Comprension Lectora

COMPRENSION LECTORA UN RETO A SEGUIR

La necesidad del ser humano por comunicarse y recrear su realidad desde tiempos muy remotos generó el surgimiento de la literatura que es una forma de expresión de ideas y sentimientos a través del lenguaje. La literatura resulta ser una fuente inagotable de estímulos a la imaginación y a la conciencia del individuo.

Durante el proceso de desarrollo educativo de un alumno se busca que aprenda y evolucione en habilidades de habla y escucha; así como que se le facilite la interacción con su medio ambiente; que aprenda a su criterio individual y colectivo acerca del mundo en el que habita. Cada alumno posee un momento histórico, socio cultural diferente al de otros, por lo cual se desprende un abanico de conocimiento, con su intelecto el niño realiza una serie de operaciones que facilitan la comprensión de su entorno, la estructuración de la realidad y la adaptación a ella.

Como ya es sabido la lectura en la época actual es la base del aprendizaje permanente; donde es fundamental la comprensión del texto para asimilar los mensajes. La formación lectora se basa en programas que integran diferentes componentes: diversos textos, discusiones entre maestro y alumno, implementación de estrategias de análisis y comprensión en procesos de lectura grupal e individual, actividades de escritura, como la redacción de cuentos y construcción de textos. Siempre leemos en todo momento y lugar y se encuentra en ello un lenguaje que se dirige a todo el mundo, el cual es de tal índole que cada quien puede encontrar en él algo con que quedar interesado y entusiasmado de insertarse en otro mundo hojas, letras y en ocasiones de imágenes.

La lectura proporciona al alumno diferentes tipos de experiencias; no es lo mismo leer un cuento que tiene un fin recreativo, a un relato sobre un acontecimiento histórico para elaborar una tarea o entender un problema de matemáticas para encontrar su solución. Lo trascendental de la lectura es que en base a esta el alumno pueda ir elaborando en la medida de sus posibilidades sus propias redacciones, además de que la construcción literaria favorece en el niño la interpretación de lo real, siempre y cuando por intervención del adulto, se le enseñe a manejar la ficción, es decir a “domesticarla” a favor del desarrollo de su creatividad y de su conocimiento.

Cabe señalar que un estudio realizado por Singer (1977), éste manifestó que los niños que creaban fantasías tenían mayor poder de concentración, eran menos agresivos y disfrutaban más con lo que estaban haciendo que los que fantaseaba menos. En relación al párrafo anterior sería importante crear espacios para que los alumnos tuviesen un tiempo determinado en el horario de clases donde se les permitiera de manera libre la producción de un texto breve y que ahí ellos se explayen todo lo que quieran, sin límites y fomentado un ambiente

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