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ENSAYO DE LA COMUNICACION


Enviado por   •  9 de Febrero de 2015  •  5.588 Palabras (23 Páginas)  •  1.898 Visitas

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INDICE

*INTRODUCCION.................................................................PAG. 3

* JUSTIFICACION……………………………………………….PAG. 4

*MARCO TEORICO…………………………………………....PAG.5-6

*LA COMUNICACIÓN EN ENFERMERIA………………..….PAG.7-9

*LOS ESTILOS DE LA COMUNICACIÓN………………….....PAG.10

*TECNICA Y HABILIDADES ASERTIVA………………………..PAG.11

*ERRORES Y BARRERAS EN LA COMUNICACIÓN DE ENFERMERIA…………………………………………………….PAG12-13}

* LA IMPORTANCIA DE LA COMUNICACIÓN EN ENFERMERÍA………………………………………………..…. PAG. 14-16

* COMUNICACIÓN NO VERBAL……................................PAG.17

*CONCLUSION………………………………………….….....PAG.18

*BIBLIOGRAFIA……………………………………….............PAG. 19

INTRODUCCIÓN

La comunicación se ha convertido en una de las herramientas más primordiales, cuyo manejo nos permite ayudar a los pacientes tanto a avanzar en sus procesos de adaptación y saber cómo conservar su propia identidad participando en el proceso activo y a reducir la ansiedad, el miedo y la angustia, la negación de la información pueden llegar a constituir elementos prácticamente distintos en cada situación que determinarán así la dificultad de la comunicación adecuada en la misma.

El desarrollo de cualquier tipo de actividad profesional, requiere de la presencia de distintos tipos de cualidades, conocimientos y habilidades. Con el tiempo vamos adquiriendo conocimientos a los cuales podríamos denominar como teóricos o técnicos, y el otro tipo de conocimiento es donde se presentan nuestras habilidades y destrezas, las cuales podemos aplicar en el campo que nos encontremos.

La forma de ser de cada persona es un factor importante de cada persona en la hora en la que se establecen relaciones de cualquier tipo con los demás. Para lograr que nuestra comunicación sea buena y eficaz, es importante que la persona cuente con una buena autoestima, que se quiera así mismo, que se valore y respete, y que se acepte tal y como es el, pese a los límites y defectos que muchas veces nosotros mismos nos ponemos, como todo el mundo. Y es indispensable que la persona crea intensamente en lo que quiere comunicar.

Es necesario y primordial dedicar esfuerzo, con esto podemos lograr una buen comunicación o de lo contrario, muy mala, o al menos debemos intentar ser mejores comunicadores. Nosotros como futuros profesionales de enfermería debemos ir relacionando las distintas formas de actuar y comportarse a la hora de relacionarse con sus pacientes. La atención sanitaria debe ir más allá de la realización.

La comunicación tiene un valor terapéutico, este es el mayor, el que se trata de profesionales que por su puesto de trabajo tratan habitualmente con pacientes y familias en las que no tienen posibilidades de realizar una intervención con fines curativos, ya sea por sus características o por como irá evolucionando la enfermedad.

JUSTIFICACIÓN

Tenemos como objetivo principal de este trabajo es con el fin de crear una reflexión individual y grupal, para fomentar actitudes positivas en los profesionales de enfermería. También se hizo con la finalidad de dar a conocer la importancia que tiene la comunicación en las relaciones interpersonales, de enfermero a paciente, para desarrollar técnicas y habilidades que a nosotros como futuros profesionistas nos ayudarán y así podremos efectuar una comunicación más eficaz en el ámbito profesional.

Es muy importante el saber cómo debemos de comunicarnos con nuestros pacientes y sus familiares, con los pacientes para poder ayudarlos durante el proceso de su enfermedad y con sus familiares para hacerles saber y mantenerlos informados acerca del proceso por el que está pasando su familiar y mantener una muy buena comunicación .

La comunicación no tan sólo consiste en el diálogo entre dos o más personas, sino también en los gestos, las posturas, las miradas. La enfermería juega parte importante en el proceso comunicativo.

La comunicación es muy importante en la vida diaria y en la práctica de la enfermería, las comunicaciones pueden ser eficaces, de intercambios productivos o de lo contrario pueden ser causas de confusión y desaliento, sino se comunica de la manera correcta. La comunicación es un arte y es un componente esencial en la vida del personal sanitario para mantenerse en un ambiente confortable.

