Bodas De Sangre
Enviado por shersar • 23 de Abril de 2013 • 5.596 Palabras (23 Páginas) • 425 Visitas
BODAS DE SANGRE
1933
Poema trágico en tres actos y siete cuadros
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Personajes
Madre Criada Leonardo Mozos
Novia Vecina Novio Leñadores;
Suegra Muchachas Padre de la novia Mozos
Mujer de Leonardo Luna Muerte
Principio
Siguiente
Acto primero
CUADRO PRIMERO
Habitación pintada de amarillo.
Novio:(Entrando) Madre.
Madre: ¿Que?
Novio:Me voy.
Madre: ¿Adónde?
Novio:A la viña. (Va a salir)
Madre: Espera.
Novio:¿Quieres algo?
Madre: Hijo, el almuerzo.
Novio:Déjalo. Comeré uvas. Dame la navaja.
Madre: ¿Para qué?
Novio:(Riendo)Para cortarlas.
Madre: (Entre dientes y buscándola)La navaja, la navaja... Malditas sean todas y el bribón que las inventó.
Novio:Vamos a otro asunto.
Madre: Y las escopetas, y las pistolas, y el cuchillo más pequeño, y hasta las azadas y los bieldos de la era.
Novio:Bueno.
Madre: Todo lo que puede cortar el cuerpo de un hombre. Un hombre hermoso, con su flor en la boca, que sale a las viñas o va a sus olivos propios, porque son de él, heredados...
Novio:(Bajando la cabeza)Calle usted.
Madre: ... y ese hombre no vuelve. O si vuelve es para ponerle una palma encima o un plato de sal gorda para que no se hinche. No sé cómo te atreves a llevar una navaja en tu cuerpo, ni cómo yo dejo a la serpiente dentro del arcón.
Novio:¿Está bueno ya?
Madre: Cien años que yo viviera no hablaría de otra cosa. Primero, tu padre, que me olía a clavel y lo disfruté tres años escasos. Luego, tu hermano. ¿Y es justo y puede ser que una cosa pequeña como una pistola o una navaja pueda acabar con un hombre, que es un toro? No callaría nunca. Pasan los meses y la desesperación me pica en los ojos y hasta en las puntas del pelo.
Novio:(Fuerte)¿Vamos a acabar?
Madre: No. No vamos a acabar. ¿Me puede alguien traer a tu padre y a tu hermano? Y luego, el presidio. ¿Qué es el presidio? ¡Allí comen, allí fuman, allí tocan los instrumentos! Mis muertos llenos de hierba, sin hablar, hechos polvo; dos hombres que eran dos geranios... Los matadores, en presidio, frescos, viendo los montes...
Novio:¿Es que quiere usted que los mate?
Madre: No... Si hablo, es porque... ¿Cómo no voy a hablar viéndote salir por esa puerta? Es que no me gusta que lleves navaja. Es que.... que no quisiera que salieras al campo.
Novio:(Riendo)¡Vamos!
Madre: Que me gustaría que fueras una mujer. No te irías al arroyo ahora y bordaríamos las dos cenefas y perritos de lana.
Novio:(Coge de un brazo a la madre y ríe)Madre, ¿y si yo la llevara conmigo a las viñas?
Madre: ¿Qué hace en las viñas una vieja? ¿Me ibas a meter debajo de los pámpanos?
Novio:(Levantándola en sus brazos)Vieja, revieja, requetevieja.
Madre: Tu padre sí que me llevaba. Eso es buena casta. Sangre. Tu abuelo dejó a un hijo en cada esquina. Eso me gusta. Los hombres, hombres, el trigo, trigo.
Novio:¿Y yo, madre?
Madre: ¿Tú, qué?
Novio:¿Necesito decírselo otra vez?
Madre: (Seria)¡Ah!
Novio:¿Es que le parece mal?
Madre: No
Novio:¿Entonces...?
Madre: No lo sé yo misma. Así, de pronto, siempre me sorprende. Yo sé que la muchacha es buena. ¿Verdad que sí? Modosa. Trabajadora. Amasa su pan y cose sus faldas, y siento, sin embargo, cuando la nombro, como si me dieran una pedrada en la frente.
Novio:Tonterías.
Madre: Más que tonterías. Es que me quedo sola. Ya no me queda más que tú, y siento que te vayas.
Novio:Pero usted vendrá con nosotros.
Madre: No. Yo no puedo dejar aquí solos a tu padre y a tu hermano. Tengo que ir todas las mañanas, y si me voy es fácil que muera uno de los Felix, uno de la familia de los matadores, y lo entierren al lado. ¡Y eso sí que no! ¡Ca! ¡Eso sí que no! Porque con las uñas los desentierro y yo sola los machaco contra la tapia.
Novio: (Fuerte)Vuelta otra vez.
Madre: Perdóname.(Pausa) ¿Cuánto tiempo llevas en relaciones?
Novio: Tres años. Ya pude comprar la viña.
Madre: Tres años. Ella tuvo un novio, ¿no?
Novio: No sé. Creo que no. Las muchachas tienen que mirar con quien se casan.
Madre: Sí. Yo no miré
...