Apple

En palabras de Apple, el iPhone 5 es lo mejor que le ha pasado al iPhone desde su salida en 2007. Para la compañía hoy liderada por Tim Cook, la quinta versión del dispositivo de la manzana es la comunión de todas esas “tareas pendientes” que tenían en mora. Y nuevamente se desató la algarabía por el celular.

El iPhone 5 llegó con pantalla más grande, extendiéndose a cuatro pulgadas; una mayor velocidad de conexión, la LTE 4G; y un sinfín de elementos que lo hizo ser adquirido por más de cinco millones de personas, en apenas tres días.

Pero no solo de la manzana vive el hombre. A la par de este dispositivo, una serie de smartphones amenaza su popularidad. No son teléfonos regulares. Son la punta de lanza de la tecnología móvil, que prueba hay para todos en este mercado telefónico.

El hoy confeso enemigo de Apple, Samsung, lidera esta resistencia móvil con su joya, el Galaxy S3, que conjuga procesamiento y diseño. También la taiwanesa HTC y, para no perder la costumbre, Motorola y Nokia también muestran sus apuestas en la mesa.

Es IOS 6 contra Ice Cream Sandwich y Windows 8. Es continuidad frente a variedad. Es alta definición, es tecnología 4G. Guerra avisada no mata soldado y ya todos mostraron sus mejores piezas. Que el público decida.

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