MARCO TEÓRICO

Desde siempre la comunicación es y ha sido una necesidad humana, por tanto debe ser satisfecha para poder hablar en todo sentido de un ser humano integral y dar una atención integral. La comunicación es esencial en cualquier área de trabajo, los cuidados y atención a los pacientes son elaborados a partir de las situaciones que nosotros mismos observamos de cada uno de ellos y también de sus familiares.

Ser buenos comunicadores no es que seamos los más accesibles o tolerantes, tampoco en mostrarnos más simpáticos ante nuestros pacientes, sino en ser más eficaces en nuestro desempeño profesional y esto es lo que nos permite las habilidades de la comunicación.

Una comunicación adecuada se basa en la utilización de los conocimientos, técnicas y habilidades que nos ayudan a conseguir la información necesaria para actuar en cualquier tipo de intervención, para así crear un espacio de confianza y credibilidad para así hacerle entender al paciente su problema.

La comunicación es la herramienta que nos ayuda a obtener la explicación a la vivencia de la enfermedad, de cómo el paciente la experimenta. , nos sirve también para obtener más participación por parte del paciente en el tratamiento que se le da.

Las técnicas y habilidades de la comunicación nos sirven para poder plantear modificaciones que son consideradas de acuerdo al estilo de vida del paciente, y para darnos cuenta de cuando realmente el paciente está decidido a cambiar su conducta. Si damos un buen uso de las técnicas y habilidades de la comunicación podremos conseguir, además de todo lo ya mencionado anteriormente, trabajar en un ambiente agradable.

La mejora de las habilidades comunicativas por parte de nosotros como profesionales, están relacionados con mejores resultados para una buena salud física, mental, funcional y subjetiva. Estos resultados se encuentran en la satisfacción del paciente así como la del profesional. Es incrementada así la eficiencia clínica.

Nosotros como futuros profesionales de enfermería nos enfrentaremos a diversos tipos de situaciones, debido a la interacción que tendremos con el paciente y así mismo con sus familiares. Desde el área de habilidades de la comunicación y las técnicas que se emplean, tendremos una serie de recursos que nos facilitaran resolver las situaciones antes mencionadas.

La comunicación en el área de enfermería tiene un valor terapéutico, es importante que sepamos hablar, comunicarnos, así como también es importante saber escuchar. Es importante saber relacionarnos con el paciente, haciéndole sentir en confianza, de igual manera con sus familiares, ayudándoles a que se sientan tranquilos.

Cada enfermo se adapta a su situación de manera distinta, aunque por ende nos encontraremos estresantes como lo son el miedo, la ansiedad y el dolor ante su enfermedad, dependencia o cualquier otro tipo de situaciones, ya sean físicas o emocionales.

Nosotros como enfermeros, como cuidadores de la salud, debemos ser un punto de apoyo al paciente y a los familiares, ayudarlos a sobrellevar su enfermedad y a la familia, darle ánimo y confianza para que ellos puedan transmitírselo a su familiar, ya que ellos también necesitan apoyo ya que se ven afectados emocionalmente. Es importante la comunicación con los familiares por que estaremos interactuando constantemente con ellos, haciéndoles saber cómo va el avance o mejoría en la enfermedad de su familiar.

Los profesionales de enfermería en su trato con la enfermedad y muerte, no contribuye a la insensibilización de las personas aunque en ocasiones se disfracen como protección, creando así su mecanismo de defensa, actuando como si estas situaciones no les afectaran en nada. Para los profesionales de enfermería, la comunicación y la relación con los pacientes y familiares es uno de los elementos más fundamentales para poder desarrollar su profesión.

El profesional de enfermería debe tener una serie de conocimientos sobre las técnicas y habilidades comunicativas para poder aprender e interiorizar en ellos. A veces el enfermero se crea una primera impresión ya sea positiva o negativa del paciente que le toca atender, aunque ni siquiera lo conozca y actúa con el de acuerdo a la impresión que él tiene.

Nos formamos una imagen relativamente coherente de una persona, al unir diversos elementos informativos que hemos ido recogiendo desde los primeros momentos que hemos interactuado con el paciente, pueden ser; la vestimenta que trae, su forma de expresarse, forma de moverse y hablar. También tienen un efecto importante aquellos atributos que más destacan sobre los demás, muchas veces no es tan importante lo que dice una persona si no la forma en que lo dice. La percepción social es un proceso que nos permite conocer a las personas, de acuerdo a sus características, cualidades y estados internos.

