ENSAYO CHARLAS DE CAFE CON VICENTE GUERRERO

“CHARLAS DE CAFÉ CON VICENTE GUERRERO”

ENSAYO

La historia comienza a desarrollarse en un ambiente que pintan muy tranquilo, hermoso, en una colina de la playa. Es José Ortiz el Monasterio el que se encontraba ahí, a punto de comenzar una charla con el general Vicente Guerrero.

Debo mencionar antes que Vicente Guerrero no solo dio su vida hasta el final, si no también lucho por aquello que era mejor para los mexicanos, lamentablemente siempre ha ganado la maldad, las ansias de poder y la avaricia. Pero estoy completamentamente segura que si Vicente Guerrero estuviese vivo, se volvería a morir, porque para nuestra desgracia no han cambiado mucho las cosas, todo lo contrario; aumentan cada vez más. Él solo sigue siendo un héroe no reconocido y un defensor de la patria hasta donde pudo, y le permitieron.

Aquí retomo el enriquecedor libro Charlas de Café con Vicente Guerrero, existen algunas de las cosas del libro que me gustaron mucho he hicieron que cierta admiración por Guerrero naciera. Y es que lo que más me sorprende y de cierta forma me alegra saber es que Guerrero en ningún momento agacho la cabeza, al contrario nunca se rindió y lucho en todo momento por un México libre e independiente; a pesar de que las circunstancias casi nunca estaban a su favor, tal vez arriesgándolo todo sin ganar nada. De hecho así fue como termino.

Una de las tantas cosas que admire de Guerrero fue cuando comenzó a narrar su versión de los hechos entre risitas, bromitas y unos cuantos cafecitos con el monasterio.

Guerrero hace mención que Iturbide fue el primero en romper el orden constitucional al disolver el Congreso, después Guadalupe Victoria llego al poder con una revuelta militares, pensando que éramos unos revoltosos, ambiciosos, interesados solo en el poder y sin patriotismo. Si no había dinero para pagar a los empleados, ¿Cómo evitar que conspiraran? ¿Cómo evitar que se revelaran? Además estábamos al tanto de que España pretendía recuperar su antigua colonia, por lo cual el ejército nacional tenía que mantenerse.

Esto definitivamente me encanto, pienso que desde ahí se ve el interés que tenía Guerrero por querer solucionar los problemas en el país y claro mejorarlos. Ahí es cuando Guerrero llega a la presidencia, pero comienzan a salirle algunos enemigos que lo querían fuera del poder, cuando está clarísimo que lo único que él quiso fue hacer las cosas bien y luchar contra algo que ya no quería más, como ya lo he mencionado, el racismo y la discriminación. De hecho en alguno de los textos del libro comenta que él lo vivió en carne propia por ser negro y no de sangre pura por así decirlo.

A ellos no les convenía que todos fueran tratados por igual, que no se mezclaran las clases altas con los mestizos e indios que apoyaban las grandes ideas de Guerrero. No existe mucha diferencia con la actualidad, siguen pasando las mismas situaciones, como por ejemplo las personas con dinero nunca se va a mezclar o simplemente convivir o interactuar con las personas de bajos recursos, existe muchísima discriminación, racismo y demás.

Algo que dice el libro y me llena de felicidad, como para resaltarlo en negritas, es: “De todos los peligros que había enfrentado el general Guerrero, el mayor no fue el combate, si no en los salones del Palacio Nacional y del Congreso.

Su origen humilde era inaceptable para las clases que habían vivido con todo tipo de privilegios durante tres siglos. Su sangre negra era una afrenta para una sociedad acostumbrada a las diferencias de castas, que les parecían tan naturales como la diferencia entre una manzana y un limón”.

Aquí debo hacer más referencia a lo que ya he mencionado antes, a pesar de los insultos, menosprecios, humillaciones y racismo, Guerrero jamás negó su origen, al contrario el siempre lucho por lo que quería y con orgullo portaba la sangre que traía corriendo por sus venas sin que le afectara todo lo que ocurría

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