Dios quiere prosperarte

Dios quiere prosperarte

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LECCIÓN 3

CAMBIEMOS LA MENTIRA POR LA VERDAD

Estamos en un proceso de cambiar nuestra forma de pensar. Debemos de sustituir los

pensamientos erróneos que hemos adquirido en el transcurso de los años por las preciosas verdades

de la palabra de Dios.

Una de las mentiras clásicas de Satanás es la siguiente:

"Dios destinó a unos para ser ricos y a otros para ser pobres, y nada de lo que hagas podrá cambiar tu

situación".

En Costa Rica los campesinos tienen un proverbio que expresa la misma idea, "el que nació para

maceta no pasa del corredor". No importa lo popular que sea tal proverbio, es falso.

Tener esa actitud es lo mismo que estar de acuerdo con los astrólogos y los que escriben

horóscopos. Ellos dicen que las estrellas controlan tu vida. Que el momento y el lugar donde naciste

determinan tu destino.

Dios repudia esa actitud. Es abominación delante de Él. Dios no ha destinado a sus hijos para

que tengan hambre, ni para que carezcan de lo necesario para pagar la renta o pagar el agua, la

electricidad o el gas.

Este tipo de predestinación a la ruina y la necesidad es falso por cuatro razones:

1 Dios no hace acepción de personas. En Hechos 10:34 el apóstol Pedro dice: EN VERDAD

COMPRENDO QUE DIOS NO HACE ACEPCIÓN DE PERSONAS. 16

El estaba citando Deuteronomio 10:17. Vemos que tanto el Antiguo Testamento como el Nuevo

dan testimonio de esta verdad. Lo que Dios ha hecho es establecer las leyes de prosperidad en Su

Palabra. Es nuestra responsabilidad obedecerlas y ser bendecidos o quebrantarlas y tener problemas.

2 Dios quiere que Usted prospere. Considere la siguiente afirmación de San Pablo: PORQUE YA

CONOCÉIS LA GRACIA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, QUE POR AMOR A

VOSOTROS SE HIZO POBRE, SIENDO RICO, PARA QUE VOSOTROS CON SU POBREZA

FUESEIS ENRIQUECIDOS (2 CORINTIOS 8:9)

Todo el contexto de este capítulo demuestra que Pablo se está refiriendo a dinero, a ofrendas

para los santos y a invertir en la obra de Dios; así que no podemos espiritualizar este versículo

diciendo que Cristo se hizo pobre en un sentido espiritual y que las riquezas mencionadas aquí son

también espirituales.

3 Porque la pobreza es una maldición. Deuteronomio 28:15-48 lo establece claramente. Considere

especialmente el versículo 48: CON HAMBRE Y CON SED Y CON DESNUDEZ Y CON FALTA

DE TODAS LAS COSAS.

Eso es el cuadro de la pobreza absoluta, de la total maldición financiera. Eso fue exactamente lo que

sufrió Jesús en la cruz del Calvario. Gálatas 3:13 dice que CRISTO NOS REDIMIÓ DE LA MALDICIÓN

DE LA LEY, HECHO POR NOSOTROS MALDICIÓN; y el versículo siguiente afirma que esto ocurrió

para que17

pudiéramos tener la bendición de Abraham, la cual incluía prosperidad económica.

«

Dios NO lo destinó a Usted a la miseria, la escasez y la necesidad. Él lo llamó para bendecirlo.

Usted debe saber esto. Es imprescindible que lo sepa.

I Pedro 3:9 SABIENDO QUE FUISTEIS LLAMADOS PARA HEREDAR BENDICIÓN

Dios quiere prosperarte

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4 Este tipo de predestinación es falso porque la Biblia asegura que el mismo Dios es quien te ha dado

el poder de hacer riquezas. Considera Deuteronomio 8:18

ACUÉRDATE DE JEHOVÁ TU DIOS, PORQUE ÉL TE DA EL PODER PARA HACER LAS

RIQUEZAS. Dios no te daría el poder de hacer riquezas si hubiera planeado mantenerte pobre y

miserable el resto de tu vida. Así que ahora mismo debes de tomar una decisión: o te resignas a

seguir pensando que eres una maceta y nunca tendrás la oportunidad de pasar del corredor, o

rechazas esa mentira satánica y empiezas a creer y actuar como un hijo de Dios que fue llamado

para heredar bendición.

A estas alturas algunos de tus viejos pensamientos deben de estar desapareciendo y tu mente

debe de estar empezando a renovarse con la Palabra de Dios.

Sería conveniente hacer un alto y volver a leer estas primeras páginas. Busca las citas en tu

propia Biblia, lee el contexto.

Asegúrate de que estos principios son la voluntad del Dios eterno para tu vida. No son la teoría

de algún predicador o la opinión de alguna secta, sino que están basados en la enseñanza clara

y consistente de las Sagradas Escrituras. Son tu herencia y debes de reclamarla para que la

puedas disfrutar.

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LECCIÓN 4

DEBEMOS DAR CON LA ESPERANZA DE RECIBIR

Una más de las muchas falsas ideas que nos han inculcado es que debemos ser completamente

desinteresados. Que debemos dar sin esperar recibir nada a cambio.

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