Análisis Cinematográfico “Pearl”

Análisis Cinematográfico “Pearl”

Arturo Trejo Lozano

Un homenaje al cine de los años 30, el terror en esta película funciona como un espejo social para poner en evidencia las fobias y obsesiones de una cultura en un momento determinado. Con Pearl, Ti West no solo toca en el corazón de la época, sino que también funciona como una reflexión sobre las consecuencias psicológicas del encierro y el aislamiento prolongados. Es una película bien dirigida, tensa, con una buena dosis de sustos y, sobre todo, cuenta con una actuación fuera de lo común por parte de Mia Goth.

En la película se nota que la historia tiene un sentimiento inexplicable que un actor le tiene a su personaje, el tratamiento y desarrollo de la protagonista lleva una gran profundidad, en la que podemos conocer, a través de su mirada y propia experiencia, la realidad que se vivía en 1918, cuando la gripe española se convertia en una pandemia, haciendo una conexión al año en que se estrenó la película 2022 en donde el planeta se sumergió en una pandemia global.

La psicopatía está presente en esta película, con un tratamiento desconcertante, apoyado en la fotografía con inspiración en el cine antaño que nos sitúa en un mundo de terror, que deja una extraña sensación que no encaja con el contexto y el tono de la película, junto con la historia estos elementos hacen que el publico empatice con la protagonista y genera un conflicto entre lo violento y una vida sin futuro.

Para Perl la vida no le sonrió: su esposo esta en la primera guerra mundial, su padre este enfermo por la gripe española dejándolo cuadraplejico que le impide valerse por si mismo, su madre es una inmigrante creyente, paranoica y una excelente manipuladora, ella se rehúsa a que su hija cometa los mismos errores y se repita la historia, al igual que su propia madre con ella.

Un ciclo de relaciones abusivas y sometimientos que tiene una explosión con la protagonista, es el detonante para que el personaje decida liberarse retorcidamente de un entorno abrumador. Todo este torbellino de emociones de la pérdida de la cordura está envuelta en la paranoia pandémica de la gripe española.

West transforma a Pearl en un cuento de hadas sobre una princesa que quiere ver a todos sufrir el rechazo, la ansiedad y la ira que tiene acumulada. En vez de cantar con animalitos, los descuartiza; su príncipe azul, termina empalado en una colorida granja como si se hubiera retorcido los famosos cuentos de princesas y el sueño perfecto se convirtiera en una pesadilla.

 Lo único que mantiene estable a Pearl es su fantasía de ser reconocida en la industria de cine como bailarina, quiere alcanzar la fama, llegar a Hollywood, que la miren y que pueda llenar el vacío que dejaron todas las personas cercanas a ella.

Algo que quiero señalar es que el vestuario forma imágenes interesantes en la composición, esta perfectamente escogido y nos ayuda a contextualisar este paparticular mundo en donde se desarrolla la historia, y apoyado con el talento de una actriz que es capaz de plasmar una dualidad entre ternura, pero también una locura que de terror, no tengo dudas que si la academia voltearan a ver más las películas estilo Slasher, se podrían llevar una que otra sorpresa en actuaciones como en esta película.

El guion de esta película se esfuerza por entregarnos detalles muy interesantes, como es el caso de ambientar la película cuando la gripe española estaba en Estados Unidos en su máximo punto y observar las consecuencias que trajo esta pandemia. De igual forma los detalles que tiene la película para contarnos el descenso a la locura del personaje de Mia Goth.

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