Servicio Civil De Carrera En Mèxico

INTRODUCCIÓN

El “Servicio Profesional de Carrera” como lo conocemos en México, también denominado en otros países “Servicio civil”, representa un conjunto de reglas y procedimientos administrativos que regulan la entrada-salida, permanencia y movilidad de los recursos humanos dentro de la unidad administrativa, la asignación de las actividades y funciones que los mismos desempeñaran, así como incentivos o remuneraciones contempladas para asegurar el cumplimiento de los objetivos.

El Servicio Profesional de Carrera, representa una política pública que mediante un análisis y evaluación de las áreas de administración pública, sistema burocrático y sus planificaciones, planteó la necesidad de incluir en sus reglas y procesos de funcionamiento el mérito, la competencia y la evaluación como medidas indispensables para remediar fallas en la administración pública tales como: elevados costos fiscales de la practica administrativa, el exacerbado burocratismo, procedimientos ineficientes y la falta de rendición de cuentas.

La implantación de esta política pública encontró terreno fértil en México hace relativamente poco tiempo -10 de Abril de 2003-. Los expertos señalan que fue hasta 2oo3 que México se decidió incluir en su agenda de reforma administrativa la aplicación de “El Servicio Profesional de Carrera” por diversas razones, entre las que destacan la democratización del régimen político.

La preocupación del Gobierno en México por modernizar la burocracia y dar paso a prácticas implantadas en una base legal y racional abandonando el “patrimonialismo” y “clientelismo”, representa también otro factor determinante en la instauración del “Servicio Profesional de Carrera”. Esta preocupación está fundada en nuestras relaciones internacionales, pues de los países miembros de la OCDE, México era el único sin un sistema de mérito en su gestión pública.

Estudios sobre organizaciones exitosas en todo el mundo, demuestran que la clave de su éxito es tener una administración centrada en las personas. Era justo ya el tiempo de que se adquiriera conciencia y se reconociera como eje vital de la gestión pública la dirección profesional del capital humano; un capital humano, -finalmente funcionarios públicos- orientados a resultados y con vocación de servicio.

La SFP, publica reformas al Reglamento de la Ley del Servicio Profesional de Carrera el 6 de septiembre de 2007, con la finalidad de descentralizar la gestión de gobierno.

Los valores que fomenta esta política, son la eficiencia y eficacia de las administraciones públicas en el cumplimiento de sus funciones y satisfacer de manera explícita las necesidades de los ciudadanos, propiciando que los recursos humanos realicen aportaciones a la unidad administrativa apoyados en sus habilidades y talentos creativos.

Otro tópico considerado importante se encuentra en el mismo nombre “Servicio PROFESIONAL de Carrera”… ¿Qué significa Profesionalizar?

• Significa mejorar los procesos de selección al atraer a los mejores candidatos del mercado laboral.

• Crear mecanismos que garanticen que los servidores públicos cuentan con conocimientos y habilidades actualizadas para desempeñar sus tareas y actividades

• Establecer criterios de evaluación periódicos para valorar si los servidores cumplen con las metas que se fijaron de la manera mas efectiva y eficiente posible

DESARROLLO

La realidad de la Administración Pública…

Supongamos el siguiente escenario: a usted se le designa como nuevo titular de una dependencia importante del sector público. Se le advierte que para operar deberá sujetarse a todas las restricciones existentes.

No puede adquirir herramientas de trabajo (v.g. papel, tinta, plumas, mesas y computadoras) sin pasar por los trámites requeridos (que son complejos y seriamente controlados por una o dos unidades centrales). No tiene flexibilidad ni autonomía (o, si la tiene, está demasiado condicionada) en el manejo de recursos humanos, materiales, financieros y administrativos.

Por diversas razones, una parte de su personal es inamovible, independientemente de su desempeño. Aunado a lo anterior, se enfrenta a serios problemas de cultura institucional (el personal está desmotivado: se halla en una crisis moral de credibilidad, no tiene expectativas de desarrollo y percibe un sueldo muy bajo). De hecho, casi 70% de los buenos elementos que formaban parte de la administración precedente, probablemente abandonarán sus puestos durante las próximas dos semanas, con la finalidad de acompañar en sus nuevas funciones al titular que usted sustituye.

Por éstas y otras razones de carácter cultural, le será difícil contar con documentos e información sobre proyectos ya realizados (memoria institucional diluida}. Como resultado de lo anterior, la misión de su dependencia es poco clara. Por otro lado, tiene que cumplir con 57 programas, 850 actividades y, aproximadamente, 2 500 procedimientos, cuyos costos y beneficios reales se desconocen. Por si esto fuera poco, se le recomienda tener presente que uno de sus incentivos es el de realizar tareas con las que su jefe esté complacido, pues él es el principal evaluador de sus servicios (no se preocupe por los ciudadanos)

Andrés Roemer

El Servicio Civil de Carrera es un método de administración de personal público cuyas principales características son el ingreso por concurso o examen, el ascenso por méritos y antigüedad, la neutralidad política, la profesionalización y la estabilidad en el empleo.

México ha contado desde hace muchos años con disposiciones jurídicas e institucionales para regular las funciones de los servidores públicos. Sin embargo, dichas disposiciones no siempre han estado vinculadas de manera sistemática conformando un esquema global y coherente, sino que se han presentado de manera desarticulada y esporádica, con resultados escasos en cuanto al establecimiento de un servicio civil de carrera en la totalidad del gobierno. Esto tiene su origen en las características históricas del sistema político mexicano, el cual ha propiciado que los procesos de selección de funcionarios públicos estén dominados por políticas clientelistas. Hoy en día es común ver áreas del gobierno donde el reclutamiento y la selección de funcionarios se realiza por medio de contactos, recomendaciones y compromisos políticos.

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