Una Crisis Entre "hermanos" Conflicto Entre Venezuela Y Colombia

El comienzo de un conflicto: Uribe vs. Chávez

El primero de varios momentos de tensión para las relaciones bilaterales entre Colombia y Venezuela, tuvo lugar a principios del 2005 con la captura del colombiano Rodrigo Granda, también conocido como el “canciller” de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).

Granda, quien era la persona encargada de las relaciones internacionales del grupo guerrillero en Caracas, fue capturado en tierras Venezolanas, según el Ministerio de Defensa de Colombia. Rápidamente, el gobierno del presidente venezolano Hugo Chávez, calificó el acto como una violación a la soberanía de su país y aseguró que Granda fue secuestrado por soldados colombianos y venezolanos que habían sido sobornados, y luego llevado a la frontera Colombo-Venezolana. El incidente desató una crisis que llevó al rompimiento de las relaciones comerciales y diplomáticas entre ambos países.

En enero de 2005, la frontera Colombia-Venezuela se paralizó, y el Gobierno venezolano ordenó suspender los lazos comerciales con Colombia hasta que éste ofreciera una disculpa formal. El presidente colombiano Álvaro Uribe se negó y Venezuela llamó a consultas a su embajador en Bogotá. Días después la crisis se resolvió, a partir de un comunicado del Gobierno de Colombia en el que se pidió disculpas y con la posterior visita del presidente colombiano a Caracas.

La tensa calma se volvió a romper en el 2007 cuando Chávez fue invitado por la senadora colombiana Piedad Córdoba para que abogara ante Uribe por un acuerdo humanitario entre Bogotá y las Farc, y así efectuar un canje de secuestrados en manos del grupo guerrillero por rebeldes presos en las cárceles.

Uribe suspendió la labor de su homólogo venezolano, ya que Chávez y Córdoba habrían hablado con el alto mando militar sin la previa autorización del Gobierno colombiano. De nuevo, Chávez decidió congelar las relaciones con su vecino país y una vez más, se produjo una fractura en las relaciones políticas, esta vez, con implicaciones económicas serias para los dos países. Es a partir de este momento donde se inicia una guerra verbal entre ambos presidentes y una enemistad pública que se convirtió en noticia en los principales periódicos y medios de comunicación locales y del continente.

En enero de 2008, Chávez solicitó a la comunidad internacional que se le otorgara el estatus de fuerzas insurgentes a las guerrillas colombianas de las Farc y el ELN (Ejército de Liberación Nacional) y que se les retirara de las listas de grupos terroristas. La propuesta fue rechazada por Colombia, Estados Unidos y la Unión Europea y dejó una sensación de sinsabor en el pueblo colombiano que se sintió ofendido con la propuesta del vecino Chávez.

El primero de marzo de 2008, la crisis se agudizó con el bombardeo hecho por el Ejército colombiano a un campamento de las Farc ubicado en la provincia de Sucumbíos-Ecuador, cerca de la frontera con Colombia. El "número dos" y portavoz internacional del grupo rebelde, ‘Raúl Reyes’, fue dado de baja en territorio ecuatoriano.

Este hecho desencadenó una nueva crisis diplomática entre Colombia y Venezuela, en la que ahora se encontraba involucrado Ecuador. Como señal de protesta, el Gobierno ecuatoriano llamó a consultas a su embajador en Bogotá y su presidente, Rafael Correa, criticó duramente a su homólogo colombiano. Así mismo, Chávez salió en defensa de Correa y ordenó movilizar cientos de tanques y 10 batallones a la frontera con Colombia; además de ordenar el retiro del personal de la embajada en Bogotá. Esta nueva etapa de la crisis no afectó únicamente las relaciones diplomáticas entre ambos países sino que también las relaciones comerciales y el tránsito de personas y de mercancías en la zona fronteriza.

Tras el bombardeo, se comenzó a divulgar información escandalosa aparentemente extraída de tres computadores hallados en el campamento donde fue abatido Raúl Reyes. Dicha información, comprometía al mandatario venezolano y ecuatoriano con apoyo a grupos guerrilleros y con un respaldo militar de las Farc a Chávez y así mismo financiamiento económico del mandatario venezolano al grupo guerrillero. Y cuando la situación era aún densa y crítica, se dio a conocer un acuerdo militar firmado entre los gobiernos de Bogotá y Washington, para el uso de siete bases militares colombianas por parte de personal militar y civil estadounidense para la realización de operaciones conjuntas en contra del narcotráfico y el terrorismo.

El hecho fue calificado por Chávez como una amenaza para su país y el resto de la región y advirtió que estas bases podrían implicar el inicio de una guerra en Sudamérica: "Se trata de los 'yankees', la nación más agresora de la historia de la humanidad, capaz de lanzar bombas nucleares en Hiroshima y Nagasaki", dijo Chávez durante una conferencia de prensa.

A su vez, el Gobierno de Álvaro Uribe defendió el convenio de cooperación militar con EE.UU y pidió a los países vecinos respetar el principio de la no injerencia en asuntos internos.

En febrero de 2010, Uribe y Chávez protagonizaron una fuerte discusión con cruce de insultos durante la Cumbre del Grupo de Río, en Cancún, México. Uribe protestó por lo que consideró un embargo comercial de Venezuela a Colombia. Al final de la reunión, ambos mandatarios aceptaron la mediación del presidente dominicano, Leonel Fernández.

En julio de ese mismo año, Colombia presentó en una sesión especial del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), pruebas sobre la presencia de campamentos guerrilleros en Venezuela. De nuevo, Chávez anunció la ruptura de las relaciones bilaterales con Colombia y ordenó un estado de “alerta máxima” en la frontera.

El 28 de julio de 2010 se cumplió un año de crisis en las relaciones, las cuales pasaron de estar congeladas a rotas. Durante la época de crisis, las relaciones diplomáticas se vieron sumamente afectadas con el constante cierre de la embajada de Venezuela en Bogotá; y el cierre intermitente en la región fronteriza impactó de forma negativa el comercio.

Un nuevo aire político: El restablecimiento de las relaciones bilaterales

En agosto de 2010 el recién electo presidente Juan Manuel Santos, tomó posesión. El canciller Venezolano Nicolás Maduro asistió a la ceremonia. Durante su discurso de investidura, Santos aseguró que uno de los objetivos de su mandato sería "reconstruir las relaciones con Venezuela

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