El Cambio Climatico

CAMBIO CLIMÁTICO

Actualmente, nuestro planeta es eco de una serie de problemáticas ambientales que ponen en tela de juicio la permanencia de las distintas formas de vida que en el habitan, puesto que las variaciones atmosféricas que los teóricos y especialistas estipulaban que tardarían en suceder en cientos y hasta miles de años, están ocurriendo en periodos relativamente cortos. Por ello se comienza a mencionar la ocurrencia de un cambio climático, tomando en consideración en primer lugar las ideas de Cárdenas, A., Carpio, R. y Escamilla, F. (2000) quienes definen al clima brevemente como un estado permanente de la atmosfera durante largos periodos de tiempo en un lugar y que está determinado por un conjunto de factores y elementos geográficos tales como la altitud, latitud, el relieve y la cercanía o lejanía al mar (p. 91).

En segundo lugar, se toma en cuenta lo que engloba el término de Cambio Climático, el cual fue elaborado por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático para:

“…referirse al cambio por causas humanas… un cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmosfera mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima observada durante periodos comparables” (Wikipedia, 2012).

Es decir, la responsabilidad recae principalmente en la sociedad (factor antrópico) quien en su práctica consumista e incontrolada por satisfacer sus necesidades no mide sus acciones e incide en la aceleración de los procesos naturales, en tal sentido, la Unión Europea (2006. P. 4) explica que por la manera en que se vive hoy día, sobre todo en países desarrollados donde se consume gran cantidad de energía en los hogares, los automóviles, aviones, fabricas de artículos y en la agricultura; ocasiona que la atmosfera actué como una cubierta protectora o techo de cristal que se conoce como efecto invernadero, en el cual los gases de efecto de invernadero se encargan de retener el calor que llega a la tierra por la energía irradiada del sol.

Sin embargo, con el pasar de los años la concentración en la atmosfera de este tipo de gases como el Dióxido de Carbono (CO2), el Metano (CH4) y el Óxido Nitroso (N2O) han aumentado considerablemente, enfáticamente desde el inicio de la Revolución Industrial (GreenFacts, 2007. P. 2) incidiendo de forma negativa al concentrarse mayor cantidad de calor y por ende aumente la temperaturas atmosféricas y oceánicas, que genera un recalentamiento o calentamiento global. Tomando en cuenta, que precisamente este fenómeno sobresale junto al derretimiento de la nieve y el hielo de los glaciares, y la elevación del nivel del mar entre los principales cambios climáticos. Caso contrario por ejemplo, en el caso de Venezuela es la incidencia de los Fenómenos de El Niño (asociado al déficit de lluvias e incremento de la temperatura) y La Niña (vinculado a excesos de lluvia y disminución de la temperatura), debido a que tal como lo sostiene el Instituto Nacional de meteorología e Hidrología – INAMEH (2012) “El evento El Niño/Niña forma parte de variabilidad natural del clima de nuestro planeta y no debe ser asociado al denominado cambio climático”.

En este mismo orden de ideas, Las opiniones han sido contrastantes ya que algunos climatólogos se atreven a aseverar que “esta tendencia del calentamiento se acelere y aumente la temperatura media del planeta entre 1,4°c y 5,8°c de aquí al año 2100” (Unión Europea, 2006, p. 7) de hecho, aunque para algunos esta diferencia de grados puede que no sea exorbitante vale recordar que dichas variaciones ocurrían en eras pasadas cada miles años, razón por la que se genera una alerta sobre la concientización que deben tener las naciones para que las sociedades que se constituyen en ellas tomen las medidas pertinentes en pro de disminuir en gran proporción las emisiones de gases de efecto invernadero provenientes de la amalgama de actividades de producción y consumo de energético.

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