y educar a niños, jóvenes o adultos tenga en claro cuál es la concepción de ser humano. Es justamente la filosofía de la educación la que ayuda al maestro a comprender qué se ha entendido por ser humano a largo de la historia.

Comprender el origen y desarrollo del conocimiento, la ciencia y los procesos de investigación educativa.

El maestro debe conocer aspectos básicos sobre teoría del conocimiento, tales como su posibilidad, origen y esencia, y con ello poder saber navegar en la complejidad de los saberes que se instruyen en las instituciones educativas. Además, todo docente al estar constantemente cuestionando el conocimiento y la realidad va perfilando su perfil como investigador.  

Comprender las cuestiones éticas.

La docencia se encuentra direccionada bajo un marco normativo basado en una serie de principios, derechos y deberes que generan en el aula un clima de armonía donde debe existir el respeto y debe imperar la justicia. Ese dicho marco normativo rige lo que debemos hacer como docentes actuando moralmente y siendo ejemplo para los educandos. Es ahí donde la filosofía asume su rol permitiéndonos entender por qué algo es bueno y malo, y en consecuencia por qué el docente debe actuar de una determinada forma en el proceso educativo.

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