Obesidad Siglo XX!

OBESIDAD: ¿LA ENFERMEDAD DEL SIGLO XXI?

OBESIDAD: Es una enfermedad crónica originada por muchas causas y con numerosas complicaciones, la obesidad se caracteriza por el exceso de grasa en el organismo y se presenta cuando el Índice de Masa Corporal en el adulto es mayor de 25 unidades.

Anteriormente se consideraba a la persona con sobrepeso como una persona que gozaba de buena salud, sin embargo ahora se sabe que la obesidad tiene múltiples consecuencias en nuestra salud, como lo son los padecimientos cardiovasculares, dermatológicos, gastrointestinales, diabéticos, etc.

La energía que obtiene el cuerpo mediante los alimentos debe ser gastada conforme el humano realiza alguna actividad física, al no ocurrir esto, se genera la gordura u obesidad.

El mundo moderno y la tecnología han creado el ambiente propicio para que se desarrolle este padecimiento, ya que el trabajo cotidiano ya no requiere de tanto esfuerzo físico ni de movimientos para realizarlo.

Lo mismo ocurre, continuó, con los medios de transporte, los cuales han hecho que el ser humano sea cada vez más pasivo y que tenga actitudes sedentarias.

La obesidad se ha convertido en una enfermedad con una gran mortalidad en México, como las enfermedades de corazón, la diabetes y los infartos.

Ganar la guerra contra la obesidad es todo un reto que implicara sudor y lágrimas: se requiere un autocontrol ilimitado. Es probable que el futuro existan medicamentos que ayuden a la gente muy obesa, pero para el resto de las personas moderadamente obesas el remedio no está ahí. Además, no se pueden cambiar los genes con los que nacimos, lo que deja una sola alternativa: deshacer los excesos que hemos creado. Hay cosas tan sencillas como poner apropiadamente la comida en el plato, combinar los alimentos de manera adecuada y aumentar la actividad física que pueden ayudar, pero se requiere de un gran esfuerzo. Con los años adquiridos una gran cantidad de malos hábitos alimenticios que son difíciles de romper.

Para bajar de peso se necesita una combinación adecuada de alimentos y una cantidad equitativa. Cuando se exceden estos límites se engorda, independientemente de lo poco que sea el exceso. Tan solo 100 calorías extras al día harán que una persona pese siete kilogramos más al final del año. El problema de las calorías no es cuantitativo sino cualitativo, es decir, no es necesario contar con él número sino la calidad del alimento. Por ejemplo, el brócoli engorda menos que las papas cocidas. La grasa es energía densa y contiene el doble de calorías en un gramo que las proteínas o los carbohidratos. No todas las grasas son malas ni se debe prescindir de ellas, al contrario, grasas no saturadas como el aceite de oliva y el aguacate ayudan a movilizar otras grasas más densas.

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