El Hombre Natural Y El héroe Cristiano

Resumen: En este trabajo vamos a poder apreciar dos arquetipos románticos que se encuentran en la obra “Los miserables”. Estos temas lo vamos a ver en distintos personajes. El hombre natural refiriéndose a Jean Valjean como un hombre natural, presidiario, serio y sin una sonrisa en la cara. Pero va pasando por etapas y se va transformando poco a poco. El héroe cristiano en un principio toma el nombre del obispo de D.

Introducción: A continuación vamos a demostrar que la obra los miserables es una obra romántica, hablando de los arquetipos del romanticismo, que se encuentran en esta. El hombre natural y el héroe cristiano. Las características principales de un héroe cristiano son los clásicos valores que se conservan hasta hoy en día, como por ejemplo, perdonar los errores del prójimo, no matar, ayudar a los que lo necesitan entre otros. Y la característica principal del hombre natural es la fuerza. La descripción de Jean Valjean en su primero momento es la definición del hombre natural. Es así como el presidiario pasa de ser un hombre natural, a un ejemplo de persona, como es el héroe cristiano.

Cuerpo: En un principio Jean Valjean era un hombre natural, con errores. Era un presidiario con muchos delitos a su cargo. Hasta que un día, una persona le cambió la vida por completo. El obispo de D es el responsable de este gran cambio que surge en Jean Valjean. Cuando el presidiario llega a la casa del Obispo de D, queda totalmente descolocado e impresionado de la actitud que el toma hacia su persona. Después del encuentro que tiene con este, la vida de a Jean Valjean cambia drásticamente:

“cuando Jean Valjean salió de casa del obispo estaba, por decirlo así, fuera de todo lo que había sido su pensamiento hasta allí. No podía explicarse lo que pasaba con él. Quería resistir la acción Angélica, las dulces palabras del anciano: “me habéis prometido ser hombre honrado. Yo compro vuestra alma. Yo la libero del espíritu de perversidad, y la consagro a dios”. Estas frases se presentaban a su memoria sin cesar.”(1) (Pág. 64 y 65)

A continuación de esta visita, Jean Valjean va en busca de nuevas oportunidades y en el camino se genera el cambio, que va tomando forma poco a poco. El paso de ser un hombre natural a un héroe cristiano, un arquetipo literario del Romanticismo que se ve muy fuerte en la obra “Los miserables”:

“Su conciencia comparó al obispo con Jean Valjean. El obispo crecía y resplandecía a sus ojos y jean Valjean se empequeñecía y desaparecía (…) después desapareció del todo. Solo quedó el obispo. El obispo, que iluminaba el alma de aquel miserable con un resplandor magnífico.”(2)(Pág. 65)

Ya con el paso del tiempo la transformación de Jean Valjean fue dando frutos y ahora él se propone ser como su ejemplo a seguir, entregar todas las enseñanzas que el obispo le había inculcado. Ahora con el cambio de actitud también hay un cambio de vida radical, llamándose Magdalena y convirtiéndose en el alcalde de M y un ejemplo para su pueblo. En un acto de preocupación por el prójimo se encuentra con la pequeña Cosette y el para ella va a ser un símbolo que va a admirar:

“este era el hombre que acababa de encontrarse con Cosette. Se había dado cuenta que se trataba de una niña pequeña y se acercó y tomó silenciosamente su cubo.”(3)(Pág. 176)

En la siguiente cita podemos apreciar la admiración que Cosette hacia el viajero desconocido; Magdalena; Jean Valjean. El héroe cristiano, arquetipo del romanticismo, es para la gente un ejemplo a seguir y para imitar.

”Cosette volvió a meterse en lo que la Thenardier llamaba a su perra y su mirada, fija en el viajero desconocido, tomó una expresión que no había tenido nunca, mezcla de una ingenua admiración y una tímida confianza”(4)(pág. 183)

Conclusión: Así podemos concluir los dos arquetipos que se encuentran en esta obra y que en los personajes que se encuentran, en el principal hay un cambio que surge desde una persona mundana, banal, que en un principio no tiene malas intenciones pero se ve desterrado a ser una mala persona hasta que el héroe cristiano; el obispo de D; lo inspira a cambiar y a ser una buena persona. Entonces podemos terminar con una enseñanza que a todos nos enseñan que es todo lo bueno que te da la sociedad, uno más tarde tiene que entregarlo a esta y ser un ejemplo a seguir.

Bibliografía:

(1) Hugo, Víctor, “Los Miserables”, Edición número seis, Santiago, Chile, página 64 y 65.

(2) Hugo, Víctor, “Los Miserables”, Edición número seis, Santiago, Chile, página 65.

(3) Hugo, Víctor, “Los Miserables”, Edición número seis, Santiago, Chile, página 176.

(4) Hugo, Víctor, “Los Miserables”, Edición número seis, Santiago, Chile, página 183.

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