El mundo a nuestro alrededor es muy completo y frecuentemente imprevisible. Una necesidad básica de nosotros los humanos es entender lo que ocurre a nuestro alrededor y el por qué ocurre. Nos pasamos la vida tratando de explicarnos el porqué de cada situación.

LA COMUNICACIÓN EN ENFERMERÍA: EL MEDIO HACIA LA SATISFACCIÓN PROFESIONAL

Sabemos que la comunicación es fundamental para todo tipo de personas, y muy en especial para los profesionales de enfermería. La comunicación es un elemento humano, análogo al aprendizaje, aplicado a diversos procesos dinámicos en el interior del ser hombre.

Las relaciones interpersonales comienzan casi siempre con un aspecto superficial y se hace cada vez más complejo en la medida en la que los individuos se ayudan mutuamente a satisfacer sus necesidades y ascienden a las expectativas sobre la posibilidad de la relación en función de que comparten más tiempo juntos.

Una relación interpersonal satisfactoria depende de si nosotros y nuestros pacientes estamos psicológicamente cómodos con el grado de ayudarnos a satisfacer nuestras necesidades y con el nivel de interacción que presenta nuestra relación. Podemos tener una relación buena y gratificante si lo hacemos de la mejor manera posible.

La comunicación es interpersonal cuando las conductas comunicativas están orientadas a la satisfacción de necesidades que no se pueden llenar sin beneficio para otros seres humanos, son necesidades personales e interpersonales, estas contribuyen a mantener una relación interpersonal gratificante y están dirigidas a facilitar el crecimiento de la relación. Para lograr este tipo de comunicación interpersonal no es suficiente conocer lo que es, hay que meditar sobre el proceso para hacerla “efectiva”, porque de educar y lograr la individualización.

La comunicación interpersonal se hace más penetrante en proporción y ascenso, en la medida que pasa por las fases de conocimiento, amistad e intimidad. Para que una relación interpersonal sea satisfactoria depende de si nosotros y nuestros interlocutores estamos psicológicamente cómodos con el grado en el que nos ayudamos a satisfacer nuestras necesidades y con el nivel de interacción que significa nuestra relación. Los primeros encuentros interpersonales frecuentemente están influidos por predicciones basadas en variables no verbales.

A menudo suelen basarse en experiencias anteriores, y los primeros comentarios durante el encuentro se conducen a identificar puntos en común entre los dos interlocutores. Otra de las fuentes informativas para buscar a los demás es la apariencia física, clave que está contenida en el entorno, lo mismo que el lenguaje corporal y la mirada: estos ayudan a decidir sobre las formas que son más apropiadas para la comunicación. Son aspectos que todo profesional de enfermería debe tener en cuenta para que pueda relacionarse de la mejor manera posible con su paciente.

Es necesario y preciso para los profesionales de enfermería que se pretenda la auto creación personal en relación a las cosas y los humanos. Es imprescindible por tanto, el talento escuchador.

El ser buen escuchador es uno de los rasgos más íntimamente convivencia les. No hay, sin él, ni verdad propia ni ajena encontrada. Es el verdadero “tipo” responsable que en la sociedad humana destaca, inspirando confianza y consolación. El saber escuchar es una pauta muy importante dentro del ámbito profesional. Los pacientes hospitalizados quieren que se les entienda, que se les tome en cuenta, que se les escuche y apoye.

Son objetivos básicos para cada ser humano; fundamental en las relaciones personales y comunicativas. Para efectuar una buena relación con nuestros pacientes, es necesario que sepamos escuchar e interesarnos en como ellos se sienten, darles ánimo, apoyarlos, saber que problemas presenta, así como sus necesidades.

Escuchar es un proceso en doble dirección y el profesional debe reflexionar sus modelos de escucha y comunicación en su área de trabajo. Escuchar a nuestros pacientes implica prestar atención, permanecer aquí y ahora en lugar de otro momento o de un lugar diferente. Las acciones presentes convencen a los pacientes de nuestra autentica intención: creen antes en lo que le mostramos que en lo que les decimos, y reconocen fácilmente cuando no los escuchamos.

