El liderazgo es un proceso en el que una persona influye en otras para que cumplan una serie de objetivos

¿Qué es el liderazgo?

El liderazgo es un proceso en el que una persona influye en otras para que cumplan una serie de objetivos, y dirige la organización de un modo que la hace más coherente y cohesiva. Los líderes llevan a cabo esta tarea utilizando sus atributos de líderes. Es decir, una persona puede estar al mando en una empresa, pero eso no la convierte necesariamente en líder. No es lo mismo ser un jefe que un líder. El jefe puede lograr que los demás realicen sus tareas por obediencia, dinero, miedo a perder el trabajo, etc. mientras que el líder consigue que sus seguidores lo hagan porque lo desean. El jefe o jefa que consigue que sus trabajadores lo vean como un líder, está logrando que se sientan cómodos en su puesto de trabajo, que encuentren satisfacción en él, que se sientan parte de un equipo (de algo importante) y que confíen en su líder y su capacidad para dirigirlos correctamente.

Cuando una persona trata de decidir si confía en otra como líder, lo que hace es observar su comportamiento; determina si se trata de una persona noble y digna de confianza o de un egoísta que sólo sirve a sí mismo y utiliza su autoridad únicamente para ascender. Por tanto, para ser un buen líder has de ser una persona ética, preocupada por el bienestar de las personas que conforman tu equipo, interesada en hacer un buen trabajo y no sólo en ganar dinero o ascender.

Perfil De Un Líder

Ser un líder es vinculado con muchas características. Algunas personas se consideran a nacer para estar en posiciones de liderazgo.

Para nacer de un líder es una expresión que puede sufrir algún debate. Por supuesto, estar en una posición de liderazgo requiere de un conjunto de habilidades. Pero no es muy claro si estas características son nativas o pueden ser desarrollados a través de la habilidad y experiencia. Estas características se analizan a continuación.

Siete características que hacen que para un buen líder

1. Digno de confianza. Un verdadero líder no puede existir si él o ella no llega a ganar la confianza de los demás. La integridad y la honestidad son los rasgos de carácter que hacen que esa persona notable y, en su defecto, las personas no sienten que deben seguir al líder. Un buen líder prácticas de lo que él o ella predica ganar el derecho a dirigir a otros y tienen la responsabilidad de ellos. Confiabilidad es la fuente de la autoridad real, basado en la confianza de otras personas.

2. Entusiasta. El entusiasmo no se debe olvidar cuando se habla de un gran líder. Un verdadero líder inspira a los que le rodean con su pasión y dedicación. Al mostrarles cómo se hace, por tener la confianza y determinación, el líder hará que el trabajo en equipo para alcanzar el objetivo deseado. Además, un verdadero líder no debe tener miedo a realizar un trabajo duro, que ofrece un buen ejemplo a sus trabajadores.

3. Confianza. Un verdadero líder tiene que exudan confianza en su papel y la posición hacia los demás. El resultado será un equipo de confianza que busca para el líder, siguiendo sus órdenes y la ejecución de las tareas así. Los miembros del equipo estarán muy motivados para hacer un buen trabajo cuando el líder tiene confianza en sus poderes y los suyos, al mismo tiempo.

4. Ordenada. Algunas situaciones pueden requerir otras actitudes del líder. En tiempos de incertidumbre y el estrés, el líder debe demostrar ser ordenado y capaz de trabajar hacia el objetivo final. Esto le dará una sensación de tranquilidad y seguridad al equipo, que espera que la confianza y una actitud positiva por parte de su líder.

5. Calma. Muchos de los retos pueden subir por el camino y el líder debe tratar por igual, inspirando a otros a no ser que las malas influencias superarlos. Cualquier crisis, las emociones deben encontrar la calma líder, compuesta y firme al objetivo principal. El que logra mantener la cabeza fría en momentos de necesidad es un gran líder.

6. Capacidad para pensar analíticamente. Un problema tiene muchas facetas que deben ser tratados. Un buen líder se mantenga el objetivo principal en el enfoque, pero es capaz de analizar el asunto, dividiéndola en partes la intención de ser inspeccionados. Una mente analítica es necesaria cuando hay que avanzar por tratar a cada paso en particular.

7. Ambicioso. Cualquier buen líder no debe conformarse con el segundo lugar. El éxito es una cuestión de quién gane la parte superior. Un verdadero líder siempre tendrá un alto nivel y él o ella va a luchar por la excelencia en todos los aspectos.

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