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Agentes Socializadores


Enviado por   •  25 de Marzo de 2013  •  3.698 Palabras (15 Páginas)  •  637 Visitas

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AGENTES SOCIALIZADORES

Si bien la familia es indudablemente el principal constructor de la socialización, otros agentes trabajan en el mismo objetivo, y su acción no debe desdeñarse. Aquí se abordarán Algunos de ellos: los grupos de iguales, las instituciones educativas, las confesiones religiosas y los medios de comunicación social.

Los compañeros

Como se recordará, una de las tareas evolutivas del adolescente tiene que ver con el establecimiento de relaciones amistosas con el grupo de sus iguales. Esta tarea no se inicia con la adolescencia, pero en ella adquiere peculiaridades especiales, porque el sujeto comienza a experimentar "seriamente" el ser adulto en un momento en que los cambios son características de su ser, y le plantean la necesidad de adaptarse.

la presencia de otros que están en sus mismas condiciones, sobre todo cuando las tensiones con los padres, profesores y demás adultos son altas, constituye un apoyo y ayuda de valor considerable. Con ellos aprende a relacionarse, a ejercer el liderazgo y a someterse, a establecer objetivos y metas, a obedecer normas, a adquirir habilidades sociales, a compartir experiencias y a descubrir nuevos horizontes.

El hecho de ser igual que sus compañeros, es decir, de estar embarcados todos en la misma empresa y abordando los mismos problemas: disgusto hacia los padres y adultos, sorpresa por los cambios, preocupación por el sexo, etc., tranquiliza al adolescente

Las relaciones que el sujeto mantiene con sus iguales sufren cambios considerables a través de la adolescencia. Suelen reconocerse tres tipos de grupos: la amistad intima, la camarilla y la barra; y pudiéndose incluir también la pandilla y los grupos formales.

El gráfico 1 muestra los estadios del desarrollo del grupo durante la adolescencia, según un trabajo ya clásico realizado con 303 adolescentes australianos (Dunphy, 1963).

Si se observa detenidamente el gráfico, se identificarán dos tipos de grupo: las camarillas y las barras. Aquéllas están formadas inicialmente por sujetos del mismo sexo (etapa 1). Después se producen los primeros intentos de relación e interacción entre camarillas de distinto sexo, pero los sujetos que inician esta interacción sólo lo hacen cuando tienen el apoyo del resto de los componentes (etapa 2).

En la etapa 3, se forma una unidad heterosexual con miembros de las camarillas unisexuales, generalmente de rango elevado, los cuales pertenecerán, por un lado, a una camarilla unisexual y, por otro, a un grupo heterosexual. Poco a poco se produce una reorganización de las camarillas unisexuales, conformándose las barras o grupos heterosexua1es (etapa 4) que en la adolescencia avanzada se debilitarán al disminuir la necesidad del apoyo del grupo, y aumentar la formación de camarillas formadas por parejas heterosexuales casi independientes (novios).

La barra es el más extenso e impersonal de los grupos considerados en el estudio, está formada por sujetos que poseen intereses, gustos o ideales comunes, esto mantiene su cohesión. Mientras que en las amistades intimas y camarillas el atractivo mutuo es más importante (Hurlock, 1980).

Las barras sirven como foco o centro de actividades sociales amplias y organizadas, tales como bailes y fiestas, mientras que las camarillas giran alrededor de la conversación, siendo instrumento de difusión de la información dentro del grupo, de preparación de las actividades y de evaluación posterior (Dunphy, 1963).

La informacion de los grupos y camarillas, así como su duración, está condicionada por varios factores. El lugar de residencia y la ubicación de la institución educativa son dos de ellos. Dado que estas variables tienden a estar fuertemente relacionadas con los niveles socioeconómicos, este factor pasa prácticamente a ser determinante fundamental. Como señalan Noguera y Escalona (1989), aun en países donde parecen existir pocos prejuicios en este sentido, como aparentemente es el caso de Venezuela, es muy poco frecuente encontrarse con una camarilla integrada por adolescentes de nivel de pobreza crítica y adolescentes de clase media alta, por ejemplo.

Se han realizado numerosas investigaciones para descubrir cuáles son las características que influyen en la popularidad de los adolescentes y que determina su participación en los grupos.

La influencia que ejerce el grupo sobre el adolescente generalmente es sumamente fuerte, en especial durante la pubertad, aunque cediendo en la adolescencia tardía. Se caracteriza por una acomodación y conformismo críticos y extremos que no se corresponden con la oposición sistemática a los adultos, y que es incomprendida por éstos, causando enormes malestares. En un momento en el que la autoestima y la identidad están en formación, no tiene nada de extraño que el adolescente se vuelva hacia sus iguales que lo acogen y con los que se identifica, pues están pasando por las mismas circunstancias.

En ocasiones, los adolescentes no pertenecen realmente a ningún grupo, pero eligen su propio grupo de referencia a través de los medios de comunicación, y actúan como si pertenecieran a él y, por tanto, con idéntica manera de comportarse.

Grupos formales

Algunos adolescentes que no logran, por múltiples circunstancias, encajar en los grupos mencionados (barras y camarillas), entran a formar parte de grupos formales, supervisados por adultos, que poseen organización y actividades preestablecidas, más o menos rígidas: clubes deportivos o ecológicos, acción católica, juventudes políticas, grupos de acción vecinal, grupos

De rescate.

Estos grupos formales representan un espacio "seguro" en el que los adolescentes pueden llevar a cabo tareas de tipo social que facilitan su desarrollo como personas responsables.

Noguera y Escalona (1989) investigaron en adolescentes caraqueños su participación en

Organizaciones formales de tipo deportivo, religioso, político, cultural y de acción social. Lamentablemente, la participación era mínima, en la mayoría de los casos no alcanzaba el 10%, salvo en el deporte organizado. Todo ello indica un alejamiento de la juventud de las organizaciones formales de la sociedad, lo cual deberá llevar a reflexionar.

Las pandillas

No pocos adolescentes no encajan ni en las camarillas, ni en las barras, ni en los grupos formales. Se incorporan a las pandillas que tienen características similares a las camarillas. Diferenciándose en que se orientan a una actividad abiertamente agresiva y transgresora de las normas sociales, llegando en casos extremos, aunque no infrecuentes, a la

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