Es importante para el profesional enviar signos no verbales positivos a su paciente, tales como, estar atento, sentarse erguido, mantenernos en constante contacto visual y que nuestros rostros revelamos el interés como expresión verbal, el tono de voz cálida y suave, la aceptación y entendimiento. Escuchar sin juzgar es una actitud comprensiva, aunque no implica estar de acuerdo con algunos de los pacientes.

Muchas veces sucede que los profesionales pueden llegar a bloquear la comunicación por falta de habilidades comunicativas, dando lugar a diversas situaciones: crear una disponibilidad en la respuesta del paciente, ser inefectivos para ayudar a solucionar problemas emocionales y ayudarles a sentirse mejor. El paciente necesita de mucha comprensión para facilitar la mejora en su salud física y emocional.

Existen esquemas cognitivos, los cuales influyen en la percepción de las demás personas, ejercen efectos en tres procesos básicos de la percepción social: la atención, codificación y la recuperación de información en la memoria.

La codificación hace referencia a los procesos a través de los cuales la información, una vez guardada, se almacena dentro de nuestra memoria. La información relativa a los esquemas es relativa a estos esquemas y es más fácil de recordar, que la información que no forma parte de ellos. Existen tres factores que pueden influir en la percepción social, los cuales están asociados: al perceptor, a la persona percibida y al contenido de la percepción.

La primera se forma de la manera en que un individuo puede ver a otro en parte, por los objetivos y metas que tiene el mismo. La segunda es de acuerdo al manejo de la impresión que se tiene del paciente, y la tercera es sobre el primer efecto que se causa al ver por primera vez a una persona o a nuestro paciente, es más que nada la percepción que se tiene de el, y de la información que obtenemos al irnos relacionando con ellos.

Hay que tener en cuenta que la enfermera no sólo tiene una historia personal, sino que también pertenece a un sistema cultural en el que ha sido socializada. Los principales elementos de los factores personales son: la orientación teórica, que se refiere al enfoque particular que tiene el observador, el uso del lenguaje, las variables socioculturales, como la edad, género y étnica y las variables individuales, que son las características de la personalidad manifestadas a través de la conducta y la apariencia.

LOS ESTILOS DE COMUNICACIÓN

Cuando comunicamos lo hacemos sobre la base del manejo de los diferentes elementos componentes de la comunicación: verbal, no verbal y para verbal. El uso que cada uno de nosotros realice de los distintos tipos de componentes, estará determinado por el estilo de comunicación que exhibamos. Desde el punto de vista genérico podemos hablar de tres estilos de comunicación, los denominados agresivo, pasivo y asertivo. Al hablar de personas pasivas, agresivas o asertivas, conviene tener claro que nadie de ajusta en todo momento y en toda conversación a uno de estos tres estilos. Más se trata de actitudes que adoptamos de forma más o menos habitual y que dependen, además de características personales, de las situaciones o las personas con quienes nos relacionamos. Es decir, algunas personas son asertivas (o pasivas, o agresivas) en unas situaciones pero no en otras. Por tanto, sería más exacto hablar de estas actitudes como algo que podemos poseer en mayor o menor grado, o con mayor o menor frecuencia.

Estilo de comunicación pasivo o inhibido

La principal característica del estilo de comunicación inhibido es que la persona se preocupa por satisfacer a los demás. Por este motivo, una de sus características es que son personas que no defienden sus propios derechos si para ello tiene que dejar de lado los de los demás. Aparentemente respetan a los demás, pero en realidad no se respetan a sí mismos y suelen anteponer los deseos y las opiniones de los otros a los suyos propios. Su creencia básica supone que todo lo que los demás quieren, Piensan u opinan es importante, al contrario de lo que ellos piensan o desean, y les atemoriza la posibilidad de ofender a los demás y ser rechazados. Este estilo de comunicación genera sentimientos de desamparo, depresión y tensión a la hora de mantener relaciones sociales, y sensación de bajo control sobre las situaciones y sobre sus propias reacciones a la hora de enfrentarlas. Como consecuencia de este comportamiento se favorece la baja autoestima, y se desarrolla una forma de relaciones interpersonales que no gusta ni a ellos mismos ni a los demás, se aíslan y pierden oportunidades en todos los terrenos.

