PROCESOS DE AJUSTE Y ADAPTACIÓN DEL ORGANISMO A LAS CONDICIONES MEDIO AMBIENTALES

PROCESOS DE AJUSTE Y ADAPTACIÓN DEL ORGANISMO A LAS CONDICIONES MEDIO AMBIENTALES

Como seres vivos no solamente estamos expuestos a los cambios que surgen en el exterior, sino también a los cambios internos, los que surgen en nuestro organismo, que bien, podrían ser desencadenados por factores externos a éste. Se define a la entropía como una medida del grado de desorden de un sistema, en cuanto mayor es la entropía, mayor es el desorden. Cualquier cambio que tenga lugar en un sistema cerrado (en este caso nuestro cuerpo) aumentará la entropía, aumentará el desorden. Dado que vivimos en un mundo que se encuentra en constante cambio, constante desorden, nuestro cuerpo siempre estará expuesto a experimentar la entropía.

La homeostasis tiene el papel de mantener el equilibrio del medio interno de nuestro cuerpo, separadamente de las condiciones exteriores, mediante diversos procesos biológicos. A pesar de las condiciones en el exterior, la homeostasis buscará mantener la regulación interna como mecanismo de protección. Dos de las principales condiciones que los seres vivos tenemos que regular internamente son la temperatura corporal y la eliminación de sustancias tóxicas. La homeostasis entra en juego mediante el proceso de retroalimentación, pero tan complejo y fascinante es este sistema, que nos encontramos con dos tipos de retroalimentación, la negativa y la positiva.

La retroalimentación negativa es un proceso de estabilización, se le llama negativa porque reacciona de manera contraria al estimulo inicial, ayudando así a mantener regulado el sistema sobre el que se trabaja. La retroalimentación positiva, por otro lado, genera una respuesta igual al estimulo inicial, por lo cual éste seguirá en aumento, de manera que en muchos casos podría resultar dañina para la salud; de suceder lo anterior, la retroalimentación negativa podría entrar a conseguir la regulación del problema que la retroalimentación positiva provocó.

La retroalimentación que más utiliza nuestro cuerpo es la negativa, debido a que es un proceso estabilizador, que busca el equilibrio, contrario a la positiva que podría desencadenar efectos adversos.

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