Maltrato Animal

“La violencia animal un posible reflejo de la violencia familiar”

“La no violencia lleva a la más alta ética, lo cual es la meta de la evolución.

Hasta que no cesemos de dañar a otros seres vivos, somos aún salvajes.”

Thomas Edison.

Los seres humanos durante el trascurso de nuestra vida nos acostumbramos a estar rodeados de mascotas o animales, llegando a formar parte de nuestra familia, recibiendo cuidado, protección y nuestros sentimientos.

Sin embargo, cuando realizamos nuestras compras vemos envases que contienen alimentos de origen animal o cuando disfrutamos de una cena donde está presente este componente de nuestra dieta, jamás nos hacemos las siguientes preguntas:

• ¿Cómo llegó la carne al envase que compramos?

• ¿En qué condiciones fue sacrificado el animal?

• ¿Sufrió maltrato al vivir o al momento de morir?

El maltrato animal aparece mencionado en el artículo 3 de la Declaración universal de los derechos de los animales aprobada por la UNESCO y la ONU en octubre de 1978: "Ningún animal será sometido a malos tratos ni actos de crueldad. Si es necesaria la muerte de un animal, ésta debe ser instantánea, indolora y no generadora de angustia."

Algunas cifras y Hechos del Maltrato Animal Desde el año 2000, la Humane Society de los Estados Unidos ha hecho estudios de la crueldad hacia los animales para recopilar información y tomar un diagnóstico de la situación. Un informe del año 2003 basado en el análisis de 1.373 casos de crueldad hacia los animales reportó que unas 1.682 personas estaban involucradas en los hechos. De todos los casos reportados, un 57% eran daños causados intencionalmente a los animales, mientras que un 43% eran casos extremos de negligencia (descuido). El reporte incluye casos de peleas animales (perros y de gallos, principalmente).

Las mutilaciones, golpes, quemaduras, envenenamiento, experimentos científicos el abandono, la falta de cuidado, desgarramiento por la obtención de sus pieles, etc. Existen innumerables formas de maltrato animal, cuyo principal objetivo es exhibir la debilidad de los animales ante un ser superior como el hombre, que a su vez posee una total capacidad de dominio absoluto.

La violencia es un círculo con leyes propias. Entramos en ese círculo desde el instante en que nacemos en una familia violenta. No solo me refiero a la violencia “visible” (que se manifiesta a través de los golpes, gritos o amenazas) sino también a la “invisible” (violencia del desamparo, abandono).

La crueldad hacia los animales y la violencia familiar la vivencia doméstica generalmente afecta

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