Estilo de comunicación agresivo

La agresividad es otra forma de conducta no-asertiva, pero de carácter opuesto a la inhibición. Consiste en no respetar los derechos, sentimientos e intereses de los demás y, en su forma más extrema, incluye conductas como ofenderlo, provocarlos o atacarlos. La persona con un estilo de comunicación agresivo se caracteriza porque sólo se preocupa por defender a cualquier precio sus derechos, y además lo hace faltando al respeto a los otros. Este estilo de comunicación conlleva agresión y sentimientos de desprecio y dominio hacia los demás.

Estilo de comunicación asertivo

La persona con este estilo de comunicación es capaz de expresar sus sentimientos, ideas y opiniones, defendiendo sus derechos y respetando los de los demás. Cuando hace esto, facilita que los otros se expresen libremente y lo hace utilizando de la forma más adecuada posible los componentes conductuales de la comunicación. El objetivo fundamental de la persona asertiva no es conseguir lo que desea a cualquier precio, sino ser capaz de expresarse de forma adecuada y sin agredir, de manera que al interactuar con una persona asertiva, en muchas ocasiones, la conversación se convierte en una negociación.

TÉCNICAS Y HABILIDADES ASERTIVAS

Como ya se ha explicado en el capítulo anterior, la asertividad es la expresión de los derechos personales, la capacidad de expresar a nuestro interlocutor lo que pensamos de algo que ha hecho o dicho, según nuestra escala de valores, pero teniendo en cuenta que esa crítica está basada en el respeto y en una actitud responsable y consecuente por nuestra parte. Por tanto se trata de manifestar nuestros derechos y responsabilidad, siempre y cuando valoremos adecuadamente las circunstancias en las que se produce dicha conducta y no lleguemos a dañar los derechos y la dignidad del receptor. La asertividad también nos permite defendernos ante las críticas o las peticiones excesivas de los demás. Formas de conducta asertiva son, por ejemplo, aceptar los cumplidos que nos hacen sin expresar una falsa modestia y sin cohibirnos, elogiar a nuestros compañeros, familiares o amigos halagando lo que nos gusta de ellos, decir que «no», rechazando la peticiones de los demás, aceptar una crítica si pensamos que tiene razón o hacerle frente si no es así, mostrar opiniones discrepantes con los demás sin sentirnos mal por ello, etc.

Habilidades asertivas

Por habilidades asertivas entendemos aquellas conductas específicas encaminadas a mantener un estilo de comunicación predominantemente asertivo en la interacción con los demás y orientada hacia un intercambio satisfactorio para ambas partes. Entre ellas, nos vamos a referir a la habilidad para emitir libre información, hacer autor revelaciones, para empatizar, formular una crítica, solicitar cambios, expresar opiniones o criterios, expresar conformidad o desacuerdo, resumir, hacer preguntas, emitir «mensajes yo» y elogiar.

Técnicas asertivas

Bajo el nombre de técnicas asertivas nos referimos a una serie de opciones de comportamiento que se emplean a la hora de hacer valer nuestros derechos y defendernos de cualquier posible «ataque » que por parte de los demás se pueda producir para tratar de imponer su criterio y voluntad delas relaciones personales. Por tanto, se trata de opciones de comportamiento que habrá que poner en práctica ante las posibles reacciones de las personas con las que nos relacionamos durante la defensa de nuestros derechos asertivos.

ERRORES Y BARRERAS EN LA COMUNICACIÓN DE ENFERMERÍA

En cualquier situación que se produzca, independientemente de que tenga relación con aspectos personales o profesionales, ya hemos visto cómo se pueden considerar una serie de dificultades relacionadas con el propio proceso de comunicación a través de cada una de los distintos momentos que forman parte del mismo, que complicará el que se trasmitan los mensajes que se quieren trasmitir y, en definitiva, que el emisor consiga sus objetivos. Además de éstas posibles dificultades, cualquier persona que tome la iniciativa de comunicar se debe enfrentar a la posibilidad de cometer dos tipos de errores, relacionados con los dos tipos de elementos que ponemos en juego cuando lo hacemos y que serían, por un lado, los referidos al contenido propiamente dicho de la comunicación y, por otro, a nuestra habilidad personal para trasmitir dichos contenidos.

