Política Exterior De México

Como es bien conocido México a lo largo de su historia antigua y contemporánea ha favorecido las relaciones con Estados Unidos. Debido a la situación geográfica de nuestro país se ha presentado lo que se podría llamar un “favoritismo” hacía el vecino del norte. Contando con diversos acuerdos de comercio, de seguridad, bilaterales y multilaterales. Estados Unidos es y ha sido por mucho tiempo el primer socio comercial de México.

A pesar de las críticas hechas hacia la aparente preferencia de México hacia Estados Unidos, no se puede negar que los diversos tratados que han firmado han traído beneficios para la economía mexicana.

México siendo un país en vías de desarrollo requiere de políticas y regulaciones que ayuden a su progreso y crecimiento. Un pilar para el desarrollo nacional es la política exterior. Muchos países han visto incrementar su crecimiento y calidad de vida gracias a una política externa adecuada, como es el caso de China y también nuestro país gracias a acuerdos como el TLCAN.

Si es cierto, favorecemos las relaciones con Estados Unidos pero no se puede negar que la relación ha surtido resultados. Si México se ha beneficiado de acuerdos con su vecino del norte, ¿Qué pasaría si ampliara sus relaciones y acuerdos con otros países con una relevancia y poderío económico parecido al de Estados Unidos?

Hay dos regiones que México podría aprovechar para hacer acuerdos y negocios, estas son Asia y Europa, en especial con dos naciones presentes en dichas regiones. La primera de ellas es China, la primera economía a nivel mundial y primer socio comercial de Estados Unidos. La segunda es un país que paso a ser olvidado por tiempo, pero que ahora está volviendo a recuperar la importancia y poderío que tuvo hace varias décadas, dicho país es: Rusia.

MÉXICO Y CHINA

China es el segundo socio comercial de México y nuestro país es el tercer socio comercial del gigante asiático. Ambos países lanzaron sus relaciones bilaterales el 14 de febrero de 1972.

La mayor parte del tiempo ambas naciones han mantenido relaciones en un ambiente de estabilidad y desarrollo, pero ha presentado sus momentos de tensión y desacuerdos, la gran mayoría de provenientes de México ya que considera que China se beneficia más de esta relación. El más claro ejemplo que hay son datos del intercambio comercial de ambos países de finales de 2012: el intercambio comercial entre ambos países fue de más de 60 mil millones de dólares, de los cuales sólo 5 mil 721 millones de dólares son exportaciones mexicanas al país asiático y el resto es perteneciente a productos chinos importados a México.

China actualmente es la primera economía del mundo, por eso la relación México-China debe enfocar primordialmente en el ámbito comercial. Por eso es necesario conocer los fallos en las relaciones comerciales de ambos países para ver en qué aspectos se pueden mejorar y lo más importante, ver de qué manera México se puede beneficiar más.

En primer lugar es necesario que México y China lleguen a un acuerdo para que haya un balance en el comercio entre los dos países, en el que ambos se vean beneficiados no solo en el aspecto material, también en el económico. Un tratado de libre comercio entre los dos países puede ser también una opción viable para poder ofrecer más productos y quitar restricciones en los mercados de China y México para que entren más productos y empresas de las dos naciones en sus mercados locales.

Es importante resaltar que como México, el primer socio comercial de China es Estados Unidos. México puede usar su posición geográfica para servir como puente para que crucen los productos chinos hacia Estados Unidos viceversa. Incluso también puede ser viable la opción de un tratado de libre comercio entre los tres países.

Un dato interesante que también puede servir para el beneficio mexicano: Latinoamérica se ha convertido en el mayor proveedor de materias primas del gigante asiático, pero el costo de brindarla puede provocar condiciones poco convenientes

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