UTOPIA DE TOMAS MORO

I. UTOPIA DE TOMAS MORO

El significado de Utopia es "no lugar o en ningun lugar" que no existe en la vida real, en general este termino puede definirse como un estado imaginario que reune todas las perfecciones y que hace posible una existencia feliz por que en este mundo de ficcion reina la paz y la justicia.

Pero Utopia se refiere tambien al nombre que el escritor Tomas Moro le dio a su obra donde nos habla de un mundo ideal y perfecto, impisible de ser o de encontrar. Dicha obra consta de dos partes, la primera se trata de un dialogo que se habla principalmente de cuestiones filosoficas, politicas y economicas de Inglaterra y la segunda parte es la narracion de uno de los personajes de la isla. En mencionada obra publicada en 1516 Tomas Muro relata a una isla perdida en medio del oceano donde sus habitantes vivian en un estado perfecto tanto fisico como moral en una sociedad pacifica y feliz donde todos gozaban del disfrute comun de bienes.

Esta isla fue creada artificialmente por sus habitantes, quienes cavaron una gran fosa por orden del rey Utopo, dejando entrar el mar en ella. El resultado fue un cinturón de tierra en forma de media luna, con una bahía en el centro. La comunidad se componia de cincuenta y cuatro ciudades incluyendo una capital, Amaurota (probablemente del griego oscuro) que está en el centro de la isla. Las ciudades están situadas de la misma forma, a distancias semejantes y tienen aproximadamente la misma extensión. Y sobre las leyes laborales se estipulaba que todos aprendian el arte de la agricultura y podian elegir a demas otros oficios, dependiendo los gustos o aptitudes de cada uno y las necesidades del lugar donde habitaban. las jornadas laborales eran de 6 horas y estas eran suficientes para ganar lo necesario para proveerse de las cosas necesarias. Todos los ciudadanos hombres y mujeres trabajaban. De las horas restantes del día, dedican ocho al sueño y las horas libres como deseen, pero son estimulados a realizar actividades que desarrollan la creatividad y la inteligencia, como lectura, música, conversación, juegos matemáticos, etc.

En conclucion: el anhelo de tener un mundo ideal y perfecto es muy antiguo, pero la invención y descripción de este tipo de sociedades ideales y perfectas recibe formalmente el nombre de utopia hasta el siglo XVI. Por lo mismo, podemos afirmar que existen utopías desde siempre y desde entonces se considera utopico todo lo que ademas de ser perfecto, es imposible de encontrar o construir.

• LAS REFORMAS RELIGIOSAS Y SU INLUENCIA

La Reforma del siglo XVI fue un movimiento dentro de la cristiandad occidental para purgar la iglesia de abusos medievales y restablecer las doctrinas y prácticas que, según creían los Reformadores, concordaban con la Biblia y con el modelo de iglesia en el Nuevo Testamento. Esto condujo a un quiebre entre la Iglesia Católica Romana y los reformadores, cuyas creencias y prácticas pasaron a llamarse Protestantismo. No obstante el Papado en Roma empezó a perder su poder y la Iglesia se sumió en una profunda crisis. La riqueza material fue causa de corrupción. Muchos miembros del clero descuidaban sus obligaciones religiosas y disfrutaban del lujo y de los placeres mundanos. Los hombres empezaron a criticar las doctrinas y los ritos de la Iglesia.

La reforma comenzó en Alemania el 31 de octubre de 1517 por un elocuente monje agustino llamado Martin Lutero. Este elocuente monje publicó 95 tesis en que protestaba contra los abusos que se cometían en la venta de las indulgencias. Siguiendo los deseos de su padre, había comenzado a estudiar las leyes. Pero el problema de la salvación eterna de su alma lo sumió en tanta desesperación que decidió hacerse monje. Como resultado de sus meditaciones y de la lectura de las Sagradas Escrituras llegó a la conclusión de que la salvación sólo era decidida por Dios, sin requerir de los sacramentos, de las ceremonias de la Iglesia ni del sacerdote.

Mientras que la Iglesia Católica enseñaba que el hombre se salvaba por la fe y las buenas obras, Lutero empezó a enseñar que las obras eran inútiles ante Dios y que el hombre se salvaba exclusivamente por la fe. De nada servían tampoco las indulgencias.

En el año 1520 el Papa excomulgó a Lutero por hereje fue invitado a retractarse de sus ideas, mas Lutero se negó e insistió en que sólo las Sagradas Escrituras contenían la verdad; mientras que el Papa se podía equivocar. Y así fue condenarlo a las penas que recaían sobre los herejes. Teodosio era hijo de uno de los generales que había servido a Valentiniano I, había acompañado a su padre en diferentes misiones. Obtuvo el título de “magister militum” en virtud de su victoria contra los sármatas (tribu bárbara proveniente de la parte oriental de Escitia, en las cercanías del actual río Don) en Panonia. Al año siguiente, año 379, Graciano lo nombró Augusto.

Teodosio logró pacificar el estado de situación con los godos. Si bien los echó de la rica Tracia, permitió que se establecieran en Mesia como federados del Imperio, esto es, dentro del ejército al que los bárbaros debían prestar servicio y que tanta falta le hacían al nuevo Emperador, preocupado por reconstruir nuevamente el Ejército Romano. Su política religiosa, por otro lado, consistió en afirmar el cristianismo del Concilio de Nicea mediante el edicto de Tesalónica el 24 de noviembre de 380, ratificando formalmente la decisión adoptada en el 313 (Edicto de Milán) por Constantino. A pesar de los intentos precedentes por unificar el imperio, no fue sencillo hacer que los bárbaros, arrianos en su mayoría o paganos, adscribieran al cristianismo. Fue una lucha larga y a menudo, no desprovista de traiciones por parte de las tribus que prometían adoptar la nueva fe, regresando luego a sus credos privados.

Esta situación influyó particularmente en la caída de la parte Occidental, que estaba en plena decadencia para ese entonces, decantando en la división del Imperio en reinos romanos germánicos (año 476). Asimismo, el cesaropapismo (la superposición de atribuciones entre el poder temporal y la Iglesia) iniciado por Constantino se fue acentuando paulatinamente con Teodosio y marcó todo el curso de la Edad Media, incluso el Renacimiento. De hecho, fue Teodosio quien determinó el sacerdocio bajo su propia autoridad y convocó el Primer Congreso Ecuménico de Constantinopla, destinado a neutralizar las disputas con el arrianismo y las formas herejes adoptadas por el paganismo. Tras la muerte de Graciano en Occidente, se desataron guerras civiles en torno a la sucesión de la corona en las que Teodosio intervino con particular interés, instalando a su hijo Honorio como Emperador , aduciendo que

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