Errores debidos al profesional de enfermería en el papel de emisor

Las barreras debidas al profesional de enfermería como emisor se refieren a aquéllas que tienen que ver con la persona que en un momento ejerce ese rol de emisor, tanto si éste va a mantenerse durante gran parte del proceso de comunicación, como sería el caso de una entrevista o aplicación de una técnica, o bien sólo durante breves instantes para, después, pasar a convertirse en receptor, y así sucesivamente, como ocurre durante una conversación. Este tipo de barreras las podemos agrupar en dos grandes bloques, que serían los siguientes: a) Relacionadas con el código a utilizar en el proceso de comunicación por parte del profesional de enfermería; b) Relacionadas con la habilidad para comunicar del profesional de enfermería. Entre las primeras citaremos, por un lado, la falta de un código común con el receptor, ya sea por desconocimiento, ya sea por mal uso. Al margen de las posibles causas, la utilización de un código que 76 realmente resulte compartido es imprescindible para que exista la posibilidad de comunicación. La importancia de este código común es tal, que su ausencia supone la incapacidad de comunicación. En el terreno sanitario, como en cualquier otro ámbito de aplicación profesional cada vez es mayor el uso de términos técnicos, siglas, etc., en definitiva la utilización de una jerga o lenguaje profesional. Aunque para el profesional sean conocidas y habituales, no es así en el caso de los ciudadanos, sean éstos pacientes o familiares. Además es importante tener en cuenta las dificultades que existen por parte de los pacientes para preguntar cuando no entienden algo, con lo que es frecuente encontrar numerosos errores y falsas expectativas por problemas relacionados con el código. También hay que tener en cuenta que pese al desconocimiento de la jerga o lenguaje técnico, todo el mundo tiene un relativo conocimiento de términos técnicos sanitarios, aunque no necesariamente de su correcto significado.

Errores debidos al profesional de enfermería en el papel de receptor

Al igual que decíamos al hablar de las barreras del profesional de enfermería cuando hacía el papel de emisor, las barreras relacionadas con el receptor se refieren a aquéllas que tienen que ver con el profesional que en un momento dado hace el papel de receptor, al margen de si este papel es continuo o se intercambia con el de emisor, que es lo más habitual en una interacción profesional. También en este caso hablamos de dos tipos distintos de posibles problemas. El primero, al igual que al referirnos al emisor, las relacionadas con la habilidad personal y el segundo la falta de feedback o retroalimentación en la comunicación.

Errores debidos al entorno sanitario

Las barreras debidas al entorno se centran en aquellas causas físicas que pueden influir negativamente en el proceso de comunicación y las clasificaremos en tres puntos: a) medio ambiente; b) características físicas del espacio; y c) causas debidas a la organización de la actividad.

LA IMPORTANCIA DE LA COMUNICACIÓN EN ENFERMERÍA

Peplau define enfermería como la profesión basada en la relación entre el profesional y su paciente. Una de las características principales de enfermería es el concepto del cuidado a través del cual damos significado a la profesión. Entre las necesidades en los cuidados encontramos la necesidad de establecer una correcta relación terapéutica. La ciencia enfermera es una ciencia guiada por la práctica y por las nuevas necesidades de cuidados, siendo una de estas la de establecer un mayor cuidado del paciente basado en una relación terapéutica.

La profesión de enfermería debe estar centrada en la relación terapéutica, basada en el conocimiento y entrenamiento de las habilidades para conseguir el bienestar de cada uno de sus pacientes.

Establecer una relación efectiva contribuye a una disminución del tiempo de recuperación. El aumento de la calidad en la comunicación enfermera disminuye la ansiedad, mejora sus habilidades de cuidadoras y se consigue una mayor adherencia al tratamiento. Los pacientes se sienten insatisfechos con una escasa y empobrecida comunicación que con otros aspectos de las curas durante la estancia hospitalaria.

En la actualidad muchas personas presentan enfermedades psicosociales u de otro tipo de tratamientos a partir de una relación terapéutica, lo cual disminuiría el abuso de antidepresivos u otro tipo de tratamientos. La sanidad debe orientarse no hacia la enfermedad, sino hacia el enfermo. Lo importante es que en la asistencia sanitaria haya pacientes, no enfermedades ni número de camas.

La necesidad de ayuda varía según el caso, por lo que los equipos asistenciales realizarán una adecuada evaluación de cada paciente, y de su situación socio-familiar. Las particularidades personales tanto de cada enfermo como de los profesionales que intervienen, influyen en la propia vivencia de la enfermedad.

