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Ensayo Los Cuatro Acuerdos


Enviado por   •  22 de Octubre de 2012  •  11.215 Palabras (45 Páginas)  •  799 Visitas

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Introducción

1. No Supongas

No des nada por supuesto.

Si tienes duda, aclárala.

Si sospechas, pregunta.

Suponer te hace inventar historias increíbles que sólo envenenan tu alma y que no tienen fundamento.

2. Honra con tus palabras.

Lo que sale de tu boca es lo que eres tú.

Si no honras tus palabras, no te estás honrando a ti mismo; y si no te honras a ti mismo, no te amas.

Honrar tus palabras es ser coherente con lo que piensas y con lo que haces

.Eres auténtico y te hace respetable ante los demás y ante ti mismo.

3. Haz siempre lo mejor, si siempre haces lo mejor que puedas, nunca podrás recriminarte ni arrepentirte de nada.

4. No te tomes nada personal.

Ni la peor ofensa, ni el peor desaire, ni la más grave herida.

En la medida que alguien te quiere lastimar, en esa medida ese alguien se lastima a sí mismo, pero el problema es de él y no tuyo.

" Cuando miremos con ojos de niños, tal vez entenderemos como es este juego de vivir y evolucionar”

Dr. Miguel Ruiz.

Desarrollo del tema

Ya dentro de la tónica empleada por el autor, es decir hablando de “acuerdos” el propone cuatro, para alcanzar, lo que poco se menciona directamente en la obra, pero que es la felicidad, y es que el habernos adaptado de una forma abrupta a esta sociedad, nos provoco traumas, que fueron creciendo por la necesidad de más aceptación pero con la mayor carencia de aptitudes, para lograr entrar a un mundo lleno de estereotipos.

Primer acuerdo, “Se impecable con tus palabras”; Mencionare que, es este mi acuerdo principal, ya que después de analizar un poco las letras del Doctor Miguel Ruiz, llego a la conclusión, que lo que en verdad nos quiere decir o hacer saber es la tremenda fuerza y poder que tienen las palabras, pues amigos míos el hablar no solo se reduce a un acto, es una liberación de energía la cual puede ir cargada de cierta manera ya sea negativa y positiva y afectar a quien la recibe, cuántos de nosotros al escuchar una buena pieza musical nos transportamos a diferentes lugares y esto a causa de que la música y los sonidos son energía.

Así las cosas, el autor en este llamado acuerdo, hace hincapié en el poder de la palabra, pero más que eso hace referencia a las consecuencias que puede esta causar debido a la forma o intención con que sea mencionada, pero más importante aun la forma en que el receptor la tome; es decir es malo ofender, pero más malo aún es el aceptar la ofensa y creerla es la materialización que su busco al ofender.

No son solo sonidos o símbolos escritos. Son una fuerza; constituyen el poder que tenemos para expresar y comunicar, para pensar y en consecuencia, para crear los acontecimientos de nuestra vida. Pero son como una espada de doble filo: Pueden crear el sueño más bello o destruir todo lo que nos rodea. Uno de los filos es el uso erróneo de las palabras, que crean un infierno en vida. El otro filo es la impecabilidad de las palabras, que sólo engendrarán belleza, amor y el cielo en la tierra. Según como las usemos, las palabras nos liberarán o nos esclavizarán aún más de lo que imaginamos.

La mente humana es como un campo fértil en el que continuamente se están plantando semillas. Las semillas son opiniones, ideas y conceptos. Si plantamos una semilla, un pensamiento, este crece. El único problema es que, con demasiada frecuencia, es fértil para las semillas del miedo. Todas las mentes son fértiles, pero sólo para la clase de semillas que están preparadas. Lo importante es descubrir para qué clase de semillas está preparada nuestra mente, y abonarla para recibir las semillas del amor.

Una palabra es como un hechizo y los humanos utilizamos las palabras como magos de magia negra, hechizándonos los unos a los otros imprudentemente.

La palabra “impecabilidad” significa “sin pecado”. “Impecable” proviene del latín pecatus, que quiere decir “pecado” y el significa “sin". Un pecado es algo que hacemos y que va contra nosotros mismos. Todo lo que sintamos, creamos o digamos que vaya contra nosotros es un pecado. Voy contra mi cuando me juzgo y me culpo por cualquier cosa. No pecar es hacer exactamente lo contrario. Ser impecable es no ir contra mi mismo. Cuando soy impecable, asumo la responsabilidad de mis actos, pero sin juzgarme ni culparme.

Segundo Acuerdo, “No te tomes nada personalmente”; En realidad, como se podrá notar, este acuerdo es consecuencia directa del primero, partamos de nuestro ejemplo que toma a la ofensa para funcionar, al decirla uno desprende cierta energía, la cual de llagar a cumplir su cometido nos afectara y nos hundirá mas en nuestra ya difícil vida, pero si como lográramos como dice el autor: no tomárnoslos personalmente, esta ofensa solo pasar inadvertida sin afectarnos, y para lograrlo el autor hace una reflexión y nos menciona que el

hecho negativo o la ofensa en sí misma, proviene de una persona que sufre o fue acondicionada por no soportar o para rechazar la situación o a la persona que ofende. Es decir si alguien le dice a otro que es un tonto por decirle a una chica que la quiere o por abrazarla, tal vez en el hogar de aquel lo reprimieron en ese aspecto.

Tercer Acuerdo, “No hagas suposiciones”; Hacer suposiciones, para mi no es malo, lo que es malo y concuerdo con el autor, es l hecho de creérselas, y es que este fue un punto muy bien abordado especialmente por la trascendencia que alcanza ya que nuestras suposiciones nos llevan a formarnos juicios falsos que a la larga terminaran por entristecer nuestra existencia, conduciéndonos a ahogarnos en un vaso de agua. Por ello la mejor solución es la comunicación y creo que en ese punto todos estamos de acuerdo, no solo el autor. Este apartado también nos conduce a la objetividad, es decir a agotar todas alternativas hasta tomar una decisión

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