No obstante, uno de los problemas fundamentales de los actuales sistemas sanitarios es la enorme insatisfacción que existe en los enfermos en las relaciones personales y en los procesos de comunicación con los problemas sanitarios. Uno de los problemas más frecuentes, o quejas frecuentes presentadas por los pacientes es que ellos sientan que no les prestan la atención adecuada a sus problemas y el corto tiempo que disponen para explicarles sobre su situación.

La comunicación para la salud busca la modificación del comportamiento humano y los factores ambientales relacionados con esos comportamientos que promueven la salud. Una buena comunicación con los pacientes trae consigo consecuencias positivas tanto para el propio paciente como para el profesional de enfermería. La satisfacción del paciente, su confianza absoluta en los planes diagnósticos y terapéuticos facilitan la toma de decisiones, mejoran los resultados del tratamiento y reducen riesgos de una mala práctica profesional.

Se considera que la comunicación entre paciente y enfermera es indispensable para mejorar la práctica profesional. Por esta razón es importante que el paciente se sienta escuchado y se escuche a sí mismo con la ayuda de la enfermera (o). En la comunicación terapéutica el paciente es el protagonista, el que habla, y el profesional el que escucha y lo acompaña en el proceso de su enfermedad.

Dependiendo de la actitud que el profesional tenga hacia el paciente, se realizan diferentes estilos de relación de ayuda y así mismo se obtienen resultados totalmente diferentes.

Cada gesto, cada mirada, cada palabra comunica algo y si lo sabemos utilizar dela manera correcta podremos demostrar empatía e interés por el paciente. Esto también es importante para ver la reacción del paciente y saber mediante sus gestos y miradas que es lo que piensa y cómo es que se encuentra.

La relación es vivificante cuando el profesional de enfermería conoce sus posibilidades y cuando es capaz de poner en movimiento el potencial y los recursos que se tienen sobre el paciente o comunidad para hacer frente a su situación. La base fundamental de las relaciones terapéuticas son el trabajo en equipo, o sea entre paciente y enfermera y la identificación entre cada uno de ellos.

Es de suma importancia ayudar a la persona desde una concepción holística, la cual requiere del establecimiento de una relación terapéutica enfermera-paciente, donde el enriquecimiento será mutuo.

Los profesionales de enfermería deben proponerse tener un conocimiento profundo sobre la persona con la que se van a relacionar, claramente habiendo adquirido las habilidades y técnicas necesarias para poder desarrollar una eficaz relación de ayudad. La comunicación verbal es muy importante ya que permite aclarar ideas que el paciente intenta transmitirnos, más sin embargo la expresión y lenguaje corporal son igual de importantes.

La enfermera es el centro de referencia de la relación terapéutica, y es la primera persona a la que el paciente se dirige desde el primer momento en que ingresa al hospital.

Es importante adquirir todas las habilidades antes mencionadas y poner en práctica estos conocimientos, dejando atrás el modelo paternalista y poder dirigirse hacia relaciones terapéuticas basadas en diálogos abiertos, interacciones y la escucha activa. Si los estudiantes de enfermería están entrenados en estas habilidades, consiguen estar mejor preparados, y proporcionan una atención integral.

Si no se toman las medidas necesarias, puede correr el riesgo de entrar en errores por falta de conocimiento, puede ocurrir una des-profesionalización que causa muchos estragos.

Un profesional debe ser capaz de ayudarle al paciente a conocer sus posibilidades y limitaciones, sin proyectar sus preocupaciones en él, sino para ayudar a tomar conciencia de las armas que se tienen para afrontar la situación. Podemos decir con certeza que la enfermería es un arte y una ciencia. Si enfermería no tiene las habilidades necesarias no podrá realizar una correcta alianza terapéutica con los pacientes. Es necesario e importante mantener y desarrollar estas habilidades en todos los profesionales de enfermería.

COMUNICACIÓN NO VERBAL

Escuchar a un paciente es importante para la comprensión del mismo, pero los pacientes también se comunican en forma no verbal. Entender que la comunicación no verbal es especialmente importante para las enfermeras (os) que atienden a pacientes con limitadas habilidades lingüísticas.

La comunicación no verbal o lenguaje corporal incluye el aspecto físico, la distancia física entre la enfermera y su paciente, el tono de voz en que le habla y sus expresiones faciales. La descripción de mensajes no verbales son valiosas prestaciones de cuidados porque el lenguaje corporal es un indicador más fiable de la condición de un paciente que sus respuestas verbales. Utiliza también habilidades comunicativas no verbales mediante la observación de la actitud del paciente al vestir, la forma de hablar y las reacciones al haber sido afectado por este proceso.

Los gestos, miradas, sonrisas, frunces de las cejas son expresiones faciales que deben ser interpretadas al contacto con el paciente. La capacidad para interpretar la expresión corporal nos conduce a una mejor comprensión de la condición actual y el progreso del paciente en su enfermedad.

El paciente también puede comunicarse mediante el silencio, los movimientos de los ojos, la postura y señales vocales, las cuales se refieren a las pausas, volumen y tono de voz en el que se habla, lo que puede llegar a indicar un rango o emociones de la ira al nerviosismo. La enfermera debe interpretar el comportamiento, tales como la inquietud, el apretar los puños, evitar contacto visual o físico y responde al mensaje no verbal. Los mensajes verbales y los no a verbales deben coincidir con el paciente tanto como con el cuidador o enfermera.

La postura y el lenguaje corporal que debe tener la enfermera hacia el paciente debe ser de simpatía, amabilidad, sonreír, inclinarse hacia delante, mirar al paciente a los ojos y tocar los elementos, esto nos ayudara a mejorar la relación con nuestro paciente. Nuestro lenguaje corporal comunica mensajes a nuestros pacientes, y este debe ser respetuoso y considerado en la manera de hablar y moverse. Debemos utilizar nuestro lenguaje corporal para comunicarnos de manera efectiva con el paciente y con los familiares de este.  

CONCLUSIÓN

Es necesario establecer una relación terapéutica entre enfermera y paciente, en la que el enriquecimiento sea mutuo. Nosotros como futuros profesionistas de enfermería debemos de proponernos tener un conocimiento profundo de la persona con la que se va establecer la relación, claramente habiendo adquirido las habilidades y técnicas necesarias para desarrollar una relación de ayuda eficaz.

La comunicación verbal es muy importante porque permite dejar ideas claras sobre lo que el paciente intenta transmitirnos, más sin embargo la traducción del lenguaje y la expresión no verbal son igual de importantes. El profesional debe estar capacitado para poder traducir lo que el paciente quiere decir, tan solo con la expresión corporal en toda su complejidad.

El profesional de enfermería debe contar con una serie de requisitos para poder contar con una relación terapéutica correcta, estos requisitos son: autoconocimiento, empatía, respeto, observación, escucha activa y conciencia de las propias habilidades a emplear.

La relación de ayuda va mucho más allá de ser una respuesta cotidiana, más bien intenta brindar apoyo, que puede ir desde una palabra alentadora en un momento difícil, un apretón de manos, o simplemente una palmada en la espalda convierten esta relación en una dimensión del cuidado.

La comunicación es un proceso de dar y recibir, es un mecanismo que nos permite establecer relaciones, mantenerlas y mejorarlas, por medio del contacto con los demás, es uno de los comportamientos humanos de más importancia.

La percepción holística del proceso comunicativo es considerado uno de los aspectos fundamentales en las relaciones terapéuticas enfermera-paciente. Es necesario que nosotros como futuros profesionales empecemos a desarrollar y a aplicar las habilidades sociales, nuestra formación debe ir enfocada no solo en conocimientos fisiológicos sino en conocimientos humanísticos, sociales, metodológicos, científicos, filosóficos, éticos y estos deben darse con un solo propósito: nuestros esfuerzos deben ir dirigidos a la consecución que conocemos como relación de ayuda.

El profesional de enfermería debe afrontar las situaciones diversas a las que se enfrentan diariamente en su área de trabajo, adaptarnos a los medios con los que contamos, con el fin de recuperar y mantener la salud de la persona a la que brindamos el cuidado.

BIBLIOGRAFÍA

http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1695-61412009000300021&script=sci_arttext

http://www.aniorte-nic.net/trabaj_coment_libr_relac.htm

http://www.aecs.es/2_1_7.pdf

http://www.tendenciaspedagogicas.com/Articulos/1996_02_01.pdf

http://www.uclm.es/AB/enfermeria/revista/numero%204/terminales4.htm

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